[align=center][SIZE=3][b]La espia | Bar de Lorne[/b][/SIZE]

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Aquella noche, la reunión del grupo había comenzado en el bar de Lorne. Lo que no sabían, era que había alguien más siguiendo sus pasos, tomando nota de todo lo que hablaban y decían.

– [b] [color=#5ACA3C]Oh, me encanta veros por aquí. Empezaba a pensar que había un agujero negro en la entrada.[/SIZE] [/b] – Lorne saludó al grupo que estaba sentado en varias mesas que habían unido no muy lejos de la posición de la que les observaba. – [b] [color=#5ACA3C]La pobre Natalie se está dejando la garganta para disfrute de las paredes.[/color] [/b]- Y después, señaló a Natalie Roman, que aquella noche llevaba un vestido negro y largo de gasa, que pese a su generoso escote, parecía no ser suficiente reclamo.

-[b] [i] [color=#266EAC] Algunos demonios no saben apreciar lo bueno.-[/color] [/i] [/b] Edward Maclay soltó la bandeja y se sentó cerca de los demás.-[b] [i] [color=#266EAC] Hola chicos, en seguida estoy con vosotros.[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#843181] No creo que «pobre» sea el adjetivo más adecuado para ella[/color] [/i] [/b].- La bruja pelirroja se quedó mirándola un segundo y después, se sujetó el pecho con ambas manos.- [b] [i] [color=#843181] Pobre de mí que parezco una tabla de planchar[/color] [/i] [/b].- Suspiró.

El aesir de pelo más oscuro, se quedó durante unos segundos mirando el generoso escote de la cantante-[b] [i] [color=#383A72] ¿Qué? Solo comprobaba si era verdad lo que decía Diana.- [/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#4F5360]Si te pilla Rebecca, no lo cuentas…[/color] [/i] [/b] – Bromeó el otro aesir. – [b] [i] [color=#4F5360]¿Poca gente?[/color] [/i] [/b] – Le preguntó a Edward.
-[b] [i] [color=#266EAC] No, sólo demonios desganados y borrachos.-[/color] [/i] [/b]Apuntó con desgana.
– [b] [i] [color=#BB609C]A lo mejor podéis anunciaros en el periódico o algo: Dos por uno en bebidas…cosas así[/color] [/i] [/b].- Propuso la cazadora.

– [b] [i] [color=#843181] Una foto de la rubia y tendréis a todos los tíos babeando[/color] [/i] [/b].- Puntualizó la bruja provocando las risas de los presentes.

-[b] [i] [color=#266EAC] Exacto: tíos. Si entrasen más de la cuenta aquí se podría armar un cacao bueno. De todos modos, seguimos teniendo las noches de karaoke.-[/color] [/i] [/b] Les recordó el brujo.

La cazadora, de pronto, soltó el vaso de Coca Cola que estaba bebiendo y sonrió ampliamente.- [b] [i] [color=#BB609C]¿Para cuándo una noche de karaoke aquí?[/color] [/i] [/b].
En ese punto, la persona que estaba vigilando, estuvo a punto de marcharse: ¿Esa panda de niñatos eran de verdad los que iban a salvar el mundo? ¿Eran ellos de los que se preocupaba su jefe? Le hubiese encantado tener una grabadora para ver que en realidad, no eran más que unos niños jugando con algo más grande que ellos.

– [b] [i] [color=#457238]Para cuando consigamos tener un poco de descanso.[/color] [/i] [/b] – Apuntó el vigilante con aire pensativo. La persona que espiaba se giró con disimulo y prestó atención. A lo mejor él tenía algo interesante que decir. – [b] [i] [color=#457238]Nos haría falta encontrar al demonio aquél, Doyle. El caso es que me suena mucho su nombre, debí leerlo en alguna parte.[/color] [/i] [/b]

– [b] [color=#5ACA3C]Espera, guapo, ¿dijiste Doyle?[/color] [/b] – Preguntó el demonio verde provocando que Christopher McLeod asintiese. – [b] [color=#5ACA3C]Hace un par de noches vino un tipo que se llamaba Doyle, no sé si será el que buscáis pero desde luego parecía sospechoso.[/color] [/b]

-[b] [i] [color=#266EAC] ¿Y dónde estaba yo esa noche?.-[/color] [/i] [/b]El brujo parecía confundido.

-[b] [color=#5ACA3C] Te dejé la noche libre para que la pasaras con aquella rubia tan guapa a la que no le quitabas la vista de encima.-[/color] [/b]- Le recordó el de color verde.

-[b] [i] [color=#266EAC] Vale… vale…-[/color] [/i] [/b] Al ver a Edward azorado, la bruja pelirroja alzó las cejas con rapidez y la espía estuvo a punto de volver a perder la paciencia.

– [b] [i] [color=#BB609C]Lorne, ¿sabes dónde podemos encontrarle?[/color] [/i] [/b]- La rubia bajita retomó la conversación.

– [b] [color=#5ACA3C]No sé si os conviene ir a dónde pueda estar, no buscaba buenas compañías.[/color] [/b] – El demonio parecía preocupado.

– [b] [i] [color=#BB609C]Es muy importante, por favor…[/color] [/i] [/b]- La cazadora puso cara de buena y la que vigilaba, quiso vomitar. El mundo no podía estar en manos de aquella cría de poco más de un metro cincuenta.

– [b] [color=#5ACA3C]No quiso escucharme cuando le dije que se buscase mejor amistades, parecía perdido y abatido, tenía un aura…no muy verde.[/color] [/b] – Se explicó el demonio, dando a entender que el verde era lo apropiado. -[b] [color=#5ACA3C]Insistió y me negué, pero otro cliente le mandó al bar de Willy.[/color] [/b]

Cuando la que vigilaba escuchó hacia dónde se dirigían, una sonrisa de malicia se dibujó en su rostro.

-[b] [i] [color=#383A72] Siempre somos bien recibidos por allí. Gracias Lorne.- [/color] [/i] [/b]Le dijo el aesir de pelo más oscuro, después varios miembros más del grupo le dieron las gracias.

– [b] [i] [color=#843181] ¿Votos a favor de morir por ir al lado oscuro a tomarnos unas copas?[/color] [/i] [/b]- Inquirió la bruja con sorna.

-[b] [i] [color=#383A72] Yo me tomo unas copas, y tal vez le reduzca la clientela a Willy.- [/color] [/i] [/b]Dominic Williams se ofreció.

– [b] [i] [color=#457238]No me gusta la idea de pasear a Sarah delante de tantos lurkers, pero no nos queda otra opción. Hay que ir con cuidado.[/color] [/i] [/b]- La espía se removió en su taburete provocando que el Cosmopolitan que se estaba bebiendo le cayese en el regazo. Había muchas palabras que odiaba, pero lurkers, además le hacía fruncir el ceño y aunque no envejeciese, era algo que no se podía permitir.

– [b] [i] [color=#BB609C]No te preocupes por mí, la única que hubiese corrido peligro es Ills, pero esta noche, por suerte, no ha podido venir[/color] [/i] [/b].- Ills. Illya Novak. De nuevo, el ceño se le frunció al escuchar aquel nombre en la boca de la cazadora.

-[b] [i] [color=#266EAC] Lorne te quedas solo. Todos están servidos y medio dormidos, no creo que te creen ningún problema.-[/color] [/i] [/b] El brujo se quitó el delantal ante la mirada de su jefe.

– [b] [color=#5ACA3C]Oh, ojalá pudiera ir con vosotros.[/color] [/b] – Comentó el tipo verde entrecerrando los ojos.- [b] [color=#5ACA3C]Aunque mejor pensado, no, soy un maravilloso consejero, pero en la retaguardia.[/color] [/b] Hizo una pausa y después, un gesto con la mano que significaba que se fueran sin pagar las bebidas. – [b] [color=#5ACA3C]Suerte.[/color] [/b]

Si dijeron algo por el camino o no, es otra cuestión, pues la que les estaba vigilando dejó un billete encima de la barra y se marchó con rapidez al bar de Willy. Cuando entró en aquel lugar, que en pocas palabras habría que definirlo como un antro (aunque bastante grande y con zona para bailar), se sintió como en casa. Al menos allí, alguien la miraba.

Echó un vistazo rápido y se planteó sentarse junto al chico que estaba con los pies sobre la mesa del fondo y que llevaba un sombrero de cowboy en la cabeza, pero decidió ir hasta la barra y sentarse sobre ella: La reina había llegado y no fueron pocos los que acudieron a su alrededor para adorarla como creía que se merecía.

Al poco, aparecieron los del grupo de la Cazadora. Cuando se abrió la puerta del bar, algunos gruñeron y otros, apretaron los puños, pero o se contuvieron o estaban demasiado borrachos como para dar los pasos necesarios, porque nadie fue hasta ellos.

-[b] [i] [color=#383A72] Ahora sé lo que sentían todas esas chicas a las que miraba fijamente.- [/color] [/i] [/b]Comentó Dominic Williams al entrar.

– [b] [i] [color=#843181] Si no me equivoco, esa además de buscona es un vampiro. LA vampiro, de hecho[/color] [/i] [/b].- Dijo señalando a la espía que apretó los puños con rabia mientras fingía coquetear con un demonio Brachen.- [b] [i] [color=#843181] Pues no está tan buena, ni tiene las tetas tan grandes[/color] [/i] [/b].- La que vigilaba tuvo que girar la vista porque acababa de salirle el ceño vampírico por culpa de la rabia acumulada.- [b] [i] [color=#843181] ¿Verdad?[/color] [/i] [/b].- Miró al resto esperando contestación y sólo obtuvo la del aesir del pelo oscuro que se encogió de hombros.

– [b] [i] [color=#4F5360]Me suena alguno, y me parece que a ellos les pasa igual con nosotros.[/color] [/i] [/b] – Inquirió el otro aesir. – [b] [i] [color=#4F5360]Willy está en la barra, podemos…[/color] [/i] [/b] – Mientras avanzaban hacia la barra, cruzó la vista con el del sombrero de cowboy.

-[b] [i] [color=#383A72] Ese tío me suena.- [/color] [/i] [/b] Dijo Dominic sin quitarle la vista de encima.

– [b] [i] [color=#4F5360]Sí, a mi también.[/color] [/i] [/b]- Concedió Daniel Arkkan.

Cuando se acercaron a la barra, la cazadora llamó a Willy.- [b] [i] [color=#BB609C]Estamos buscando a alguien, ¿puedes ayudarnos?[/color] [/i] [/b]- Preguntó frunciendo el caño.

– [b]¿Llevo una Cruz Roja en la espalda? Ayudad a mi bolsillo y yo os ayudaré.[/b]- Respondió el camarero con desgana.

[b] [i] [color=#383A72] Te estamos ayudando ahora mismo no limpiando tu antro: Habla. [/color] [/i] [/b]- Le ordenó Dominic Williams apretando los puños.

La pelirroja quiso hablar, pero la bajita la detuvo- [b] [i] [color=#BB609C]¿Y si ayudo a tu dentista dejándote sin dientes?[/color] [/i] [/b]

– [b] [i] [color=#457238]Me parece que se han explicado bastante bien[/color] [/i] [/b].- Intervino el vigilante.

– [b]¡Maldita sea! ¿Qué queréis?[/b]- Willy refunfuñó provocando que algunos de los clientes observasen con atención.

–[b] [i] [color=#383A72] Tranquilo, no hace falta que levantes la voz. O esta noche dormirás caliente.- [/color] [/i] [/b] Dominic hizo como que bromeaba y después, bajó la voz. -[b] [i] [color=#383A72] Ahora, sonríe.- [/color] [/i] [/b]

– [b]Ah vale, vale, vale.[/b] – Willy se llevó a la nuca. – [b]¿Qué queréis?[/b]

La que vigilaba, que hasta ese momento había permanecido oculta, levantó la voz. Sabía q- [b] [color=#C81717] Me quieren a mí, pero todavía no lo saben [/color] [/b].- Se bajó de la barra, con un estudiado movimiento que hizo que la abertura lateral de su largo vestido de cristales de Swarovski mostrase algo más que su pierna y se acercó hasta ellos contorneándose, provocando sudores en más de uno de los presentes ajenos al grupo.- [b] [color=#C81717] Buenas noches, cazadora y…tíos buenos[/color] [/b].- Dejó una tarjeta encima de la barra con su nombre, Alice y su número de teléfono. Después, desapareció sin dejar rastro.

Si había conseguido o no su propósito es otra historia y debe ser contada en otro momento…