Laura – Esfera Nexus
Mañana

Caminábamos a paso ligero detrás de aquella mujer, Zahra o algo así había dicho que se llamaba. Intentaba recordar las razones que me habían llevado a estar allí, mientras atravesábamos el angosto bosque, pero no se me ocurrían. Jane me había pedido que fuera con ella y como era lo más parecido a una amiga que tenía en la Universidad, le había dicho que sí. Bueno, a lo mejor también había influido el hecho de que Henry también se había apuntado, aunque fuera con el grupo contrario.
La cuestión es que empezaba a hartarme. Tenía sed, ganas de hacer pis y me empezaban a doler las piernas. Mi vida en la isla siempre había sido muy tranquila: estudiaba, iba de fiesta, tomaba café con gente de las altas esferas y me tostaba al sol en la playa. No era una chica de acción y tampoco me interesaba. En el mundo había muchísima gente y seguro que estaban todos encantados de salvar al resto de la población. Vamos, que yo ni siquiera era de ese tipo de gente que hacía donaciones a ONGs. Cuando veía a los de la carpeta pulular por el campus, huía en dirección opuesta.
Supongo que por eso tenía la sensación de que estaba perdiendo el tiempo. Miré a Henry, que iba a mi lado y le sonreí de medio lado. Él se puso un poco nervioso y se tropezó con una rama. Por suerte, no estábamos en un acantilado o se habría matado.- [Laura]¿Estás bien?[/Laura]- le pregunté tendiéndole la mano y él se agarró para incorporarse.
– [Henry]Lo superaré[/Henry].- me respondió sacudiéndose la tierra de los pantalones vaqueros.
– [Zahra]No lleváis un buen ritmo[/Zahra].- se quejó la tía aquella que llevaba una capa negra y un bastón para apoyarse. Parecía..ese del libro del pelirrojo que tanto le gustaba a Henry: ¿Quote?
– [Idris]Falta de costumbre, Legolas.[/Idris] – nos excusó Idris.
– [Zahra]La chica es un estorbo[/Zahra].- puse los ojos en blanco y me dieron ganas de tirarle una piedra a la cabeza. El que se había caído era Henry pero la que molestaba era yo. Menuda misógina estaba hecha.- [Zahra]Y ese también[/Zahra].- me consoló pensar que molestábamos los dos, la verdad.
– [Henry]No dirías lo mismo si la vieras en acción[/Henry].- Henry me guiñó un ojo. Su mochila parecía bastante más profesional que la mía, que era más bonita que práctica.
Continuamos andando a buen ritmo, sin parar ni para beber agua. El bosque estaba hasta arriba de vegetación y el suelo embarrado. Menuda mierda de sitio. Con lo bien que habría estado en un chiringuito Ipanema con un cóctel. – [Henry]No puedo seguir este ritmo[/Henry].- le comenté a Henry.
– [Henry]Sí puedes. Eres una Petrov. Piensa en la recompensa[/Henry].- no sabía a qué se refería. Lo único que me apetecía era volver a casa, pero asentí y continué andando.
Llegados a un punto, nos tocó atravesar un camino diminuto sobre la cima de una ladera y no sé qué hice, porque acabé pisando mal y caí rodando.- [Zahra]Dejadla[/Zahra].- escuché decir mientras caía. Tuve claro que me mataba y solo podía pensar en mi casa, en mi familia y…en Henry. ¿Qué mosca me había picado? Un año viajando juntos, durmiendo el uno al lado del otro y no había pasado NADA. Parecíamos dos…setas. En serio, nada. Ni un roce, ni un «aquí te pillo, aquí te mato». Por las noches, hablábamos un rato y él se quedaba leyendo hasta que caía frito.
– [Idris]¡Mierda![/Idris] – exclamó Idris.
– [Zahra]Solo nos retrasará[/Zahra].- se quejó Quote otra vez. Dejé de rodar y choqué contra una piedra. Los protectores que llevaba en los brazos saltaron por el golpe y se partieron en unos cuantos trozos. Ahora tendríamos que arreglarlos. Con lo que me había costado ponerles los cristales de Swarovski.
– [Henry]No la voy a dejar atrás, así que deja de repetirlo[/Henry].- la mano derecha me ardía y no me atrevía a moverla. [Henry]Yo tengo la culpa de que esté aquí.[/Henry]
– [Laura]Me duele mucho[/Laura].- Henry llegó hasta donde estaba y me apartó el pelo de la cara.- [Laura]Soy un estorbo[/Laura].- no pude evitar llorar un poco. Estaba avergonzada.
– [Henry]No digas eso[/Henry].- me ayudó a sentarme contra la piedra con la que me había golpeado y me miró para asegurarse de que estaba bien.- [Henry]¿Te has dado en la cabeza?[/Henry]- negué con ella, mientras escudriñaba mi rostro.- [Henry]¿Dónde estamos?[/Henry]
– [Laura]Que no me he dado…[/Laura]- solo me dolía la muñeca, pero Henry parecía dispuesto a operarme a corazón abierto.
– [Henry]¿Te acuerdas aquella vez en Cabo Verde?[/Henry]- seguía a lo suyo.
– [Laura]¿Cuando te picó la medusa y quise hacer pis sobre tu pierna?[/Laura]- me tapé la cara avergonzada.
– [Idris]¿Eso no es de un capítulo de Friends?[/Idris]- terció Idris y el suelo empezó a temblar de forma violenta. Tanto, que Idris y Henry tuvieron que sujetarse.- [Idris]¿Un terremoto? ¿Justo ahora? Venga…[/Idris] – se quejó.
– [Laura]Soy yo…[/Laura]- Tomé aire para que dejara de temblar. Me llevé el terremoto a mi interior y pareció contenerse, pero no duraría mucho por culpa del dolor. Señalé con la cabeza en dirección a los guantes y vi que Idris me miraba con cara de pánico. Entonces, me fijé en que tenía la muñeca hinchada como si hubiera engordado cien kilos de golpe. Al verla, noté que perdía el conocimiento, pero no llegué a irme del todo.- [Henry]Tranquila, déjame que le eche un vistazo[/Henry].
– [Laura]No, no, que me duele mucho…[/Laura]- le pedí llorando otra vez.
– [Henry]Tienes que confiar en mí[/Henry].- sus ojos se posaron en los míos y le tendí la muñeca.
– [Laura]No me hagas daño[/Laura].- susurré. Por culpa de los nervios, el suelo volvió a temblar. Era un fracaso. Ojalá fuera la mitad de buena que mi madre.
– [Henry]Nunca[/Henry].- me vendó la mano como pudo y me dio una pastilla de su bolsa, que debía ser un antinflamatorio.
– [Idris]¿Esta escena no era diferente? ¿Alguien más oye a Lady Gaga de fondo?[/Idris]- escuché decir a Idris.
I’m falling
In all the good times
I find myself longing for change
And in the bad times I fear myself
Vi que Henry le decía algo a Idris, que se quedó a mi lado el tiempo que tardó en hacerme efecto la pastilla y que él utilizo para hacerme un apaño en los guantes.- [Idris]Viendo la ayuda de Furiosa, si se te va de madre el poder apunta hacia allí.[/Idris] – sonreí al escucharle bromear, pero la verdad es que no sabía dónde se había metido nuestra compañera de viajes.
Henry volvió al poco. Los guanteletes no estaban pasando por su mejor momento, pero aguantarían.- [Laura]Quiero irme a casa[/Laura].-admití.- [Laura]No sé qué hago aquí[/Laura].
– [Henry]Piensa que es una más de nuestras aventuras[/Henry].- me ayudó a colocármelos en la mano buena. No pararían mi poder del todo, pero me ayudarían.- [Henry]Cuando salgamos de aquí, podrás contárselo a tu madre[/Henry].- me incorporé con su ayuda.- [Henry]¿Puedes andar?[/Henry]- le dije que sí con la cabeza y empezamos a subir por la ladera.
La verdad es que no lo pensé mucho. Me puse de puntillas y fui a darle un beso en la mejilla.- [Laura]Gracias[/Laura].- pero calculé mal y acabé dándoselo en el cuello. A él se le puso la piel de gallina y noté que parecía nervioso…o incómodo.- [Laura]Error de cálculos, perdona[/Laura].- e intenté ponerme a la altura de Idris.
– [Idris]Uhhh girl, she done already done had herses[/Idris].- me soltó este cuando estuve a su lado.
– [Laura]Calla[/Laura].- le pedí cuando volvimos a estar en el camino.
– [Idris]Te sienta bien la muerte inminente.[/Idris] – me guiñó un ojo y le amenacé en ruso. Nuestra guía de viajes volvió. Menuda rata.- [Laura]Ha sido un error[/Laura].
– [Idris]Sure, Jan[/Idris].- me dieron ganas de aporrearle.- [Idris]Nadie besa en el cuello por error, señorita Sharapova[/Idris].
– [Laura]Eso es racista[/Laura].- enarqué un ceja.- [Laura]Es Petrov[/Laura]
– [Idris]¿Racista? Tengo un montón de amigos negros.[/Idris] – me respondió. – [Idris]Ser el único negro de este post me da inmunidad. Además, no andaba muy desencaminado. Casi como tú cuando has ido a besar a Henry en el cuello y lo has hecho[/Idris].- me acusó.
– [Laura]Dilo más alto, que quedan un par de personas que no te han oído en la Tierra[/Laura].- me crucé de brazos.
– [Idris]¡HAS IDO A BESAR A HENRY EN EL CUELLO Y LO HAS HECHO![/Idris].- chilló. Quote y Henry nos miraron y luego siguieron andando.
– [Laura]¡PUES SÍ![/Laura].- grité yo también.
– [Idris]PUES GENIAL[/Idris].- continuó gritando.
– [Laura]¿Y AHORA QUÉ?[/Laura]
– [Idris]AHORA ACABA EL MALDITO POST Y REZA PORQUE NO HAYA UN BICHO DE ESOS CERCA O NO LO CONTAMOS[/Idris].- tuve que reírme.
Estaba en mitad de la nada, me había caído por una ladera y echaba de menos a mi madre, pero al menos, estaba en buena compañía.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.