[align=center][b][font= Book Antiqua][SIZE=4][color=black]Dominic Williams | ¿Calles de Moondale?[/SIZE][/color][/font][/b]

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Tosí intentando echar el agua fuera de mis pulmones pero no salió nada. Había vuelto a despertar y sin embargo todo lo antes vivido había sido demasiado real. La falta de aire, la angustia de sentir como no podía respirar y tragaba agua, la sensación de que tu vida se va apagando poco a poco. En menos de una hora debería haber muerto dos veces, y sin embargo había vuelto a despertar desorientado como las otras veces.

Seguía sin comprender que estaba pasando, pero por alguna razón no podía morir. Me levante mirando a mi alrededor para ver donde me encontraba esta vez, no era un bosque ni un barranco, era una ciudad o lo que quedaba de ella. Edificios con la fachada derruida, otros que difícilmente podrían seguir en pie por mucho más tiempo, coches volcados, escaparates saqueados, no sabía dónde me encontraba pero el letrero de uno de los negocios respondió todas mis respuestas. En el cartel medio quemado aun podía leerse 7th Heaven, estaba en Moondale o lo que quedaba de ella.

Me acerque hasta la entrada e intente abrir la puerta pero estaba completamente cerrada, ni siquiera se movió un poco cuando tire de ella, pero note algo extraño en el interior, algo que no parecía humano. Eche a andar por las calles desiertas intentando encontrar a alguien que me diera información de que es lo que había sucedido. Saque el móvil del bolsillo e intente llamar a Jessica para saber que estaba bien en Inglaterra y todo lo del bosque había sido un sueño como esperaba pero no había cobertura.

Un relámpago ilumino el cielo y las calles por un segundo, acto seguido cayeron un par de gotas dispersas y no tardo en llover con intensidad. Seguí caminado bajo la lluvia buscando a alguien, pero al parecer en lugar de encontrar yo a alguien, alguien me encontró a mí. Escuche como alguien se acercaba pisando los charcos que ya se habían formado en el suelo, al girarme vi de quien se trataba y algo dentro de mí se encendió, una ira repentina.

[b][i]- Creo que me buscabas.-[/i][/b] gritó el vampiro a un par de pasos. [b][i]- Deacon Frost.[/i][/b]

[b]- En realidad apenas te he buscado. Debo darte las gracias por venir tú hasta mí.-[/b] Apreté los puños con fuerza conteniéndome para no abalanzarme ya sobre él. Debía contenerme, esperar que atacara él, descentrarlo. ¿Pero como desconcentras a alguien cuando en el fondo estas deseando hacerle sufrir?

[b][i]- No te preocupes, necesitaba un entretenimiento después del aperitivo.-[/i][/b] A pesar de estar oscuro y el aguacero que estaba cayendo pude verlo, ese gesto de relamerse los dientes.

[b]- No deberías buscar pelea después de comer. Puedes sentirte demasiado… lleno.-[/b] Dudaba que se hubiese alimentado de alguien, Moondale estaba en las últimas y no había nadie en las calles. La duda de saber que había pasado podía esperar, ahora tenía un vampiro que había vivido más tiempo del correspondido.

[b][i]Soy un poco goloso.-[/i][/b] sonrió ampliamente y satisfecho de sí mismo. [b][i]- Y bien, ¿por qué me buscabas?[/i][/b]

[b]- Hace casi 20 años, te enfrentaste a una cazadora y la mataste. ¿Lo recuerdas?.-[/b] Tenía pequeños recuerdos de aquella noche. Jessica y yo escondidos en el desván. Por suerte ella estaba dormida, si hubiese llorado no me quiero ni imaginar que podría haber pasado. Ese sonido le los muebles romperse, esos puñetazos y gemidos, seguían resonando en mi mente.

[b][i]- Oh sí, claro que lo recuerdo… –[/i][/b] Añadió haciendo como que pensaba en tono burlón. [b][i]- No tendría que haberla matado tan rápido, su sangre estaba deliciosa. –[/i][/b] sonrió de nuevo y recordé esas risas de aquella noche. Apreté los puños con más fuerza, tanta que note como con las uñas me cortaba en la palma de las manos.

[b]- Pues yo soy su hijo, y tu tiempo en este mundo acaba aquí y ahora.-[/b] Estaba cansado de hablar, debía haber saltado a su cuello nada más verle. Cualquier otra persona no se habría parado a hablar con el asesino de sus padres.

[b][i]- Su hijo… con razón se debatía tanto mientras se le iba apagando la vida.-[/i][/b] Cada palabra que salía de su boca me encendía mas, acelere el paso con el brazo preparado para asestar el primer golpe.

[b]- Espero que estés preparado porque ahora mismo solo tengo una cosa en mente.-[/b] Salte y desde el aire le aseste un derechazo haciendo que cayera al suelo. No tardo en levantarse, en el labio tenía un pequeño corte y sonrió transformando su cara de vampiro.

[b][i]- Yo también. –[/i][/b] Añadió cargando hacia mí.

La lluvia caía con fuerza y apenas conseguía ver algo, esquivaba unos golpes y encajaba otros. Cada vez que me golpeaba volvía a mirarlo rápidamente, no era el momento de mirar hacia otro lado en cada golpe que me diese. No me pare a sentir el dolor de los golpes, decidí acumularlos y devolverlos en la primera oportunidad que se me presentara.

Me cubrí la cara con los brazos, cuando apenas puedes ver a tú rival es mejor cubrirse y esperar tú momento. Conté la duración de los golpes en mis brazos, cuanto tardaba de un golpe a otro, al quinto golpe lo agarre por el brazo y tire de él hacia arriba desencajándoselo.

En el instante que tardo en recolocárselo me lance contra él. Lo agarre del cuello arrastrándolo hacia la primera pared que se interpuso en el camino. Sin soltarle del cuello golpee con fuerza con la mano libre. Él intentaba liberarse arañando el brazo con el que le agarraba del cuello pero no sentía el dolor, solo una ira acumulada durante demasiado tiempo.

Apenas conseguía reconocerme en ese momento, por lo general era pelear un poco y clavar la estaca en la primera oportunidad que se presentara. Con él no, quería que este momento durara, que sufrieran lo que ellos sufrieron, lo que yo sufrí. Note como apenas ponía resistencia, había dejado de arañar y cuando lo solté cayó de rodillas al suelo exhausto.

[b][i]- Matarme no te los devolverá.-[/i][/b] Sonrió o al menos eso intento ya que apenas podía esbozar una sonrisa. Tenía la cara hinchada, varios cortes y la mirada perdida.

[b]- Lo sé. He tenido un objetivo desde los 10 años, no te haces una idea de lo que llevo esperando este momento, ver al asesino de mis padres así, arrodillado ante mí.-[/b] Lo levanté del suelo pegándolo contra la pared para que se mantuviera en pie. Saque la estaca de la muñeca y fui clavando la estaca en su pecho, poco a poco. Él apretaba los dientes de dolor y me miraba con odio, pero nada podía hacer ya por su vida [b]- No, matarte no me los devolverá, pero por fin podré descansar tranquilo sabiendo que su asesino ya no camina por este mundo.[/b]

La estaca atravesó su corazón, o lo que quedaba de el. Mientras se convertía en polvo agarre su cabeza para que evitara mirar hacia otro lado, lo último que vería antes de desaparecer para siempre seria mi rostro y no un edificio derruido o un coche volcado.

Lo había hecho, había vencido al vampiro por el que había estado luchando todos estos años. Ahora podía volver a casa o viajar a cualquier otro sitio y continuar cazando. Entonces volví a fijarme en las calles vacías y como todo estaba destrozado. Recordé lo que me dijo Arthur, que ayudara a Daniel. Había vencido a mi vampiro personal, pero por lo que sabía en Moondale había otro mucho más peligroso. No tenía mucha amistad con ellos, de hecho soy bastante cerrado a relacionarme con otras personas, pero por el aspecto en el que se encontraba Moondale podrían necesitar mi ayuda, y como le prometí a Arthur les ayudaría en lo que pudiera.

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[spoiler]Frost por Dracon[/spoiler]