[align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=4]Edward | Futuro del Soberano
[color=#5AA6BB]MaÑana[/SIZE][/color][/b][/font]
[SIZE=3]
Me llamo Edward, bueno, en realidad mi nombre es Edward Alexander Arkkan Echolls, sí, un ambigrama. En mi mundo, que quizá sea tu pasado, si es que alguien llega a encontrar este manuscrito algún día, si es que el mundo continúa existiendo, conocer tus apellidos puede llegar a considerarse un auténtico regalo, aún más si tus padres fueron de los primeros en desaparecer, porque estaban destinados a evitar todo este desastre, curioso humor del destino.
Empiezo este…diario un poco tarde, pero lo hago porque presiento que algo está a punto de pasar. No sabría explicarlo a ciencia cierta, pero hay cosas cambiando, pequeñas cosas, pero que me hacen sentir que algo grande, algo diferente, va a pasar, aunque quizá solo sean cosas mías.
Ocurra algo o no, la esperanza de vida no es demasiado elevada, al menos de vida en el pleno sentido de la palabra.
Antes comentaba que es un regalo conocer tu apellido, espero que en el futuro os resulte algo extraño, que la tiranía y las pérdidas se hayan acabado, pero me cuesta creerlo, cada día más, aunque no puedo dejar que los demás sepan que pienso así, porque entonces ellos perderían la esperanza, y es lo único que nos queda.
Espero que vosotros os hayáis podido criar con vuestros padres, es un lujo que la mayoría no nos podemos permitir, algunos porque sus padres han sucumbido al ‘Compendio’ y no son más que marionetas del Soberano, y otros porque estaban destinados a salvar el mundo de él y evidentemente, no lo consiguieron.
No tengo muchas personas con las que hablar, confían en mí para ser el fuerte, el líder, y tengo que aguantar por ellos. Ni siquiera puedo contar con Mama Eli, ya tiene suficiente con cuidar de todos los pequeños. Por eso recurro a vosotros, para que lo que está pasando, quede documentado sin la mancha de ‘El Recuerdo’.
Vivo en la vieja casa familiar, por parte de mi madre, Sarah, junto a muchos otros. Mama Eli nos acogió y nos crió a los huérfanos originales, pero el número fue creciendo, hasta abarrotar la casa y la de al lado que nos hemos visto obligados a «ocupar» temporalmente.
Mi prima Amy lo es por parte de madre, aunque nuestros padres eran una especie de hermanos adoptivos, es una historia larga de contar. Es una de los ‘originales’, junto a mi otro primo por parte de madre, Ethan y Nicholas con el que no estamos emparentados aunque todos son como hermanos para mí. Los cuatro éramos los originales, pero hemos crecido, y ahora nos toca hacernos cargo de todo lo que podamos: cuidar de los pequeños, buscar provisiones, nuevos huérfanos, y la medicina de Amy.
Amy lleva enferma desde pequeña y la única doctora que conocemos concluyó que no podía dar con la enfermedad que la aquejaba, al menos con el material del que disponía, decía que no tenía síntomas claros, solo estaba débil, como si le faltase una parte importante. Su enfermedad cada día va a peor, y me temo que no le queda mucho tiempo. Si era poco lo que nos había ocurrido, ahora estaba a punto de perder a una de las pocas personas de mi familia que me quedaba.
Dentro de un par de minutos saldremos a una misión para conseguir suministros, en especial más dosis de la medicina. No quiero que me acompañen, porque la zona es peligrosa, demasiado, pero tampoco sé cómo prohibírselo, no puedo quitarles lo poco que les pueda hacer sentirse…»vivos».
A partir de ahora estaré junto a ellos, y no quiero que sepan que estoy escribiendo esto, así que tendré que narrar las cosas después de que pasen, cuando encuentre un momento en el que estar solo. Se me quedarán cosas en el tintero, pero es la mejor forma de dejar constancia de todo esto.
Pero antes de irnos tengo que hacer una última cosa, tengo que hablar con Mama Eli sobre Amy.
[/SIZE]
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.