Moondale

DORMIR HASTA QUE TUVIESE LA SUERTE DE MORIRME

[SIZE=4][align=center][b]Diana Echolls | Moondale[/b][/SIZE]

dianapensativa

[SIZE=2]Según mi calendario, ese que yo misma había hecho con los últimos que se imprimieron allá por 2012, estábamos a 11 de Julio de 2016, pero para mí el tiempo se había detenido en un día muy concreto, un día que ni siquiera quería recordar para que no tener que meterme en la cama y dormir hasta que tuviese la suerte de morirme. No es que me hubiese convertido en una emo de golpe, era que simplemente, no podía más.

Me levanté de la cama cuando calculé que ya era lo bastante tarde como para haber desperdiciado el día. Prefería dormir y emplear el poco rato libre que tuviese en ayudar e ir a ver a McLeod que pararme a pensar en la mierda de mundo en el que nos había tocado malvivir.

Ni siquiera me planteé buscarme una ropa bonita. Lo bonito ya no existía y la que tenía era de antes de todo esto, pero me quedaba enorme, como si hubiese sido la protagonista cetácea de ‘Liberad a Willy’, pero la realidad era que ahora no debía pesar más de cincuenta kilos. Me lavé como pude con una palangana de agua helada y me peiné a tientas, evitando mirarme en los espejos que tenía tapados.
No me hacía falta verme para saber que me había convertido en un monstruo. Me bastaba con tocarme el lado derecho de la cara y notar las quemaduras, las cicatrices y mi pobre ojo, que antes había sido precioso y que en ese momento no era más que un agujerito diminuto por el que veía borroso. Pero al menos estaba viva o eso era lo que me decían.

Salí de casa por la ventana, evitando que Daniel e Illya, que estaban en el huerto, me viesen. Le había prometido a McLeod que no le contaría a nadie nada de su escondite y pensaba cumplirlo o al menos, esconderle que se me había escapado su secreto mejor guardado.

El camino hasta la casucha de Chris no fue especialmente placentero. Debíamos salir de casa armados, por lo que antes de salir cogí una [i]hachataca[/i]. La [i]hachataca[/i] no era más que un hacha con el mango afilado a modo de estaca. Así podía cortar cabezas y estacar. Me sentía como una mezcla rara de Rick Grimes el de The Walking Dead con Buffy Summers, la antigua elegida que había muerto –esta vez de verdad- tras lo ocurrido en Reino Unido, pero las armas de fuego no eran lo más sensato, pues un disparo podía hacer que se acercasen engendros de varios kilómetros a la redonda.

Cuando llegué a casa de McLeod (no sin antes [i]hachataquear[/i] a unos cuantos vampiros muertos de hambre), me paré un segundo a observar el “paisaje”. La palabra correcta no era esa, pero no había nada que se le asemejase y “mierdasaje” sonaba a un masaje pésimo. La casa estaba casi en ruinas, pero aún se mantenía en pie. Las ventanas estaba tapiadas con tablones de madera y el jardín era ahora un [i]secarral[/i] plagado de basura, aún así era la más acogedora del barrio.

Atravesé el jardín con cuidado de no clavarme nada, llamé a la puerta y la abrí. Todavía me impresionaba estar cerca de él, incluso cuando ya no éramos nada.
Estaba sentado en la mesa destartalada del salón con una copa en la mano. Al notar que había entrado, levantó la cabeza y como si todavía pudiera verme, sonrió. – [b] [i] [color=#457238]¿Diana? ¿Eres tú?[/SIZE] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#843181] Eso creo[/color] [/i] [/b].- Le respondí cerrando la puerta y avanzando para sentarme a su lado sin soltar la [i]hachataca[/i].- [b] [i] [color=#843181] ¿Puedo pasar?[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#457238]Siempre eres bien recibida, pero me temo que el recibimiento no es el mejor que he hecho.[/color] [/i] [/b] – Le dio otro sorbo a la cerveza y le miré a la cara. La suya no estaba mejor que la mía. Las cicatrices le cubrían los ojos y por ello, había perdido la visión. Aún así, le aparté el vaso. Beber para olvidar ya no se servía de nada.

– [b] [i] [color=#843181] Vengo a pedirte una vez más que te vengas con nosotros[/color] [/i] [/b].- Comencé sin dar rodeos.- [b] [i] [color=#843181] Nos necesitas y nosotros te necesitamos a ti[/color] [/i] [/b].

– [b] [i] [color=#457238]Sólo soy un estorbo, no conseguí cambiar nada y lo perdimos todo. Lo mejor es que me mantenga lejos de vosotros, así al menos conseguiréis sobrevivir.[/color] [/i] [/b] – Me di cuenta de que hablaba casi de forma automática, como si se aprendiese la respuesta para no tener que decirme la verdad. Por eso quería seguir insistiendo, pero no tenía fuerzas.

– [b] [i] [color=#843181] Ni siquiera sé qué decirte, no sé cómo convencerte…esta mierda me ha nublado las ideas[/color] [/i] [/b].- Bufé enfadada. Una cosa era perder media cara, a tu hermana pequeña, a tus amigos, casi todo lo que conocías y mundo entero y otra…bueno, en realidad no había nada peor que todo eso.

– [b] [i] [color=#457238]Intenta aprovechar la vida, no la malgastes viniendo a verme. No merezco la pena.[/color] [/i] [/b]- En ese momento se me escapó una carcajada sarcástica. No era de malas, era que simplemente me encontraba tan mal que no podía hacer más que reírme para no echarme a llorar.

– [b] [i] [color=#843181] A ti parece que te ha mantenido con las de siempre, algo es algo[/color] [/i] [/b].- Me encogí de hombros y le di un sorbo a la cerveza. Cuando el líquido estuvo en mi boca lo escupí como hacían en las películas del Oeste…cuando aún había películas. – [b] [i] [color=#843181] Estás bebiendo amoniaco[/color] [/i] [/b].- Bramé con seriedad como si fuera un tipo duro, pero en realidad me estaba riendo. Necesitaba verle sonreír de nuevo.

– [b] [i] [color=#457238]Y tú sigues intentando hacerme sentir mejor, y lo consigues.[/color] [/i] [/b] – Esbozó una sonrisa. – [b] [i] [color=#457238]¿Cómo estás?[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#843181] Bien, ahora soy interesante además de simpática[/color] [/i] [/b].- Me señalé la cara, pero no me vio.- [b] [i] [color=#843181] Según por dónde me mires puedo ser horriblemente guapa o sólo horrible[/color] [/i] [/b].- Reí de nuevo. Esta vez con amargura. Ser guapa no era lo más importante y menos en ese mundo, pero mi cara no tenía nada de malo y Mason no tenía por qué tomarla con ella.- [b] [i] [color=#843181] Supongo que por eso sigo intentando ligar contigo, eres de los pocos que no pueden apreciar mi belleza picassiana[/color] [/i] [/b].

– [b] [i] [color=#457238]No me hace falta ver para saber que sigues tan guapa como siempre.[/color] [/i] [/b] – Admitió provocando que me ruborizase. Fui guapa durante unos años, pero ahora era una monstruosidad y ya no estaba acostumbrada a los cumplidos. – [b] [i] [color=#457238]¿Y los demás? Daniel, la pequeña, Ed, Illya, tu madre…[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#843181] Hechos un asco, pero al menos ven y tienen las caras en su sitio, algo es algo[/color] [/i] [/b].- Le quité hierro al asunto.- [b] [i] [color=#843181] Quizás si vas a verlos…Lo siento, no me mires mal…¡Por las bragas de Elphaba! Lo que sea. Si vas a lo mejor pasan de estar hechos un asco a una birria[/color] [/i] [/b].

– [b] [i] [color=#457238]Si voy pasarán de estar hechos un asco a no estar. Puedo infundir esperanzas, pero después solo consigo chascos a la altura.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#843181] No me queda más remedio entonces que llevarte a rastras[/color] [/i] [/b].- Me levanté muy decidida y tiré de él que no se movió de la silla.

– [b] [i] [color=#457238]Sabes que puedo dar mucha guerra.[/color] [/i] [/b] – Comentó medio en broma dejando claro que estaba encantado de que tirase de él.

– [b] [i] [color=#843181] Siempre me ha ido la marcha, incluso ahora con media cara estaré encantada de que me des guerra[/color] [/i] [/b].- Sonreí y volví a tirar de su mano.

– [b] [i] [color=#457238]Tu cara no tiene nada de malo, sólo hay que saber mirar a través de las cicatrices.[/color] [/i] [/b] – Continuó – [b] [i]
[color=#457238]No puedo ir Diana, sabes que soy un peligro para todos pero en especial para la niña. Y ya le fallé bastante.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#843181] No creo que la niña se asuste, ¿o tengo que recordarte cómo estamos todos?[/color] [/i] [/b]-Illya era un vampiro, su padre tenía instintos suicidas, yo estaba como unas maracas y Ed…ni siquiera tenía palabras para describir lo que sentía al verle así.

– [b] [i] [color=#457238]Ya sólo me queda la cerveza para controlarme, y dentro de poco no podré conseguir más. Quizá todo esto termine conmigo vagando por los bosques, como un enemigo más. Si es así espero que hagáis lo correcto.[/color] [/i] [/b]- Me pidió.

– [b] [i] [color=#843181] ¿Quieres dejar de auto compadecerte?[/color] [/i] [/b] – Gruñí con enfado.- [b] [i] [color=#843181] No te estoy pidiendo que te vengas, te obligo. [/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#457238]No necesitáis más problemas.[/color] [/i] [/b] – Dio un sorbo a la cerveza que no estaba tan lejos de su mano como pensaba.

– [b] [i] [color=#843181] No los necesito, los quiero[/color] [/i] [/b].- La frase tenía que haber finalizado con un “te quiero”, pero esto no era una película.

– [b] [i] [color=#457238]Yo siempre te quise, pero no soy bueno para ti. Aquí se aplica lo mismo.[/color] [/i] [/b]- De nuevo quise decirle que le quería pero era absurdo.

– [b] [i] [color=#843181] ¿Me vas a obligar a noquearte?[/color] [/i] [/b] – Pregunté sonriendo al ver que ciegos, tullidos y hechos polvo seguíamos siendo los mismos, aunque no lo pareciese.

– [b] [i] [color=#457238]Ya me conoces, tengo la cabeza muy dura.[/color] [/i] [/b] – Concedió el muy cabezota.

– [b] [i] [color=#843181] Por eso sé que nunca admitirías que los echas de menos[/color] [/i] [/b].- Hice una pausa buscando un hechizo.- [b] [i] [color=#843181] Es tu última oportunidad, ven o te teletransporto[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#457238]No puedo ir con vosotros, lo siento.[/color] [/i] [/b] – Se negó una vez más. Mi cabeza parecía bloqueada. Ya ni la magia me quería. – [b] [i] [color=#457238]Te quiero, eso nunca ha cambiado.[/color] [/i] [/b] – Finalizó leyéndome el pensamiento.

– [b] [i] [color=#843181] Está bien saber que hay cosas que nunca cambian[/color] [/i] [/b].- Sonreí al escucharle decir eso y después murmuré unas palabras para teletransportarnos directamente a la cabaña donde estaban los demás.-[b] [i] [color=#843181] Disfruta del viaje[/color] [/i] [/b].

– [b] [i] [color=#457238]Como nunca.[/color] [/i] [/b].- Dijo antes de que empezásemos a desaparecer y unos segundos después, estábamos en mitad del huerto, pisando los preciosos tomates de Illya, pero incluso en ese mundo, había cosas más importantes que la comida o quizás no, pero las penas con amigos parecen más llevaderas.[/color]

[spoiler]McLeod controlado por Dracon. El ambiente y Diana por mí, pero todo supervisado por él para no meter la gamba. Gracias a Alph, Dracon y Eitan por estar ahí y comentar pase lo que pase. Y al que no comente, le mandaré a Diana para que le meta la [i]hachataca[/i] por el culo[/spoiler]

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