Moondale

UNA CELDA DE CRISTAL

Sarah Echolls | Subterráneo tres

sarahmalacara

¿Cuánto había pasado desde la noche de la fiesta en el Silver? ¿Días, horas o quizás años? Había perdido por completo la noción del tiempo, no sabía dónde estaba ni para qué me querían. Me sentía sola y perdida, pero no encontraba el momento de lamentarme y mucho menos, de pensaren qué estaba pasando y cómo iba a escapar de aquel lugar.

Apenas estaba un rato despierta cuando mis ojos se cerraban de nuevo y después volvía a abrirlos y me encontraba en la misma celda en la que todo había empezado. Era un círculo vicioso del que estaba segura que no iba a salir jamás.
Cuando por fin logré reunir las fuerzas suficientes como para poder levantarme, decidí obsevar dónde me encontraba: Era una celda de cristal, en la que sólo había un camastro, una rendija de ventilación en la parte superior de dos paredes y una especie de cuartucho en el que un inodoro y un estante con toallas y pijamas blancos eran todo el mobiliario. [i]Genial… [/i].- Murmuré con fastidio y me mordí el labio inferior ligeramente nerviosa . Seguía sin entender qué hacía allí.

Entré en “el cuarto de baño” en el que no había espejo, por lo que no pude ver qué aspecto tenía, pero sí noté que mi olor corporal no era del todo agradable, así que como pude, me lavé el cuerpo con un poco de agua – [i]Tanto gasto en mobiliario debió dejarlos sin dinero para jabón…[/i]- , me humedecí el pelo para peinarlo como pude y después, me puse un pijama limpio. Tras eso, vi que había un hueco en la pared y allí deposité el pijama sucio. Me sentía como una cochina, aunque el mal olor parecía haberse mitigado, lo de ‘lavarme como un gato’ no era lo mío.

Cuando salí del cuchitril me acerqué hasta el cristal. Pude ver que en la celda de enfrente se encontraba Daniel. Noté una punzada de dolor en mi pecho tan grande que tuve que sentarme en el suelo. En ese momento fui realmente consciente de que no se trataba de un juego, hasta entonces no me había dado cuenta de la magnitud de lo que estaba sucediendo. Me abracé a mis rodillas y me concentré en no mirar a Daniel o acabaría echándome a llorar. Me sentía impotente, no parecía haber forma de salir de allí y no tenía a McLeod para que me aconsejase.
Intentaba pensar en mi madre y en mis hermanas, pero no conseguía sacar la visión de Daniel en la celda de enfrente de mi mente.

La voz de un hombre me sacó de mis pensamientos.- [b][i]Ya es hora de que despertéis.[/b][/i] – Alcé la vista para mirar a la persona a la que pertenecía esa voz : Era un tipo joven, de unos treinta y tantos años, pero de aspecto severo – [b][i]Seguramente os preguntaréis la razón de que estéis aquí. Es sencilla.[/b][/i] – Vi que miraba a Daniel directamente y el vello se me erizó debido al miedo. – [b][i]Sois abominaciones, seres deplorables que sólo estáis en la tierra para amenazar a la raza humana y mi trabajo es protegerla, protegerla de vosotros.[/b][/i] – Mi cuerpo estaba completamente tenso. Apreté los puños enfadada. Tenía ganas de salir ahí fuera y decirle que yo era una Cazadora, LA Cazadora, mejor dicho. La Elegida, la que recibió el legado directamente de Faith Lehane después de su muerte. Y que mi trabajo no era acabar con el mundo, si no impedir que otros lo hicieran. – [b][i]De ahora en adelante, podéis llamarme Teniente Preston, mi palabra aquí es la ley y dado que vuestra estancia aquí es indefinida, os conviene no retarme.[/b][/i] – Noté caer por mis mejillas lágrimas de rabia, pero intenté contenerme – [b][i]Podéis dar las gracias de servir de ayuda para mejorar la calidad de vida humana, si por mi fuera estaríais todos en una pira llameante.[/b][/i] – tras esta última frase dio media vuelta y se fue.

Procuré serenarme. Teníamos que salir de ese sitio lo antes posible por lo que necesitaba un plan, pero lo único que se me ocurrió fue subirme en la cama y acercarme hasta la rejilla que estaba justo encima, rezando porque al otro lado se encontrase alguien dispuesto a ayudarme.

– [b]Hay…¿Hay alguien ahí que pueda oírme?[/b]- Pregunté tímidamente y esperé.- [b]So…soy Sarah…[/b].- Balbuceé.-[b]Por favor, soy la chica de la celda de al lado.[/b].- Rogué.- [b]Si…si me oyes…contéstame o acabaré volviéndome loca…[/b].- Dicho esto me senté en la cama a esperar a que alguien me oyese.

[spoiler]La rejilla por la que intenta comunicarse Sarah conecta con la celda de Charlotte. Así que, Veru si quieres puedes intentar comunicarte con ella en tu post para que yo te conteste en el mío o mandarme un MP :)[/spoiler]

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