[align=center][b]~ Sylver F. Wolfe | Casa de la Abuela ~ [/b]

[spoiler]Sylver se piensa, en ese post, que toda su vida ha sido un sueño. Que ella en realidad sigue siendo la niña pequeña cuidada por su abuela, y desconocedora de su futuro[/spoiler]
La manta de tericopelo color rosa con la princesa acuática Ariel me recubría todo el cuerpo, aquel diminuto cuerpo. No habia rastro de ninguna cicatriz, y al tocarme el rostro descubrí que no tenia ninguna espantosa arruga. Pero, ¿qué habia sucedido?

El pelo castaño largo, recogido en un lazo color púrpura, caía por uno de mis hombros. El pijama, algo infantil para mi edad, me quedaba pequeño. Aquella cama, aquella habitación, aquel olor a tostadas recién hechas. Volvía a ser yo. Quiero decir, yo en realidad. No era aquella chica sexy y alta, delgada y superficial que batía monstruos junto a una pelirroja y a una rubia. Ya no era aquella chica que se pintaba los labios en cada espejo que veía a su paso, la que conducía sin el cinto de seguridad, y la que tenia su móvil siempre sin batería. Volvía a ser yo, la pequeña Syl-Syl. La que todos llamaban “coletitas”, y la menos popular del colegio. Aquella que pasaba las tardes haciendo galletas con su abuela, y corriendo detrás de Obscure.

Sentí unos pasos subiendo las escaleras, y me revolví en la cama. No podía ser otra persona, aquella a la que más quería, y a la que más echaba de menos. Gracias a Dios que todo aquello habia sido un sueño, nada malo me volvería a pasar. Ahora me tocaba volver a hacer galletas y colorear por fuera del margen.

Cuando abrió la puerta lo único que pude hacer fue sonreir.

-[b]¿Abu?[/b]- dije desde la cama- [b]No te podrás creer lo que he soñado.[/b]

-[b][i]Creo que puedo adivinarlo: Has vuelto a soñar que eres mayor, guapísima y que tienes muchos amigos, ¿a que sí? [/b][/i]- me contestó sentándose a mi lado.

¿Cómo lo sabia? ¿Cómo conocía mi sueño? Era verdad, habia soñado que era guapísima, de escándalo. Que los chicos babeaban cuando yo pasaba, e incluso las chicas. Y eso de amigos era todo verdad. Soñé que una chica pelirroja llamada Diana, junto a una rubia, Ann, pasaban las noches conmigo, jugando a las peleas de almohadas o a pintarnos las uñas. La amistad que siempre quise con las chicas de mi clase, las que me ignoran o me tiran chicles al pelo.

¡Qué lindo sueño!

-[b]Sí, ¿lo puedes creer? Yo con amigos abuela, y muchos. Y todos ellos eran guapísimos. Habia una chica pelirroja que me comprendia cuando hablaba, y que era como yo…ya sabes…una bruja. Y tambien habia una chica rubia muy elegante, y otra más bajita pero muy simpática. Y su novio, que me devolvió a Obscure cuando se me perdió, y…y…[/b]

Hanna sonrió y extendió sus brazos para que la abrazase.

-[b][i]Me gusta más esta versión que cuando me contabas que eras stripper…[/b][/i]- Suspiró mientras me recogía el pelo y me lo volvía a colocar en el lazo. Recuerdo perfectamente la cara que se le quedó cuando le relaté que en mi sueño me quitaba las bragas y los chicos gritaban- [b][i]Tenemos que hablar de algo.[/b][/i]- Seguidamente se separó y se puso seria.

-[b]¿Qué he hecho ahora? Sabes que sin querer suelo romper cosas, pero aún no lo controlo…[/b]

-[b][i]No has hecho nada[/b][/i].- dijo antes de ponerme el dedo en los labios para que guardase silencio- [b][i]Lo que me gusta de los sueños es que no sabemos que estamos soñando hasta que nos despertamos, ¿sabes lo que te quiero decir?[/b][/i]

Asentí.

-[b][i]Por eso es muy importante que cuides de tus amigos y que los quieras como si fueran reales, porque quizás lo son y esto es un sueño, ¿me explico? [/b][/i]- Sonrió-[b][i] Quizás eres esa chica mayor que sueña con su abuela o a lo mejor, eres la niña que sueña con ser mayor. En cualquier caso, tus amigos son reales porque así lo sientes y es muy importante que los cuides, que les dejes formar parte de tu vida y no pongas a tu alrededor ese escudo que tienes con todo el mundo menos conmigo y sobre todo, que salgas con ese tal Dominic del que tanto hablas. [/b][/i]

¡¿Qué, qué?! ¿Cómo habia averiguado todo aquello? Vale, quizás se me hubiese escapado durante un sueño, o en casa, pero mi abuela estaba acostumbrada a que hablase con mis amigos invisibles.

-[b]¿Qué quieres decir abuela?[/b]- mira extrañada-[b]¿Qué quizás ésto es un sueño? ¿o que lo que he soñado es la realidad? No te entiendo. Quiero decir, me recuerdas cuando hablas de «La vida es Sueño», y yo sigo sin entender esa famosa frase que tantos actores han repetido: «Que la vida es un sueño, y los sueños sueños son»[/b]- se rie- [b]Además, ¿cómo es que sabes de ese Dominic? ¡Es un secreto![/b]

-[b][i]Lo que quiero decir es que aunque sea un sueño, debes esforzarte cada hora de cada día por ser la mejor bruja y no permanecer ajena a todo lo que está pasando.[/b][/i]- luego me revolvió el pelo para molestarme, hecho que perfectamente sabe- [b][i]Hay cosas más importantes que ser la chica más guapa, como por ejemplo, ayudar a tus amigos cuando más te necesitan.[/b][/i]- luego se puso más seria- [b][i]Algo malo se acerca y será mejor que no te encuentre peinándote.[/b][/i]

-[b]¿Hay cosas más importantes que ser bella? ¿como ser la mejor bruja, por ejemplo?[/b] – suspiré- [b]Pensé que la vida era un continuo certamen de belleza, y que el dia que no ibas bien peinada no lograrías lo que te propusieses, pero quizás tengas razón[/b]- volví a asentir- [b]Quizás lo unico que necesito es confiar en mí misma, ¿no? [/b]-Me miré los pies, que salían de la manta de Ariel- [b]Pero es tan difícil [/b]-luego me los tapé- [b]¿Mamá era fuerte? [/b]

-[b][i]Hay cosas mucho más importantes que la belleza exterior, como por ejemplo la belleza de éste.[/b][/i]- dijo señalando mi corazón- [b][i]Y no, la vida no es un certamen de belleza, la vida es maravillosa si se disfruta en compañía, pero si piensas que es una competición acabas amargada y con el corazón arrugado como una pasa[/b][/i]- Hizo una pausa. Miró hacia la ventana y vi como sus ojos se humedecían poco a poco. A la abuela le gustaba tan poco hablar de Mamá como a mi comer verduras.-[b][i] Mamá era maravillosa. Fuerte y sobre todo, guapísima por dentro y por fuera. Cuidaba su aspecto, por supuesto, todas las mujeres de la familia somos coquetas pero nunca dejó que eso se interpusiera en su camino, además sé que esté donde esté te sigue queriendo muchísimo y está muy orgullosa de ti, pero estará más orgullosa si me haces caso.[/b][/i]

Justo en ese momento Hanna fue rodeada por un aura blanca, ¿o quizás era el resplandor del sol que entraba por la ventana?

-[b]Lo haré[/b]- asentí rápidamente- [b]Siento si alguna vez te he fallado abuela, no ha sido mi intención. Cuidaré de tus palabras como si de un pájaro herido se tratase, las recordaré cuando crezca y sea la mejor bruja de todas. Lo haré por ti, y por Mamá[/b]- pero poco a poco su imagen se me hacia más difusa- [b]¿Abu? ¿Qué te pasa? [/b]- justo intenté abrazarla pero su cuerpo se desvanecía en humo blanco.

-[b][i]Silver, vete a dormir, cariño.[/b][/i]- escuché su voz a lo lejos- [b][i]Te cuidaré para que no te pase nada.[/b][/i]

Y desapareció. Como la nada. Y entonces me di cuenta de todo.

Sueños, ¿realidad o ficción?

¿Quién era yo? ¿La Sylver-coletitas que dibujaba arcoiris y unicornios en los libros de mi abuela o la Sylver-descarada que dejaba sus labios rojos en cada rostro que veía?