[align=center][b][SIZE=3][font=Book Antiqua]Christopher McLeod | Moondale. Parque Bellamy[/SIZE][/font][/b]

No pude reprimir un bostezo mientras me estiraba. Todavía no era siquiera medianoche, pero estos últimos días habían sido agotadores aunque en la Universidad no había demasiado trabajo con las vacaciones salvo el inventario de verano y la colocación de las grandes remesas de libros que aprovechan a servir cuando no hay clases. La razón del cansancio era que todas las noches en las que Diana no dormía en mi casa, terminaba dormido en el sofá con un libro de ocultismo entre las manos, buscando una señal del que se hacía llamar “El Doctor”.

Traté de reprimir la impotencia que había sentido cuando nos había dejado completamente paralizados y a su merced, cuando había atravesado a Illya con la katana de Daniel…pero al final no fue posible. Hacía un par de noches, Daniel y Sarah habían hablado de reunirnos en casa de ellas para pensar qué hacer y para hablarlo también con Leonard, pero al final él no pudo venir y los demás nos dimos cuenta, después de una conversación en la que nadie sabía que decir, de que no teníamos la menor idea de cómo actuar, excepto confiar en que los Grandes Poderes nos guiasen por el camino correcto.

Así que derrotados, cada uno volvimos a nuestras casas. Recuerdo haber pasado la noche tomando café mientras repasaba varios libros porque no podía pegar ojo habiendo visto lo preocupados que estaban y no haber podido hacer nada para arreglarlo en ese mismo momento. Por desgracia solo conseguí pasearme como un zombie por la biblioteca durante toda la mañana siguiente, y cuando llegó la noche, quedarme dormido encima del libro que acaba de empezar a mirar.

Hacía unas horas que había recibido una llamada del móvil de Daniel, era Sarah avisándome para que nos reuniésemos en el parque Bellamy un par de horas más tarde. Diana cenó conmigo esa noche y después de arrastrarla para levantarnos del sofá, aquí estábamos esperando, cinco minutos antes de la hora.

– [b] [i] [color=#843181]Al coco y al hombre del saco les gusta esta reunión en plena noche en mitad de un parque… [/SIZE] [/i] [/b].- apuntó Diana aburrida por la espera. No podía culparla, entre que la farola al lado del banco en el que estábamos esperando estaba fundida y que ya había perdido la cuenta de las veces que había bostezado cualquiera podría sorprendernos.

-[b] [i] [color=#383A72] Buenas noches parejita.- [/color] [/i] [/b] saludó Dominic con la mano para después meterlas en los bolsillos. Agradecía que hubiese llegado, ahora ya podía delegar la tenue vigilancia y dormitar con los ojos abiertos, la pena es que no sabía hacerlo, pero hubiese estado bien.

– [b] [i] [color=#843181]Buenas noches, Dom [/color] [/i] [/b].- devolvió el saludo Diana con una sonrisa. Yo asentí con la cabeza cruzando los dedos para no caerme de cabeza al suelo. – [b] [i] [color=#843181]¿Dónde te has dejado a la fiera? [/color] [/i] [/b] – bromeó refiriéndose a Rebecca, que había cogido fama de mala leche. Algunos dirían que justificada, yo no me atrevería a decir tanto…delante de ella. Aunque en realidad es que era muy buena chica y hacia muy buena pareja con Dominic.

– [b] [i] [color=#383A72] Durmiendo…- [/color] [/i] [/b] dijo señalando el reloj. Al ver la hora casi me derrumbo, al día siguiente tenía que madrugar, pero tenía que echarle fuerzas y seguir adelante, nada que no solucione un café bastante cargado, algo de lo que carecía en ese momento.

Entre las sombras que dejaba la casi inexistente luz de nuestra farola apareció Illya, caminando lentamente, con aspecto de cansada y con algunas manchas de verdín en la ropa. – [b] [i] [color=#843181]Buenas noches Ills, al parecer las ardillas te han pateado el culo [/color] [/i] [/b]. – bromeó Diana.

– [b] [i] [color=#EE5159]Buenas noches… [/color] [/i] [/b]- saludó Illya. Después esbozó una sonrisa hacia Diana que se rompió mientras se llevaba una mano a la herida con una mueca de dolor. Diana la ayudó a sentarse, porque sabíamos que Illya era de contacto mínimo y, aunque ya no tanto como antes, todavía se sobresaltaba, excepto con Sarah y Diana, con las que le pasaba menos. Después de unos minutos nos miró y asintió con la cabeza visiblemente animada por el dolor que debía haberse mitigado.

– [b] [i] [color=#383A72] Tienes buen aspecto.- [/color] [/i] [/b] dijo Dominic tanto para expresar lo que pensaba como para animarla. La verdad es que había mejorado bastante rápido pese a que costaba que bebiese en casa de las Echolls por respeto a Elizabeth.

– [b] [i] [color=#EE5159]Gracias. [/color] [/i] [/b] – respondió.

– [b] [i] [color=#457238]¿Sabéis algo de la reunión supersecreta? [/color] [/i] [/b] – pregunté. Cuando Sarah me llamó le pregunté si pasaba algo pero solo dijo que era una sorpresa.

– [b] [i] [color=#383A72] A mí solo me han dicho que nos veriamos aquí.- [/color] [/i] [/b] respondió Dominic encogiéndose de hombros.

– [b] [i] [color=#266EAC] Con tanto secretismo igual nos suertan que se van a casar.- [/color] [/i] [/b] dijo Ed acercándose hasta nosotros con unos cuantos vasos de café para llevar en la mano, uno de ellos llevaba una cruz marcada con un rotulador rojo, que entregó a Illya, a la que vendría bien la sangre. El resto los repartió entre los demás. No sabía si darle las gracias o preocuparme porque me leyese el pensamiento, pero opté por darle las gracias. -[b] [i] [color=#266EAC] Buenas noches chicos. [/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#457238]Te debo una, lo necesitaba. [/color] [/i] [/b] – admití dando un trago revitalizante.

– [b] [i] [color=#843181]Buenas noches, Casanova [/color] [/i] [/b]- saludó Diana dando un sorbo al café.- [b] [i] [color=#843181]Gracias, ¿pero tú no estabas con mi hermana? [/color] [/i] [/b] – preguntó.

– [b] [i] [color=#266EAC] Emm… sí, pero le he dicho que había quedado con vosotros… de todos modos, sigue con un poco de jetlag.- [/color] [/i] [/b] – explicó Ed. – [b] [i] [color=#266EAC] También te he traído a ti, no te pongas celosona.- [/color] [/i] [/b] – añadió cambiando ligeramente de tema.

Miré el reloj y pasaban tres minutos de la hora a la que habíamos quedado, a Daniel no le gustaba llegar tarde, así que no les debía quedar mucho para llegar. Un par de minutos después aparecieron los dos.

– [b] [i] [color=#4F5360]Sentimos llegar tarde, alguien se pasó ultimando los preparativos… [/color] [/i] [/b] – empezó a explicar Daniel. Antes de que terminase la frase Diana habló, y antes de que hablase, ya sabía que no iba a dejar pasar la broma.

– [b] [i] [color=#843181]No hace falta que me lo digáis: La madrina soy yo [/color] [/i] [/b].- asintió con orgullo mientras sonreía. No pude evitar quedarme eclipsado mientras la veía sonreír.- [b] [i] [color=#843181]Gracias por pensar en mí, durante todo este tiempo… [/color] [/i] [/b]- Sarah se acercó rápidamente, tanto que ni siquiera la vi, no sabía si por los reflejos de Cazadora o por mi sueño persistente de esa noche.

– [b] [i] [color=#BB609C]Me parece que no… [/color] [/i] [/b]- se escuchó un murmullo general de “Ohhhh” con decepción, especialmente Diana. No pude evitar soltar una breve risotada.

– [b] [i] [color=#843181]Ed que pensaba arrimarle la cebolleta a Kaylee en el baile… [/color] [/i] [/b].- dijo después de hacer amago de morderle la mano a Sarah y librarse.

-[b] [i] [color=#266EAC] Diana…- [/color] [/i] [/b] dijo Ed recordándome a alguien, aunque en ese momento mi mente no sabía decirme quién.

Daniel nos hizo una seña y empezó a caminar, cogiendo a Sarah de la mano. – [b] [i] [color=#4F5360]Seguidme. [/color] [/i] [/b] – dijo. – [b] [i] [color=#4F5360]Estáis a punto de aventuraros en un mundo sorprendente….ah no, que eso ya lo habéis hecho. [/color] [/i] [/b] – bromeó. Eso era buena señal, si hubiese pasado algo malo estaría acongojado y no habría dicho mucho más allá de un “Hola”. Con tantas palabras estaba claro que era algo que le emocionaba.

Caminamos durante un rato hablando de nada en concreto, hasta que llegamos frente a una nave industrial situada entre un par de edificios de viviendas. Se distinguía claramente un portón por el que debían entrar coches o camiones, pero Daniel se dirigió a una puerta más pequeña.

– [b] [i] [color=#383A72] ¿Os habeis comprado una casa?-[/color][/i][/b] preguntó Dom.

– [b] [i] [color=#4F5360]Casi…pero no. [/color] [/i] [/b] – respondió Daniel abriendo la puerta, que chirrió como gritando que la engrasasen. Al pasar el umbral de la puerta se pudo apreciar mejor que era una gran nave industrial, aparentemente abandonada hacía bastante tiempo a juzgar por la pintura desconchada de las paredes. Al fondo, a lo lejos, vi unas cuantas planchas y barras de metal que imaginé que serían andamios, y cerca de la entrada un montón de botes de pintura con el logo de la compañía de Alexander Fenris. – [b] [i] [color=#4F5360]¿Qué os parece? [/color] [/i] [/b] – preguntó sin dar más detalles.

-[b] [i] [color=#383A72] Que si vais a montar una compañía de transporte no está mal como almacén.- [/color] [/i] [/b] – dijo Dominic.

– [b] [i] [color=#843181]¿Os habéis comprado un picadero? [/color] [/i] [/b]- dijo Diana casi a la vez.

– [b] [i] [color=#BB609C]No nos hace falta, tenemos tu cama [/color] [/i] [/b].- le picó Sarah con una amplia sonrisa.- [b] [i] [color=#BB609C]Es algo…que Daniel ha estado… [/color] [/i] [/b].- empezó pero se detuvo.- [b] [i] [color=#BB609C]Cuéntalo tú [/color] [/i] [/b].

– [b] [i] [color=#4F5360]Pues…a ver cómo lo explico, le di vueltas un tiempo a…bueno nuestro futuro y…bueno, hace unos días el tipo que Fenris dejó a cargo de la compañía vino a entregarnos las escrituras de este edificio. Fenris lo dejó escrito un par de días antes de lo de Mason, el mismo día que lo de la residencia. [/color] [/i] [/b] – explicó con bastante trabajo pasando la mirada de unos a otros sin aguantar mucho. Conociéndole seguramente tendría preparada cada cosa que iba a decir pero a la hora de la verdad sale todo como un rayo.

– [b] [i] [color=#843181]¿El tío bueno? [/color] [/i] [/b] – preguntó Diana. La miré con el ceño fruncido bromeando y me sacó la lengua en respuesta.

– [b] [i] [color=#4F5360]Así que bueno resumiendo, vamos a montar una agencia de investigaciones. [/color] [/i] [/b] – soltó. Después pareció que iba a decir algo pero le dio vueltas y parecía que no sabía cómo hacerlo, así que Sarah tomó la palabra.

– [b] [i] [color=#BB609C]Lo que Daniel quiere decir es que os queremos en este…proyecto o como se diga [/color] [/i] [/b].- explicó sonriendo.

– [b] [i] [color=#266EAC] Me parece una idea genial.- [/color] [/i] [/b] dijo Ed contento con la idea.

– [b] [i] [color=#457238]Puede ser la tapadera que nos hace falta…con esto se podría ayudar a mucha gente. [/color] [/i] [/b] – expliqué. Una agencia nos facilitaría ayudar a muchas personas y les permitiría ganarse la vida mientras salvan el mundo. Pero todo tenía sus inconvenientes, montar un negocio era difícil, y era mi deber ayudarles para que no se topasen con sorpresas inesperadas. – [b] [i] [color=#457238]¿Tenéis en mente todos los gastos? [/color] [/i] [/b] – pregunté.

– [b] [i] [color=#4F5360]La empresa de Fenris se encarga de la luz, agua…lo dejó por escrito antes de…. Y no hay alquiler, las escrituras están a nuestro nombre. [/color] [/i] [/b] – explicó Daniel. Eso eliminaba casi todos los gastos mensuales, solo restaba la inversión inicial y gastos de seguros, licencias… – [b] [i] [color=#4F5360]También nos ayudarán con la estructura interna, con la rehabilitación de la fachada y nos darán la pintura y cosas que necesitemos…lo único es que tendremos que pintarlo nosotros. [/color] [/i] [/b] – añadió. Eliminados también los gastos de la estructura y la fachada la idea pintaba cada vez más prometedora, y teniendo en cuenta que ya era muy prometedora de base ahora era una auténtica maravilla de inversión. Todo lo relacionado a lo ocurrido con Fenris, haber dejado tantas cosas listas, insistir en acompañarnos y haber sido él quien nos diese la oportunidad de acabar con él apuntaba cada vez más a su amistad con John Doe. Si esto estaba destinado a salir bien, tendremos mucho que agradecerles, y si no, también, no es muy común encontrar a alguien con dinero que esté dispuesto a “repartirlo”. – [b] [i] [color=#4F5360]Y para lo demás usaré el dinero que «saqué» en mis «viajes» [/color] [/i] [/b] – añadió al final. Eso sí me lo había imaginado, a Daniel le preocupaba que Sarah no pudiese compatibilizar su labor de Cazadora con el periodismo, y también tenía remordimientos por los años que pasó solo, cazando, no se le quitaba de la cabeza que el dinero que consiguió de las guaridas no estaba limpio, y ahora había encontrado una solución para las dos cosas, Sarah podía ejercer de periodista, de investigadora y de Cazadora y el dinero se iba a invertir en futuro. Si además querían que trabajásemos con ellos lo que pudiéramos, también nos unía más.

– [b] [i] [color=#383A72] Puedo poner algo de dinero, al menos para amueblar el sitio.- [/color] [/i] [/b] ofreció Dominic observando lo amplio que era el sitio. -[b] [i] [color=#383A72] además, nos van a pagar por lo que hacíamos gratis. Al menos la voluntad de la gente si no es muy agarrada.- [/color] [/i] [/b] razonó. Ahí podía irles muy bien Diana o Elizabeth, ellas se atreverían un poco más a la hora de presentar las facturas, que conociéndoles a todos serían bastante baratas.

Daniel se quedó sin palabras y con una sonrisa grabada con la oferta de Dominic, y Sarah fue a darle un abrazo rápido. – [b] [i] [color=#BB609C]Además, Ills tendrá un sitio nuevo para vivir [/color] [/i] [/b]. – añadió Sarah consiguiendo que todos les mirásemos esperando una respuesta, especialmente Illya que se sorprendió al escuchar su nombre.

– [b] [i] [color=#4F5360]En la estructura que tenemos pensada abajo habrá recepción entre otras cosas, y un apartamento con ventanas que filtran los rayos uva para Illya. Y arriba oficinas y eso… [/color] [/i] [/b] – dijo llevándose la mano a la parte de atrás de la cabeza.

– [b] [i] [color=#BB609C]Les dijimos que teníamos una amiga con problemas de piel. [/color] [/i] [/b] – murmuró Sarah a Illya, sonriendo.

Después, Daniel miró a Dominic. – [b] [i] [color=#4F5360]Te va a tocar ser investigador. [/color] [/i] [/b] – añadió. Hacía tiempo que nos conocíamos así que sabía que eso significaba que Daniel estaba buscando una forma de que Dom supiese cuanto agradecía el gesto pero sin decirlo directamente.

-[b] [i] [color=#383A72] Acepto. Pero tú te encargas de las misiones de damiselas en apuros, que sino Rebecca se enfada conmigo.- [/color] [/i] [/b] bromeó, o eso parecía.

– [b] [i] [color=#4F5360]Trato hecho [/color] [/i] [/b].- dijo Daniel. Antes de que empezase la frase que estaba a punto de decir, Sarah apuntó: – [b] [i] [color=#BB609C] Pues yo salvo a damiselos. [/color] [/i] [/b] – bromeó ella. Daniel la miró con el ceño fruncido pero sin contener una sonrisa, después parpadeo de forma marcada en un gesto que entre sí debían entender muy bien, porque Sarah lo hizo después. – [b] [i] [color=#4F5360]En realidad todos tenéis un hueco aquí, aunque la dueña del sitio sea Sarah, no creo que nos eche para montar una discoteca. [/color] [/i] [/b] – dijo riendo. – [b] [i] [color=#4F5360] Está hecho para todos, pero imagino que con el tiempo que tenéis ocupado en la universidad y con el bar. [/color] [/i] [/b] – añadió mirando hacia otro lado.

-[b] [i] [color=#266EAC] Siempre puedo sacar tiempo para vosotros. Puedo ayudar a Christopher con las investigaciones.- [/color] [/i] [/b] apuntó Ed. Daniel asintió con la cabeza en agradecimiento.

– [b] [i] [color=#457238]Sabéis que estaré encantado de ayudar. De hecho, me parece entretenidísimo. [/color] [/i] [/b] – dije mientras me juzgaban por yayo. – [b] [i] [color=#457238]Tengo unas cuantas cosas en el trastero que podrían venir muy bien. Y dinero no demasiado, pero un poquitín podemos ayudar. [/color] [/i] [/b] – añadí mirando a Diana. Hacía tiempo que Diana dormía algunas noches en mi casa y habíamos empezado a tener una cuenta con dinero común para lo que fuese y qué mejor que esto. Diana me sonrió y asintió con la cabeza, no era mucho dinero pero con nuestro siguiente sueldo nos repondríamos enseguida y si con eso ayudábamos a que todo saliese adelante, perfecto.- [b] [i] [color=#457238]Y cuando nos reunamos todos no habrá problema de espacio. Aunque nos tendremos que traer a tu madre para la limonada. [/color] [/i] [/b] – añadí mirando nuevamente a Diana. Acababa de caer en la cuenta de que la señora Echolls seguramente echaría de menos las grandes reuniones en su casa, aunque seguiría habiéndolas también allí, así que nada mejor que acompañarnos. – [b] [i] [color=#457238]Habrá que hacerle una cocina bastante grande al apartamento de Illya para que quepamos todos cuando nos pongamos a cocinar. Y una tele para que Elizabeth vea el programa de Silver. [/color] [/i] [/b] – dije con una sonrisa.

– [b] [i] [color=#BB609C]Hasta mi madre trabajará aquí en sus ratos libres [/color] [/i] [/b].- explicó Sarah. Tanto en limpieza como con los papeles, la recepción o para cobrar les podía ayudar mucho.

– [b] [i] [color=#266EAC] Bueno, vamos empezando…- [/color] [/i] [/b] dijo Ed remangándose para coger un rodillo, después destapó una lata de pintura y empezó a pintar una pared.

– [b] [i] [color=#843181]Ed, son las tres de la mañana [/color] [/i] [/b]. – dijo Diana mientras Ed movía el rodillo de arriba abajo y Sarah se unía a él riendo. Después les siguieron todos los demás, incluido yo mismo, aunque al día siguiente, aunque en realidad eran solo cuatro o cinco horas más tarde, me desperté allí mismo sin recordar cómo me había quedado dormido. Diana estaba dormida apoyada en mí, al moverme abrió los ojos y cuando me miró se echó a reír. Los demás se despertaron al oír sus carcajadas y la mayoría no pudo evitar reírse también. Me llevé la mano a una mejilla como acto instintivo para taparme la boca mientras me desperezaba y me topé con algo que no esperaba, al mirar la mano la vi cubierta de pintura, después miré el suelo y vi donde había tenido la cabeza apoyada toda la noche, en la tapa de la lata de pintura que Ed había abierto. Unas horas más tarde, con la cara y el pelo ligeramente más de mi color, me encontraba en mi oficina en la Universidad, mirando la pantalla del ordenador como un adicto, aunque en ella todavía se veía la pantalla de inicio de sesión. Un par de cafés más tarde conseguí recordar la contraseña.

Pero pese al cansancio físico que había acumulado, había merecido la pena, porque el cansancio mental que teníamos todos había sido agotador. El Doctor era una amenaza, sí, pero Mason también nos había quitado el sueño y aquí seguíamos, vivos.

[spoiler]Espero que os guste ^^[/spoiler]