Daniel Arkkan | Subterraneo tres

– [b][i]Cada vez tengo más claro que cuando salgamos de aquí tenemos mucho que hablar…[/b][/i].- suspiró y después añadió.-[b][i]Porque a estas alturas, no hay quien se crea que sólo somos amigos…[/b][/i].- Tosió tratando de disimular, pero lo había escuchado perfectamente. Hace tiempo que me había dado cuenta de que no era sólo una amiga para mí, conocerla me hizo cambiar para mejor.

– [b]Hablaremos todo lo que quieras. Aunque ese tema me llama especialmente la atención.[/b] – desde siempre había sido reservado y tímido, pero sabía de sobra que no me conduciría a nada bueno seguir así, así que aunque me costaba bastante, de vez en cuando conseguía sacar parte de mis sentimientos a relucir. Era más difícil de lo que pudiese imaginar, siempre pensando mil veces en qué podría pasar antes de hablar, en varias formas de decir lo que fuese, pero merecía la pena habituarse simplemente por la pequeña esperanza de que Sarah sintiese lo mismo que yo.

Todavía recuerdo la sensación de venganza corriendo por mis venas antes de conocerla, cuando cazaba era como un animal al acecho, pero ahora cazaba de una forma completamente diferente. Estaba siempre pendiente de ella, vigilando para ayudarla en caso de que lo necesitase, y la venganza ya no me corroía las entrañas. Apenas me había dado cuenta de que todo este rato había estado en silencio hasta que Sarah habló.

– [b][i]¿Y se puede saber por qué tienes tanto interés?[/b][/i] – preguntó. [i]Allá vamos, a ver cómo lo digo.[/i]- preguntó, seguramente arqueando una ceja.

– [b]Me gustaría saber si…umm…compartimos…la misma opinión.[/b] – respondí titubeante. Si era difícil encontrar las palabras era todavía más difícil tratar de no ponerme nervioso. Al menos que no me mirase directamente mientras lo decía ayudaba un poco.

– [b][i]Espero que en lo que sea que vayan a hacerme mañana no se me olvide “mi opinión”…[/b][/i]- bromeó, aunque en realidad, sabía que continuaba preocupada.

– [b]Estaré aquí todo el rato, no permitiré que te pase nada malo.[/b] – era lo único que podía hacer, tratar de que no se preocupase, aunque sabía que no podía hacer mucho desde ahí, dependía completamente de Nathan y su plan de huida. Eso me quemaba por dentro.

– [b][i]Gracias…[/b][/i].- musitó levemente, algo preocupada y después, intentó recomponerse y preguntó.- [b][i]¿Puedes darme un adelanto de cuál será tu opinión? Por favor…[/b][/i] – así es Sarah, aun en momentos de tensión, es más, sobretodo en momentos de tensión, curiosa a más no poder. Seguramente trataba de averiguar cuál era mi opinión para no arriesgarse después con la suya.

– [b]Vaya…pensé que tendría algo más de tiempo p-para saber que decir…y para no titubear.[/b] – traté de calmarme un poco, no sabía cómo decirle que significaba todo para mí, no sabía cómo decirle que no me imaginaba ya la vida sin ella, no sabía cómo decirle que significaba tanto para mí aunque no hacía tanto que la conocía. Temía quedar en ridículo…

– [b][i]En otras circunstancias jamás te lo hubiese pedido, pero ahora que estamos aquí sin saber muy bien qué pasará al día siguiente o si saldremos…necesito que me lo digas….no sé por qué, pero lo necesito.[/b][/i] – [i]Parece que es el momento.[/i]

– [b]Sarah…[/b] – traté de hacer acopio de valor mientras buscaba las palabras apropiadas para decírselo. – [b]me importas mucho más de lo que imaginas. No me imagino que habría sido de mí sin ti…y…no quiero imaginarme nunca sin ti.[/b] – [i]Que no se ría, que no se ría.[/i]

– [b][i]Tú..ya…[/b][/i].- Empezó a titubear, por primera vez en la noche.-[b][i]Ya puedes imaginar lo que siento…[/b][/i].- No parecía encontrar las palabras adecuadas.- [b][i] Cuando me salvaste, era admiración y gratitud, después amistad, pero ahora…[/b][/i]- Se quedó en silencio, no se atrevía a decirlo. No sabía que decirle, por un lado quería escucharlo, pero por otro, sabía lo difícil que era decirlo, así que tomé una decisión que creí correcta.

– [b]No hace falta que lo digas ahora, piensa cómo decirlo y cuando estemos fuera de estas celdas, dímelo. No me iré a ninguna parte.[/b] – necesitaba que fuera fuerte, que tuviese algo en lo que centrarse mañana.

– [b][i]Estoy preocupada, Daniel…[/b][/i].- Bajó la voz al continuar.- [b][i]Tengo miedo de que el plan de Nathan no funcione o de que mañana no vayan bien los experimentos y me pase algo malo como a la chica que gritaba[/b][/i].- Sollozó.- [b][i]Soy un fraude de cazadora…ni…ni siquiera consigo mantener la calma en una situación así, por eso intento por todos los medios decirte todo lo que tengo que decirte porque por lo menos dejo de pensar en todas las cosas que me dan miedo…[/b][/i]

– [b]No eres ningún fraude, tienes sentimientos, como todos.[/b] – no sabía cómo decirle que no tuviese miedo, cuando yo mismo temía por ella. – [b] Escúchame, sé que ésta noche será difícil porque ese monstruo lo ha hecho así, pero estaré contigo. Y créeme cuando te digo que saldremos de aquí. Cueste lo que cueste.[/b] – al menos agotaría todas las posibilidades, y tenía auténtica fe en que conseguiría que ella saliese de aquí.

– [b][i]Eso espero[/b][/i].- Murmuró.- [b][i]Voy a tumbarme en la cama, quiero seguir hablando contigo pero me duele la cabeza, debe ser que ya no estoy acostumbrada a pensar.[/b][/i]- Añadió a la vez que se oían los muelles de la cama al tumbarse.- [b][i]¿Sabes?[/b][/i].- Bostezó.- [b][i]Deberías haberte buscado una que no tuviese tantos problemas como yo…¿no había ninguna menos rara disponible?[/b][/i]

– [b]Créeme, he tenido suerte de encontrarte, te infravaloras.[/b] – hice una breve pausa mientras me acomodaba en la cama. El dolor de las piernas ya remitía, ahora sólo sentía los latidos fuertemente en ellas. – [b] Trata de cerrar los ojos. Yo seguiré aquí hablándote hasta que te duermas.[/b]

– [b][i]Creo que le caerías bien a mi madre…te llevaré a conocerla cuando salgamos[/b][/i].- Dijo bostezando nuevamente.

– [b]Cuando quieras. Venga, no hables. Trata de relajarte.[/b] – busqué algo similar a una canción para dormir y encontré sólo una, la que mi madre me solía cantar. – [b]You’re my sunshine, my only sunshine. You make my happy when skies are gray. You never know love how much I love you. Please never take my sunshine away.[/b]

– [b][i]Te…[/b][/i].- No terminó de hablar porque se había quedado dormida.

Yo por mi parte me eché encima de la cama y traté de descansar. Estaba claro que no conseguiría dormir pero al menos tenía que tener el cuerpo descansado y preparado. Mañana sin duda sería un día duro, y ésta una noche muy larga.

[spoiler]
Sarah ha sido controlada por Stefy.
Bueno esta será una noche larga. Me queda por delante un post y creo que otro a Stefy.
[/spoiler]