Daniel Arkkan | Bosque de los Susurros

[i]El rastro ha desaparecido…[/i]Sin duda Mason sabía cubrir bien sus huellas. Tras varias semanas tratando de seguirle el rastro me había sido imposible en todas las ocasiones.

Estaba tratando de averiguar que tramaba, la razón de esas muertes aparentemente no relacionadas, y no había conseguido nada. [i]Quizá Mac haya averiguado algo.[/i]pensé mientras daba media vuelta en dirección a mi casa.

Necesitabamos parar lo que estaba ocurriendo, muchas de las muertes pasaban desapercibidas, sin duda para los humanos podía ser un asesino en serie, pero quien supiera en realidad lo que ocurría podría sumar las muertes de seres sobrenaturales y sabría de verdad lo que es un asesino.

Tras un buen rato caminando llegué a casa. Estaba hambriento, así que cogí una manzana de la nevera y volví a salir fuera, necesitaba algo de madera de reserva ahora que estaba al llegar el invierno, y no nos vendrían mal unas cuantas estacas, así que eché un vistazo a mi alrededor y localicé un árbol adecuado. Dejé a [i]Ivory[/i] junto a la puerta y corrí hacia el árbol con [i]Ebony[/i] en la mano derecha, cuando ya estaba llegando hice un tajo y el fino tronco del árbol se partió, cayendo este con un ruido sordo. [i]No hay nada mejor que una espada potenciada con magia arcana.[/i] Asesté unos cuantos cortes más al árbol y fui metiendo los trozos en casa para trabajarlos más tarde, fue en busca de otro y repetí el proceso.

Después de dejar los trozos en el cobertizo me senté en el sofá del salón mientras bebía algo de agua. Estaba distraído, habían pasado muchas cosas desde mi llegada a Moondale, ahora tenía algo que me hacía evitar la venganza, pero el asunto de Mason ocupaba toda mi mente. Eché un vistazo a las katanas, las runas estaban impolutas a pesar de todo lo que habían soportado, la magia de mi padre era fuerte en cuanto a mejorar armas se refería, y creo que estas han sido su mejor trabajo, junto con la estaca de Sarah, ese había sido [i][b]nuestro[/b][/i] mejor trabajo juntos.

Pasé unos minutos completamente distraído hasta que volví en mí y pensé que tenía que hacer algo para distraerme. [i]Lo mejor será ir a ver a Mac, así podré ver también a Sarah.[/i] Acto seguido me levanté del sofá y me quité la camiseta, que ya estaba demasiado sudada después de cortar leña, y me fui a darme una ducha rápida.

Unos minutos después salí de la ducha, que me había relajado bastante, me vestí, cogí mis cosas y me dirigí al coche, dejé las katanas dentro de un maletín en el maletero, lo cerré con llave, me subí y arranqué el coche en dirección a la Universidad de Moondale.