[align=center][SIZE=4][b][font=Book Antiqua][color=black]Daniel Arkkan | Escocia[/SIZE][/color][/b][/font]

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En cuanto vi a través de las cortinas una de las primeras luces del alba decidí que ya era hora de levantarme.

Salí de la cama poco a poco con cuidado para no despertar a Sarah que por fin dormía plácidamente. La pobre se merecía un descanso, además de cargar con lo suyo también había estado ahí para animarme cuando hizo falta y eso no lo olvidaría. Me detuve unos segundos para seguir observando lo preciosa que estaba mientras dormía y cuando me dispuse a ir a coger la ropa me descubrí con una sonrisa en la cara.

Abrí la puerta del armario con cuidado y saqué la ropa, solo esperaba haber conseguido distinguir lo suficientemente bien para no ir hecho un cuadro. Cuando lo tuve todo salí procurando que no le entrase mucha luz del pasillo, cerré con cuidado y pasé al baño de enfrente.

Pese a ser vacaciones, estos primeros días no estaba durmiendo demasiado, igual que Sarah tampoco, porque todavía siguen dentro de nosotros toda la tensión que pasamos, todo lo que reprimimos para seguir adelante y que ahora, con tiempo libre para pensar, nos asalta enseguida. En mi caso, también se unía la continua sensación de culpa.

No podía más que agradecer a todos el estar aquí y además con ellos, eso para mi lado protector era la situación perfecta, los tenía a todos cerca y podía actuar enseguida si pasaba algo. Pero no podía evitar sentirme mal por lo que hice, Arthur y Delia me abrieron las puertas de su casa y me trataron como a un hijo más y yo se lo pagué yéndome y perdiendo el contacto durante demasiado tiempo. Supongo que esa era una marca con la que conviviría siempre pero al menos podía intentar hacer algo por ellos para empezar a redimirme, necesitaba un gesto que les demostrase que igual que ellos habían estado, yo estaría ahí cuando me necesitasen, y que si evité el contacto con ellos no fue porque no les quisiese, si no por eso precisamente, porque no quería que me viesen como soy.

Aun así, si volviese atrás en el tiempo y me tocase decidir, no tendría más remedio que volver a irme, porque si no hubiera sido por eso probablemente no habría conocido a Sarah y sin ella el mundo daba un giro drástico y oscuro para mí. En el fondo mis errores me forman igual que lo hicieron mis aciertos y ambos me han llevado hasta aquí con todas las personas que quiero cerca.

Cuando terminé de vestirme doblé el pijama y lo coloqué con cuidado en el borde de la bañera, si Delia lo veía seguro que se imaginaba porqué estaba ahí. Mientras pasaba por la casa me di cuenta de lo temprano que debía ser porque ni siquiera Arthur estaba despierto, o quizá sí y se había ido a pasear, el caso es que el silencio reinaba en el hogar de los McLeod, pero un buen silencio, un silencio de descanso.
Fuera el día estaba precioso, más propio de una mañana de mayo que una del pleno mes de febrero, así que había que aprovecharlo.

Tenía pensada una sorpresa para todos, pero antes tenía que ir a buscar un regalo especial para Sarah. Comencé a caminar sabiendo cuanto iba a echar de menos mi coche en la larga caminata hasta el pueblo más cercano, pero tenía un objetivo marcado, solo esperaba que alguna tienda lo tuviese.
Empecé a caminar bastante distraído en mis pensamientos, tanto que me sobresalté ligeramente al escuchar la voz de Ed.

– [b] [i] [color=#266EAC]Hola Daniel.[/SIZE] [/i] [/b]- dijo mientras se acercaba para saludarme. A lo lejos vi como Diana me saludaba con la mano y se dirigía seguramente a echarse un ratillo más, algo que no me extrañaba con la hora que era.

– [b] [i] [color=#4F5360]¡Ed! Hola.[/color] [/i] [/b] – respondí algo sorprendido mientras saludaba también a Diana. Por una parte me había parecido raro encontrarme a los dos despiertos tan temprano, pero por otra era lógico, seguramente algunos habrían recuperado el sueño perdido y algunas reservas extra. – [b] [i] [color=#4F5360]Menudo madrugón. [/color] [/i] [/b]– dije mientras caminaba hacia él.

– [b] [i] [color=#266EAC]Me fui a dormir pronto y cuando abrí los ojos esta mañana no podía seguir durmiendo.[/color] [/i] [/b]- respondió él riendo. – [b] [i] [color=#266EAC]¿Vas a salir?[/color] [/i] [/b] – preguntó.

– [b] [i] [color=#4F5360]Te entiendo.[/color] [/i] [/b] – respondí refiriéndome al problema del sueño. Yo también había estado durmiendo mal y ahora que teníamos este tiempo de descanso me despertaba temprano y no tenía ni una pizca de sueño, y si me quedaba en la cama sólo conseguiría pensar demasiado. – [b] [i] [color=#4F5360]Sí, voy hasta el pueblo, ¿quieres venir?[/color] [/i] [/b] – le invité.

– [b] [i] [color=#266EAC]Claro.[/color] [/i] [/b]- dijo Ed girándose para despedirse de Diana que ya estaba entrando por la puerta.

– [b] [i] [color=#4F5360]La pega es que tenemos que caminar, esta vez no está mi coche para que lo lleves.[/color] [/i] [/b] – y no quería despertar a nadie para pedirle el coche. La sorpresa tenía que ser todo lo sorpresa que fuese posible.

– [b] [i] [color=#266EAC]Bueno, hacemos un poco de ejercicio mañanero como los mayores.[/color] [/i] [/b]- bromeó. Lo noté bastante alegre esa mañana, quizá por el descanso después de todo lo que había pasado desde que llegó o quizá por el efecto que Diana ejercía en todos haciéndonos reír y que Sarah ejercía en mí haciéndome sonreír inevitablemente al verla.

– [b] [i] [color=#4F5360]Así nos mantenemos en forma.[/color] [/i] [/b] – respondí sin estar muy seguro de qué hablar. Consideraba a Ed uno de mis mejores amigos, pese a no estar con nosotros desde hace mucho, pero nunca se me había dado bien sacar temas de conversación. – [b] [i] [color=#4F5360]¿Qué tal todo?[/color] [/i] [/b] – pregunté al final.

– [b] [i] [color=#266EAC]Bien… algo más tranquilo que hace unos días. ¿Qué tal tú?[/color] [/i] [/b] – respondió.

– [b] [i] [color=#4F5360]También bastante mejor, al principio tenía algunos…dilemas.[/color] [/i] [/b] – y aunque aún me sentía culpable al menos tenía la opción de resarcirme. Pasamos unos segundos en silencio mientras caminábamos. – [b] [i] [color=#4F5360]¿Cómo fue tu pesadilla?[/color] [/i] [/b] – pregunté después de pensar un buen rato. La verdad es que no había hablado con muchas personas de eso, no aparte de Sarah, Diana y McLeod.

– [b] [i] [color=#266EAC]Demasiado real. Nada de esto era real, todo lo había soñado y seguía atrapado en mi realidad.[/color] [/i] [/b] – a veces me preguntaba lo duro que podría resultarle el día a día pensando que podría sucedernos lo mismo y también afligido porque lo que les había sucedido a los “otros” siempre estaría en su memoria, así que imaginarme que todo eso se volviese realidad me hacía ver ligeramente lo duro que había debido resultarle.

– [b] [i] [color=#4F5360]Debió ser muy duro.[/color] [/i] [/b] – razoné en voz alta. Después se hizo el silencio hasta que Ed preguntó.

– [b] [i] [color=#266EAC]¿Y tú que soñaste?[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#4F5360]Tampoco esto era real.[/color] [/i] [/b] – empecé, dándome cuenta del punto en común que tenían nuestros miedos. – [b] [i] [color=#4F5360]Estaba en un manicomio, me ingresaron después de que mis padres muriesen y todos vosotros estabais allí, yo…mi mente, os había creado a todos en este mundo.[/color] [/i] [/b] – todavía recordaba las noches después de aquél día, las pesadillas que me despertaban a media noche, esas imágenes de mí mismo con la cabeza afeitada, puntos de sutura en ella y la mirada perdida mientras delante de mí una maltratada enfermera con la cabeza gacha llamada Sarah conducía a un Ed que temblaba y se cubría con las manos en dirección a su celda, la angustia mientras veía como McLeod se metía en el mar y no salía, los gritos de Cecil pidiendo ayuda porque no podía moverse, los gritos de Diana mientras en su cabeza se recreaba una y otra vez la escena en la que su padre mataba a su familia.

– [b] [i] [color=#266EAC]Vaya… lo siento, también debió ser difícil para ti. Lo que está claro es que parece que ese demonio quería hacernos olvidar el lugar al que pertenecíamos.[/color] [/i] [/b] – asentí. Si no hubiésemos estado tan unidos tanto unos con otros como con nuestras familias, aún seguiríamos allí, vagando hasta que el miedo nos provocase un ataque al corazón, y si eso no ocurría, nuestros cuerpos seguirían ahí vacíos e inertes, pero vivos.

– [b] [i] [color=#4F5360]Pero no lo consiguió, estamos aquí, este es mi hogar y el tuyo ahora también.[/color] [/i] [/b] – añadí con una sonrisa remarcando de nuevo lo que ya había dicho varias veces, pero quería estar seguro de que entendía completamente que no lo decía por decir.

– [b] [i] [color=#266EAC]No me has dicho a que vamos al pueblo.[/color] [/i] [/b] – preguntó. Era cierto, el pobre hombre me estaba acompañando sin saber ni siquiera a qué.

– [b] [i] [color=#4F5360]Ah, es verdad.[/color] [/i] [/b] – respondí. – [b] [i] [color=#4F5360]He pensado en comprarle un regalo a Sarah y también quería comprar unas cosas para preparar la comida.[/color] [/i] [/b] – añadí. – [b] [i] [color=#4F5360]A modo de…expiación.[/color] [/i] [/b] – en parte era una forma de decir que sentía no haber estado a punto para animarla cuando ella lo había estado pasando mal, en lugar de eso sólo añadía sus preocupaciones a las mías y no conseguía hacer que se olvidase de ellas aunque fuese por un rato.

– [b] [i] [color=#266EAC]¿Ha ocurrido algo entre vosotros? [/color] [/i] [/b] – preguntó.

– [b] [i] [color=#4F5360]Con Sarah no, es solo para agradecerle que haya estado ahí para animarme a pesar de que ella también está pasando lo suyo. [/color] [/i] [/b]– expliqué rápidamente para que no se llevase la impresión equivocada. – [b] [i] [color=#4F5360]Pero con ellos, no sé si el otro…mi otro…yo, no estoy seguro de si lo sabes.[/color] [/i] [/b] – no sabía muy bien si en la otra realidad había hecho lo mismo o mi vida había cambiado en ese aspecto, y si no lo había hecho, no sabía si se lo había contado, quizá mi otro yo era más reservado. El caso es que necesitaba hacer algo para demostrarles que las cosas habían cambiado y que me arrepentía, quería darles una alegría después de las cosas que habían debido pasar por mí.

– [b] [i] [color=#266EAC]¿Que te marchaste de casa en busca de venganza? Lo sé. Y tranquilo, cualquier regalo que le hagas a Sarah, viniendo de ti le encantara, créeme.[/color] [/i] [/b] – respondió. Quizá debido a que nos conociese tanto, Ed tenía un efecto tranquilizador.

– [b] [i] [color=#4F5360]Es bastante agradable que ya sepas tanto de nosotros, porque…no sé cómo explicarlo, saber que ya conoces cosas como esas y aún así me trates como a los demás es un alivio.[/color] [/i] [/b] – respondí con sinceridad.

– [b] [i] [color=#266EAC]Bueno, esa cosa te llevo hasta Sarah, sin duda fue un alto en el camino para dejar la venganza de lado y centrarte en lo importante, en ella.[/color] [/i] [/b] – otra de las cosas que podía ver en Ed era que, si no me equivocaba mucho, se le daba mejor hablar de otras personas evitando indagar mucho en sí mismo y en sus sentimientos.

– [b] [i] [color=#4F5360]Seguramente sea el enésimo en decirlo, pero me alegro de que estés con nosotros.[/color] [/i] [/b] – repetí. – [b] [i] [color=#4F5360]Sé que puede que no seamos los mismos exactamente, pero haremos todo lo posible para que te sientas como en casa.[/color] [/i] [/b] – debía ser raro para él y para Diana adaptarse a todo un “mundo nuevo”, cuando se trata del presente no hay problema y el futuro es prometedor, pero pensar en el pasado y recordar que los demás no han vivido lo mismo que tú, eso debía ser muy difícil.

– [b] [i] [color=#266EAC]No hace falta que intentéis hacerme sentir cómodo, me basta con estar aquí, hacer estas cosas, salir y charlar.[/color] [/i] [/b] – respondió. No pude negarle la razón, el primer paso para que se sintiese como en casa era simplemente tratarlo con normalidad.

– [b] [i] [color=#4F5360]Lo apunto.[/color] [/i] [/b] –dije sonriendo. – [b] [i] [color=#4F5360]Creo que te va a gustar el regalo de Sarah.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#266EAC]Dejame adivinar ¿Alguna temporada de DW? Lo va a pasar mal cuando se vaya Tennant.[/color] [/i] [/b] – [i]Casi.[/i] – pensé. A veces Ed parecía conocernos mejor de lo que imaginábamos.

– [b] [i] [color=#4F5360]Yo no lo superaré. Me costó la de Nine, pero Ten…[/color] [/i] [/b] – reconocí. Con lo poco que había salido en “The End of Time” ya había empezado a no gustarme “el cabezón” de Eleven como lo llamó Sarah. – [b] [i] [color=#4F5360]Parece que hay una tienda especializada en el pueblo y pensé en un peluche de Adipose.[/color] [/i] [/b] – dije. Pese a lo que eran estaba seguro de que a Sarah le encantaría tener uno para estrujar. – [b] [i] [color=#4F5360]Y si no lo que se me ocurra.[/color] [/i] [/b] – sonreí.

– [b] [i] [color=#266EAC]No está mal, o un destornillador sónico, seguro que sonequearía a más de un vampiro.[/color] [/i] [/b]- ambos reímos. No pude evitar imaginarme a Sarah apuntando con el destornillador a todo lo que encontrase.

– [b] [i] [color=#4F5360]No nos vendría mal una Tardis tampoco.[/color] [/i] [/b] – reconocí. Aunque pensándolo mejor, nos daría aún más problemas y no estaría bien cambiar las cosas porque no solo cambiarían para nosotros como les pasaba a los de Regreso al Futuro, si no que tendría impredecibles repercusiones en los demás aunque quizá la repercusión que más me importaba era no llegar a conocer a Sarah.

– [b] [i] [color=#266EAC]Esto no es Gallifrey, aquí no crecen como flores, aunque sí, no nos vendría mal una.[/color] [/i] [/b] – respondió Ed.

– [b] [i] [color=#4F5360]Por suerte, como algún que otro malo se hiciese con una entonces sí que lo tendríamos complicado.[/color] [/i] [/b] – admití. Bastante poder tenían los que ya teníamos. – [b] [i] [color=#4F5360]Ya casi estamos llegando, ¿lo ves allí?[/color] [/i] [/b] – añadí al ver que los verdes prados con casas desperdigadas daban paso a agrupaciones más grandes. – [b] [i] [color=#4F5360]¡Allons-y Ed![/color] [/i] [/b] – añadí bromeando a la vez que apuraba un poco el paso.

– [b] [i] [color=#266EAC]Geronimo.[/color] [/i] [/b] – dijo Ed siguiéndome el paso. Enseguida llegamos a la zona en la que según google estaba la tienda.

– [b] [i] [color=#4F5360]Ahora el tema es encontrar la tienda.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#266EAC]Apuesto por aquello con la fachada de color azul Tardis.[/color] [/i] [/b]- apuntó señalando a una esquina no muy lejana.

– [b] [i] [color=#4F5360]Buena vista.[/color] [/i] [/b] – admití. – [b] [i] [color=#4F5360]A ver quién es el primero que dice que es más grande por dentro.[/color] [/i] [/b] – bromeé.

– [b] [i] [color=#266EAC]Hombre seguro que lo es.[/color] [/i] [/b]- añadió riéndose mientras abríamos la puerta con forma de una cabina de policía. Mientras abría me preguntaba si se habría abierto con una palmada.

– [b] [i] [color=#4F5360]Por cierto, mira bien cuando entres que todavía no te he comprado el regalo de cumpleaños.[/color] [/i] [/b] – dije. Al fin y al cabo no estaba seguro de si no sabría ya algo de la fiesta de su cumpleaños y de todas formas, prefería que me diese una tormenta de ideas.

– [b] [i] [color=#266EAC]Veo que os habéis informado bien, solo le dije eso a una persona, pero claro, era Diana. De todos modos no hace falta que me compréis nada.[/color] [/i] [/b] – respondió.

– [b] [i] [color=#4F5360]No es ninguna molestia, nos apetece.[/color] [/i] [/b] – dije sonriendo. – [b] [i] [color=#4F5360]No se me escapa nada así que de aquí salgo con ideas seguro.[/color] [/i] [/b] – añadí para después quedarme alucinado con el interior. No pude evitar pensar en Sarah y en traerla aquí para ver su cara.

– [b] [i] [color=#266EAC]¡Mira! la bufanda kilométrica de Tom Baker, el jersey y el paraguas de Sylvester McCoy…[/color] [/i] [/b]- sabía que me había escuchado pero tenía los ojos como platos y estaba mirando por aquí y por allá. Para nosotros y para Sarah esto era como el Toys’R’Us cuando eres pequeño.

– [b] [i] [color=#4F5360]Las converse de Ten.[/color] [/i] [/b] – dije viéndolas en un estante, junto a su traje colgado al lado. – [b] [i] [color=#4F5360]Y mira, los Adipose.[/color] [/i] [/b] – me acerqué hasta el mostrador donde estaban.

– [b] [i] [color=#266EAC]Parecen almohadas. A Sarah le encantará. [/color] [/i] [/b] – me había leído el pensamiento, eran tan estrujables que no sabía si llevárselos todos y que los usase de colchón.

– [b] [i] [color=#4F5360]Me lo llevo.[/color] [/i] [/b] – dije cogiendo uno y todavía con la duda de si coger otro. – [b] [i] [color=#4F5360]Pero todavía podemos echar un vistazo. Eso sí, tenemos que guardar algo para Sarah, tengo que traerla aquí para frikear los tres a la vez. [/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#266EAC]Creo que compraríamos la tienda entera.[/color] [/i] [/b]- dijo sonriendo. – [b] [i] [color=#266EAC]Oh, la cazadora de Christopher Eccleston.[/color] [/i] [/b]- no pude evitar quedarme mirándola igual que Ed. Por el rabillo del ojo vi también una taza con la forma de la Tardis y volví a dudar.

– [b] [i] [color=#4F5360]Quiero la tienda entera.[/color] [/i] [/b] – exclamé mirando la cazadora. La mayoría sería para Sarah claro, yo me conformaba con las converse de Ten y la cazadora de Nine.

– [b] [i] [color=#266EAC]Avísame si me ves babeando.[/color] [/i] [/b] – dijo Ed cerca.

– [b] [i] [color=#4F5360]Lo mismo digo.[/color] [/i] [/b] – reconocí. – [b] [i] [color=#4F5360]Va a ser difícil salir de aquí.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#266EAC]Tenemos que ser… fuertes.[/color] [/i] [/b] – empezó a caminar hacia atrás y chocó contra la figura de un Dalek a escala que emitió un ¡Exterminate! que hizo que se girase asustado.

– [b] [i] [color=#4F5360]Si ahora escucho un Delete sí que me asustaré.[/color] [/i] [/b] – dije aún riendo. – [b] [i] [color=#4F5360]Será mejor que pague.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#266EAC]Si, será lo mejor, esta tienda está en una dimensión espacio temporal en la que no notaremos el avance del tiempo y podríamos estar aquí atrapados por horas.[/color] [/i] [/b] – bromeó Ed consiguiendo que sonriese, era fan de los chistes frikis.

– [b] [i] [color=#4F5360]Y ahora nos toca el planeta de la carne.[/color] [/i] [/b] – dije mientras salíamos por la puerta. La sorpresa para todos era una barbacoa aprovechando que íbamos de visita al lago Ness. – [b] [i] [color=#4F5360]Nada mejor que una barbacoa hoy que hace sol.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#266EAC]Adoro las barbacoas familiares.[/color] [/i] [/b] – no podía evitar darle la razón porque las personas que se iban a reunir allí eran mi familia.

– [b] [i] [color=#4F5360]Con énfasis en familiares.[/color] [/i] [/b] – añadí.
Sin duda estas vacaciones habían sido un verdadero acierto, estaba recuperando la familia que perdí y estaba afianzando lazos con la que acababa de ganar. Cualquiera arriesgaría su vida por salvar un mundo con personas así.

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[spoiler]
Ed controlado por Alph (iba a poner Alph controlado por Ed xDDD) y el resto yo. Espero que os guste.[/spoiler]