[align=center][b]Dominic Williams | Residencia Hexe | Calles de Moondale [/b]
Estaba tan absorto en los libros que me mando Arthur que prácticamente pase la tarde entera pasando y pasando paginas, buscando un nombre, Deacon Frost. No entendía porque pero al parecer Edward había cambiado de opinión cuando me pase por el manicomio para pasar la noche con ellos y me dio un nombre como punto de partida.
Pasaba las paginas de un libro, luego las de otro, luego las de otro, tenía en lo alto de la mesa los tres libros mas grandes que había visto en mi vida, vamos, al lado de estos, “The Pillars of the Earth” parecía un libro de edición de bolsillo. Alce la vista y al mirar por la ventana vi como el sol comenzaba a ocultarse. Me pase la mano por la frente y di un par de giros con los dedos en la parte que me dolía.
Pase un par de paginas más cuando algo en el libro que tenía en la izquierda me hizo fijarme en el. Era la foto en un hombre, con pintas de pertenecer a la nobleza, debajo ponía lo siguiente: Deacon Frost / 1890. Note un escalofrío recorrerme la espalda, la foto era antigua y apenas podía apreciarse bien, pero no iba a olvidar esa cara. Seguí leyendo un poco más de información, en concreto de la que hablada como un vampiro ya de él. Al parecer le gustaba permanecer en el anonimato, no había apenas datos sobre victimas. En 1900 decía que estaba en China, pero lo único destacado de esa fecha era la muerte de una cazadora a manos de un vampiro conocido como Spike, al igual que en 1912, este ultimo volvió a matar a otra cazadora en Dinamarca y hay constancia de que Frost también estaba allí. Era como si permaneciera a la sombra de grandes vampiros para permanecer en el anonimato.
[b][i]- Buenas.-[/i][/b] La puerta del cuarto golpeo contra la pared, al mirar de reojo hacia atrás vi como entraba un chaval con una mochila y un petate militar.
[b]- Hola.-[/b] Añadí mientras me giraba en la silla hacia él.
[b][i]- Así que tú eres mi nuevo compañero de juegos.-[/i][/b] Dijo con una sonrisa en el rostro de lo más gamberra. Tendió la mano hacia donde me encontraba sentado y alzo ligeramente una ceja [b][i]- Sam Bolton.[/i][/b]
[b]- Dominic Williams.-[/b] Me levante de la silla y le estreche la mano [b]- Sabes. Mi último compañero desapareció en misteriosas circunstancias sin dejar rastro, espero que eso no te pase a ti.-[/b] Al salir las palabras por mi boca note como parecía una amenaza lo que acababa de decir. En realidad sabia perfectamente donde estaba mi ex compañero de cuarto, pero aun no podíamos hacer nada por él. Sam sonrío y tiro su macuto a un lado posando encima la mochila.
[b][i]- No te preocupes.-[/i][/b] Se encogió de hombros mientras su sonrisa se hacia cada vez más grande. Por momentos veía como cada vez se parecía mas a el gato de Alicia en el país de las maravillas, solo le faltaba poder desaparecer también [b][i]- No planeo irme a ningún lado… a no ser que una chica me lo pida.-[/i][/b] Alzo y bajo las cejas rápidamente y se echo a reír.
[b]- Ten cuidado con ellas, algunas muerden.-[/b][i]Y otras desaparecen sin decir nada.[/i] – Me volví a sentar en la silla y cerré los libros que aun estaban abiertos, no sin antes doblar la esquina de la pagina en la que se encontraba la información de Frost. Sam se agacho y comenzó a sacar cosas de su macuto.
[b][i]- ¿Te cuento un secreto?.[/i][/b] Hizo una pausa en la que por momentos por fin parecía que iba a decir algo interesante [b][i]- Yo también.-[/i][/b] Añadió mientras comenzaba a reírse de nuevo. [i]Genial me a tocado un gracioso como compañero.[/i] Cada ves que Sam se echaba a reír tan exageradamente, mas pensaba en lo tranquilo que era todo con Nathan, más que nada porque casi nunca estaba, y cuando estaba, no abría la boca.
[b]- Y dime. ¿De donde eres?.-[/b] Dije mientra me pasaba las manos por la cara y acto seguido me echaba hacia delante en la silla con las manos cruzadas.
[b][i]- De aquí, de allá…-[/i][/b] se encogió de hombros [b][i]- Nunca he vivido en un lugar fijo durante demasiado tiempo.-[/i][/b] se tiro al suelo dejándose caer, como un árbol recién cortado. Se quedo mirándome y apoyo sus brazos en sus piernas [b][i]- ¿Y tú?[/i][/b]
[b]- Inglaterra.-[/b] No di más detalles. Eche la cabeza hacia atrás y mire al techo hacia ningún lugar en concreto, simplemente intentando dejar la mente en blanco.
[b][i]- ¿Inglaterra? Bonito sitio, sí.-[/i][/b] Al decir esto volví a fijarme en él y vi como miraba también hacia el techo como intentando buscar que es lo que yo estaba mirando.
[b]- Perdona, estoy algo distraído.-[/b] Añadí mientras me volvía a girar en la silla para coger los libros de la mesa. Abrí el primer cajón que tenía junto al escritorio y guarde los libros. Acto seguido cerré el cajón con un candado. Tenía que dejar todo lo sobrenatural bien guardado y más con Sam ya que parecía bastante curioso.
[b][i]- Yo debería estar guardando todo esto, y ya ves.-[/i][/b] Se encogió de hombros volviendo a sonreír [b][i]- ¿Hace ir a tomar unas cañas?.[/i][/b]
[b]- Oh, ¡mierda!.-[/b] Mire la hora y recordé donde debería estar ya. Cogi la cazadora que estaba encima de la cama para colocármela. [b]- Acabo de recordarlo. Ya había quedado. Otro día vamos ¿vale?[/b]
[b][i]- Vale, jefe.-[/i][/b] Añadió haciéndome un saludo en plan militar.
Con desgana le saludo de la misma manera y salí de la habitación, cerrando la puerta que aun estaba abierta de cuando entro Sam. Al correr por los pasillos no pude evitar sonreír al ver lo que tenía por compañero. Por suerte no había nadie por los pasillos, ni profesores de esos de “por los pasillos no se corre”, ni alumnos pelotillas que decían de chivarse a la rectora. Saltaba los escalones de dos en dos y salí por la puerta principal de un golpe echando a correr más. Después de girar por tres calles intuí que me había perdido, de un par de zancadas me acerque hasta la siguiente calle y de la nada apareció un coche que freno en seco no sin antes haberme apartado yo lo suficiente para evitarlo. Del coche vi como se bajaba McLeod llevándose una mano a la frente.
[font=Courier]- ¿Estas bien?.-[/font] Pregunto mientras se acercaba hasta donde me encontraba.
[b]- Si, tranquilo.-[/b] Añadí mientras movía las manos para no darle importancia [b]- Iba distraído, es culpa mía.[/b]
[font=Courier]- Perdona, yo también iba algo distraído. -[/font] Cuando me pare a mirarlo detenenidamente vi como estaba completamente sorprendido con los ojos abiertos de par en par [font=Courier]- ¿Vas a la reunión?[/font]
[b]- Si, cuando quise darme cuenta era bastante tarde y no encontré ningún taxi así que eche a correr.-[/b] Dije mientras intentaba recuperar algo de aire y McLeod algo más tranquilo sonreía.
[font=Courier]- Sube. Es mejor que no vayamos solos.-[/font] Ambos nos acercamos hasta su coche. [font=Courier]- Ya sabes, alguien podría… no sé, atropellarnos.[/font] Los dos nos echamos a reír tras eso.
[b]Gracias por llevarme.-[/b] Añadí ya sentado en el asiento del copiloto.
[font=Courier]- No tienes porque darlas.-[/font] McLeod arranco el coche y nos pusimos en marcha otra vez. No estaba seguro pero creo que se dejo las llaves puestas cuando se bajo sobresaltado [font=Courier]- ¿Qué tal ha ido desde la última vez?[/font]
[b]- Bueno, he estado enfrascado con unos libros de demonología buscando información sobre un vampiro.-[/b] La verdad es que llevaba tiempo en ello, para lo único que salí de la habitación en esta semana era para ver la presentación de la nueva rectora.
[font=Courier]- Si necesitas ayuda aquí me tienes.- [/font] Dijo McLeod completamente concentrado mirando a la carretera.
[b]- Te lo agradezco, pero ya he encontrado la información que estaba buscando.-[/b] Deacon Frost, el vampiro que se oculta en las sombras. Si la reunión terminaba pronto saldría en busca de él. McLeod se quedo en silencio unos segundos pensativo.
[font=Courier]- Tengo experiencia en fantasmas del pasado por decirlo de alguna manera.- [/font] Me miro un segundo y volvió a centrarse en la carretera [font=Courier]- No creo que debas ir solo.[/font]
[b]- Si alguien viniese conmigo tal vez seria mas estorbo que ayuda. Estaría demasiado centrado en que el que me acompañase no saliera herido.-[/b] Esa era una de las razones.
[font=Courier]- El problema es que tú salgas herido.[/font] Era extraño, por el tono de voz es como si estuviese preocupado. Era raro, nadie había estado nunca preocupado por mi, aparte de Arthur y Jessica. [font=Courier]- Juntos somos fuertes pero divididos…[/font]
[b]- Es algo que me gustaría hacer solo. Si alguien viene conmigo se lo agradecería, pero lo quiero solo para mi. Y que lo último que vea en este mundo, sea mi cara.-[/b] Añadí mientras agarraba con fuerza el soporte para el brazo.
[font=Courier]- No te dejes llevar.- [/font] Sabiendo a que se dedicaba McLeod seguro que había visto a más de una persona en mi situación [font=Courier]- No te perderemos.[/font]
[b]- Tranquilo no me perderéis, solo es… un ajuste de cuentas.-[/b] Más bien una venganza en toda regla.
[font=Courier]- Lo sé, eso es lo que me preocupa.-[/font] Mire a McLeod durante un segundo, hablar con él estaba consiguiendo que tuviese más ganas de enfrentarme a él, pero en cierta parte tenía razón, ¿y si no daba la talla? ¿y si fracasaba? Arthur me dijo que ayudara a Daniel y a cuantos estuviesen con él. ¿Y si quería que hiciese eso para que en cierta parte ellos me ayudaran a mí? Muchas preguntas invadieron mi mente mientras estábamos en silencio hasta que McLeod volvió a hablar [font=Courier]- Estaba pensando que no he llegado a saber mucho de ti desde que nos conocemos.-[/font]
[b]¿Quieres conocer algo en general?.- A estas alturas ya debes de saber que soy como Daniel, ¿no es así vigilante?.-[/b] Dije sonriendo. No había muchos Aesir que digamos, que dos se encontraran en el mismo sitio ya era de por si, raro.
[font=Courier]- No lo dudes, Daniel me lo dijo.-[/font] Añadió sonriendo [font=Courier]- No estaría mal saber tu historia. Y creo que no soy el único interesado. .-[/font] Estaba claro que se refería al resto del grupo.
[b]- En la próxima noche de poker me someteré a un interrogatorio si te parece bien.-[/b] Bromee mientras giraba la cabeza y miraba por la ventana viendo como un coche que conocía giraba en la dirección contraria a la nuestra.
[font=Courier]- Por supuesto, no se me olvidará, te lo advierto.-[/font] Estaba seguro de que no se le iba a olvidar, a no ser que recibiese un golpe y se despertará con amnesia [font=Courier]- Ya casi estamos llegando.[/font]
[b]- ¿Qué te parece la nueva rectora?.-[/b] Pregunte para cambiar de conversación y McLeod sonrió [b]- No se porque cuando dijo cierta parte en su discurso… es como si estuviese hablando de mí.-[/b] Y de cierto modo también note como si fuese a mi a quien miraba aun estando bastante lejos de su campo de visión.
[font=Courier]- En el tiempo que he tratado con ella me parece que no podían haber tomado una decisión mejor.-[/font] hizo una pausa en la que miro fijamente a la carretera y continuo [font=Courier]- Tenía mis dudas teniendo en cuenta que la última era la cabecilla de la Iniciativa…-[/font]
[b]- A la última no la conocía, pero teniendo en cuenta el historial de la gente en Moondale no me sorprende.-[/b] Dije sonriendo y McLeod también se echo a reír.
[font=Courier]- Está haciendo muy buen trabajo, pero no te descuides en Arte, puede dar miedo.- [/font] Bromeo, y al decir eso no me quedaron dudas, estaba claro que la rectora se refería a mi cuando dijo eso [font=Courier]- ¿Estarás en Demonología 101? Si es que aprueban el presupuesto y tengo los suficientes alumnos claro. [/font]
[b]- Tal vez sea la única clase en la que consiga prestar atención.-[/b] Volví a bromear y Mcleod sonrío mientras aparcaba. Sin duda seria interesante ver a otro vigilante impartir clases.
[font=Courier]- Ya hemos llegado, es ahí.- [/font] dijo mientras señalaba hacia el letrero en el que podía leerse 7th Heaven.
[b]- Espero que no seamos los últimos.-[/b] Añadí mientras me bajaba del coche y me abrochaba la cazadora. Me fije en Mcleod que estaba mirando su reloj.
[font=Courier]- Espero que lo seamos, porque sino, no significará nada bueno.-[/font] Sabía perfectamente lo que se le estaba pasando por la cabeza.
[b]- Que negativo eres.-[/b] Añadí bromeando un poco y los dos nos echamos a reír. Nos acercamos hasta la puerta del bar y entramos, comprobando que estaban todos, o casi todos, una de esas personas, era el dueño de ese coche que vi alejarse en dirección contraria.
[spoiler]Sam controlado por Thaly, Mc por Dracon[/spoiler]
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