Christopher McLeod | Cafetería

– Digamos que en mi otra vida tuvimos una relación algo más…»estrecha».- dijo guiñándome un ojo.

[i]Así que estreché relaciones con una de mis estudiantes y después Los Grandes Poderes la convirtieron en uno de sus campeones y nadie recuerda su antigua forma de ser sino una personalidad que parecía digna de ‘Chicas Malas’….[/i]

– [b]Vaya, eso sí que es una sorpresa.[/b]- sonreí y continué.- [b]Supongamos que te creo. Continúa.[/b]
– Necesito que me digas qué quieres saber exactamente.- dijo sonriendo y enarcando una ceja.
– [b]Empecemos por lo básico, si los Poderes te cambiaron, como eras antes?[/b] – dije recostándome de nuevo en la silla mientras daba otro sorbo al café, malísimo por cierto.
– Diferente.- se quedó callada durante unos segundos y continuó.- No era rubia, ni tonta, ni tampoco había sido Reina del Baile o Jefa de las animadoras. Odio a ese tipo de gente.- me miró fijamente.- ¡Me han convertido en todo lo que nunca he querido ser!

– [b]Sin duda no ha sido una mejoría.[/b] – me eché hacia delante y apoyé los codos en la mesa, juntando las manos. [b]Si te eligieron como campeona, ¿por qué te hicieron esto?[/b]
– Me iba a morir.- ahora parecía algo más triste.- Me dieron a elegir entre dos caminos y escogí éste sin saber muy bien dónde me metía y al parecer, me equivoqué.
– [b]Si sigues viva no creo que haya sido un error.[/b] – mi cara se había puesto más seria desde que dijo lo de su muerte, sin duda no parecía la típica animadora, y todo parecía encajar bastante bien. [i]Será mejor que siga desliando la madeja.[/i].[b]Aún así, si decidieron darte la opción de salvarte, ¿por qué hacer que la gente te recordará como…en fin, como eras antes?[/b]
– Querían castigarme.- suspiró enfadada.- Hice cosas de las que no estoy muy orgullosa y me dieron una lección.- apretó los puños con rabia, las lágrimas parecían a punto de caer de sus ojos, pero se contenía.
– [b]Supongo que querían asegurarse de que no harías ese tipo de cosas de nuevo.[/b] – entrecerré los ojos y continué. – [b]No te preguntaré qué cosas hiciste, pero ¿sabes que fue lo que vieron en ti los Poderes para darte una segunda oportunidad?[/b]
– No lo sé.- bajó la voz y se acercó mucho a mí.- No soy una bruja poderosa…[i]¿Bruja?[/i] Iba a continuar pero la interrumpí para preguntar.
– [b]¿Eres bruja?[/b]
– Sí.- respondió encogiéndose de hombros.
– [b]Supongo que verían que tienes potencial. ¿El Oráculo no te dijo nada?[/b] – pregunté interesado.
– Sí, dijeron que podía serles muy útil.- se apartó un mechón de pelo y siguió.- Se avecinaba algo muy malo y necesitaban gente para el bando de los buenos.- parecía no darle demasiada importancia.- Sí, sé que suena a secta. A estas alturas yo también creo que lo eran.

[i]Quizá ese gran mal sea Mason, quizá la convirtieron en campeona para ayudar a acabar con todas estas muertes.[/i]

– [b]Es un tema delicado, pero creo que necesito saberlo para prevenirlo en caso de que se repita. ¿De qué te morías?[/b] – no sabía muy bien como preguntarlo, pero la mayor parte de las teorías decían que en todas las realidades había patrones que se repetían, y su muerte podía ser uno de ellos.
– Sobredosis de poder.- dio un sorbo a su café.- Me moría de algo que tenía síntomas similares al cáncer.- de nuevo, las lágrimas parecían a punto de desbordarse de sus ojos, pero se recompuso y sonrió.- En realidad, no lo entiendo. Mi poder es una mierda. Ya podía haber tenido algo al estilo de Sabrina, la de ‘Cosas de brujas’ que con sólo mover un dedo aparecía un armario lleno de ropa.- siguió en tono burlón.- No, a mí me tuvo que tocar la precognición esa que no sirve para nada porque de momento, no me ha tocado la lotería…

[i]La dejé terminar, así que además de tener habilidades para la magia, era una precognitiva. Entiendo por qué los Poderes la querían de su bando.[/i] De momento, su historia cuadraba perfectamente.

[b]Ese poder es mucho más útil de lo que crees, y más en un clima tan inestable como el que tenemos ahora…[/b] – eché un vistazo alrededor y vi que la cafetería estaba hasta los topes, en una mesa vi a Sarah dar un sorbo a un café, parecía que compartía mi idea de que el café de la cafetería era horrible. – [b]Será mejor que nos veamos en otra parte, aquí hay demasiada gente y hay muchas cosas que explicar como para hacerlo procurando que nadie nos escuche.[/b]

Diana asintió con la cabeza, nos levantamos de las sillas y nos fuimos en dirección a mi despacho. Esta chica, con ese vínculo con los Poderes, con ese don, podría ayudarnos mucho.