[align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=5]Logan Villiers | Presente. Su apartamento de alquiler, Moondale.

[color=black]Noche[/SIZE][/color][/font][/b]

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Logan Villiers se agachó para recoger un par de cartas del felpudo. Una era del servicio de vapor del Condado de Ripper, solicitando el pago de los recibos atrasados. La sostuvo en la mano y vio como ardía, no pensaba pagar por algo que obtenía gratis, él mismo era su propia fuente de calor. El resto de las cartas tuvieron una suerte similar: electricidad, gratis; calor para cocinar, gratis; agua caliente, gratis…era incluso absurdo que intentasen que pagase por algo que no necesitaba. Ah, y seguro de vida…no iba a necesitarlo.

Metió la llave en la cerradura y en cuanto cruzó la puerta, las dejó en la mesa que tenía más cercana, junto a la compra, constituida por una hamburguesa con patatas y aros de cebolla del «Hannibal’s Meat Grill» y un pack de seis cervezas ‘Magic Hat’.

Prometía ser una noche…bueno, pasable, pero Natalie estaba un poco fuera del mapa últimamente y hoy no tenía especialmente ganas de ir a buscar pelea a un bar sobrenatural.

– [b][color=#643E28]Es curioso que consigas sorprender llegando tarde a alguien que lo ve todo.[/SIZE][/b] – escuchó decir a una voz que no conocía. Se giró rápidamente y no vio más que oscuridad en la zona de la que venía la voz. No tenía tiempo para encender la luz así que pasó a la visión de calor y fue entonces cuando vio a una figura sentada en su sofá, en su sitio.

– [b][i][color=#232627]¿Quién coño eres y qué haces en mi apartamento?[/color][/i][/b] – preguntó ya totalmente dispuesto a hacerle volar por los aires. Sus manos centelleaban por la energía concentrada en sus manos, y el calor residual que emanaba de ellas.

– [b][color=#643E28]Alguien que sabe que no me vas a quemar haciendo reventar las tuberías de vapor, que no usas porque tu poder evita que tengas frío.[/color][/b] – soltó dejándole momentáneamente sorprendido. – [b][color=#643E28]Y tampoco vas a sobrecargar la instalación eléctrica porque sí, parecería un accidente, y el calefactor también, pero los dos implicarían que tendrías que buscarte un piso nuevo y una casera menos simpática.[/color][/b] – añadió a continuación. La situación empezó a molestarle bastante, no sabía cómo demonios se estaba metiendo ese tipo en su cabeza, pero quería que parase. En ese momento se acordó de la puerta, que no estaba forzada, y la ventana no estaba abierta. – [b][color=#643E28]Sé lo que vas a preguntar, la respuesta es que es muy sencillo abrir una cerradura cuando sabes en cada instante si lo vas a conseguir o no.[/color][/b] – añadió como si esa explicación lo dejase todo claro. ¿De qué demonios estaba hablando ese tipo? Decidió que no le importaba, pero aun así le intrigaba y le molestaba a partes iguales que alguien tuviese información sobre él.

– [b][i][color=#232627]¿Qué quieres? Dame una buena razón para no sacarte volando de aquí, teniendo que buscarme otra casera o no.[/color][/i][/b] – amenazó casi deseando que le diese una excusa, por mínima que fuese, para no tener que pararse a pensar en la tabarra que sería cambiar de piso. Y además, había cosas que no sobrevivirían al fuego, como su cena. Eso lo cabrearía aún más y tendría que ir a buscar a alguna pelea: algún demonio devoraniños, un vampiro que estuviese acechando a alguna muchacha, para así matar dos pájaros de un tiro, o un violador. El último era uno de sus favoritos, no encontraba culpa en hacerles pagar lo que hacían, al igual que a los pederastas. A Logan Villiers le daba lo mismo que fuesen humanos, demonios, vampiros o unicornios, con que le diesen motivos bastaba.

– [b][color=#643E28]Sé que esa cantante rubia no se encuentra muy bien últimamente, muchas náuseas…especialmente por la mañana.[/color][/b] – soltó haciendo un gesto con sus manos sobre su barriga. [i]¿Qué cojones?[/i] – pensó, aunque en el fondo su cabeza se quedó dando vueltas a lo que acababa de decir. ¿Y si estaba embarazada…de él? – [b][color=#643E28]Sé que guardas en este cajón un colgante especialmente oscuro, porque estás dividido, quieres demostrarlo todo, y no demostrarás nada.[/color][/b] – añadió cabreándole mucho más, hasta el punto de distraerle de sus pensamientos acerca de ser padre. Como si no le importase lo más mínimo su enfado, o lo que pudiese hacerle, se levantó del sofá y caminó hacia la zona de la cocina. – [b][color=#643E28]En cuanto a lo que quiero…bueno, eso es más interesante.[/color][/b] – comentó mientras abría un cajón y sacaba un abrelatas, que ni siquiera Logan mismo recordaba dónde estaba, y acto seguido fue a coger una de las cervezas que quedaban en la nevera, la única, y la cogió prácticamente sin mirar.

– [b][i][color=#232627]¿Me has estado vigilando?[/color][/i][/b] – preguntó el aesir visiblemente cabreado.

– [b][color=#643E28]Sí, pero no como tú crees, mi vigilancia es inevitable, está aquí.[/color][/b] – dijo señalando su cabeza. – [b][color=#643E28]Veo cada posible consecuencia de cada decisión, y últimamente veo un futuro muy negro si no dejas ya la pataleta de hacerte el malo y pretender que los demás te adoren.[/color][/b] – espetó acabando con las últimas contenciones del aesir.

– [b][i][color=#232627]No sabes nada de mí. ¡Nada![/color][/i][/b] – le gritó empujándolo contra la pared mientras le sujetaba por los cuellos de la camisa.

– [b][color=#643E28]Pues mira esto era bastante predecible, por eso no llevo una de mis mejores camisas.[/color][/b] – aseguró impasible. ¿Cómo demonios no podía temerle? ¿Es que no tenía suficiente con supuestos seres celestiales que le decían que iba a ser un Campeón que salvaría al mundo, quisiera o no? ¿Ahora tenía que encontrarse con un tipo que lo sabía todo? ¿Que veía todo lo que iba a ocurrir? No le entraba en la cabeza.

– [b][color=#643E28]Voy a contarte una pequeña historia. Conocí una vez a un tipo, tenía mucho dinero, pero no le tenía ningún aprecio.[/color][/b] – comenzó a relatar mientras todavía lo mantenía sujeto. – [b][color=#643E28] Su vida se había truncado por un par de cosillas, una de ellas un vampiro con ganas de mandar el mundo a la mierda, y casi lo consigue.[/color][/b]- el vampiro Mason, había sido toda una sensación en los bajos fondos, los propios vampiros le temían. Ésa era la razón por la que había ido a Moondale, pero llegó demasiado tarde y se perdió la oportunidad de enfrentarse a él. Mientras recordaba su llegada a Moondale, bajó brevemente la guardia, algo que John Doe sabía que haría, y que aprovechó para librarse de la presa y sentarse en el sofá con la cerveza.

– [b][color=#643E28]Pero yo sabía qué papel jugaba a la hora de salvar el mundo, junto a otros, así que le aconsejé, le guié, incluso cuando vi que las consecuencias de salvar el mundo implicaban que se quedase en coma. Se lo dije, y lo hizo de todas formas.[/color][/b] – continuó explicando. Logan no veía porqué demonios le iba a interesar a él lo que había pasado con un ricachón que se había cansado de su dinero y se había ido a vivir aventuras y había decidido finalmente quedarse en coma para salvar el mundo. Bien por él, pero a Logan no le importaba, nadie había mirado nunca por él, no veía porqué debía hacerlo él por los demás. Lo que sí continuó poniéndole los pelos de punta era esa especie de halo de credibilidad que le rodeaba en todo el asunto de saber todo lo que iba a pasar.

Se había enterado de que la pelirroja de la gente que iba con Illya era capaz de ver flashes del futuro, así que lo de este tipo tampoco resultaba tan extraño. Se acostumbra uno a todo, como decía su madre antes de tenerle miedo.

A veces, aunque no lo pareciese, Logan Villiers se cansaba de que le tuviesen miedo, de que pensasen mal de él, que era un monstruo o un asesino, que no le creyesen capaz de nada bueno, como cuando Illya no le dejó explicarse, si le hubiera dejado, habría sabido que ese tipo no era más que el vampiro que la convirtió, pero con no sabía qué rollo de personalidad «implantada» o algo así, el caso es que le hicieron parecer un cachorrito, pero en el fondo era todo un lobo. Pero a él nadie le daría nunca crédito, ni siquiera los tipos extraños aquellos de las piedras, que parecían incómodos con su presencia y habían dicho que era una gran elección para la oscuridad y el caos. A todos ellos deseaba darles una lección y demostrar que podía ser mejor héroe que ninguno, en eso el tal John Doe había dado en el clavo, pero no era algo que estuviese dispuesto a admitir así como así.

– [b][i][color=#232627]¿A qué viene todo esto? No tengo que hacer lo que tú, ni unos tipos que hablan con jeroglíficos, dicen.[/color][/i][/b] – le espetó. ¿Quién demonios se reían para jugar con su destino, con su futuro? Nadie le controlaba, nadie. Si hubiese dejado que cualquiera le controlase, ahora estaría muerto o encerrado por su padre, incluso su madre.

– [b][color=#643E28]Viene a que como haya sacrificado a un gran amigo para que el mundo se vaya a la mierda igualmente, utilizaré mi poder para condicionar ese futuro de mierda al peor posible para ti.[/color][/b] – amenazó con frialdad como si para él eso ya hubiese ocurrido, como si estuviese completamente seguro de todo lo que tenía que hacer. – [b][color=#643E28]Estaremos todos jodidos, pero créeme cuando te digo que tu estarás más jodido que ninguno.[/color][/b] – añadió. Logan no pensaba sucumbir ante el payaso que le metió en ese mundo de pesadillas, el tipo al que el resto de «Campeones» parecían tener tanto miedo, y tampoco se lo tenía al que estaba frente a él. Aunque tenía que reconocer que parecía totalmente seguro de sí mismo en cada instante.

– [b][i][color=#232627]Adelante. No tengo miedo de nada.[/color][/i][/b] – le aclaró. No le interesaban los detalles, pero los miedos que pudiese tener, los había visto recientemente, y ahí seguía.

– [b][color=#643E28]¿Tampoco del espacio? ¿De estar solo y de que nadie piense que puedes hacer algo bueno? ¿Ni siquiera esa vampiresa?[/color][/b] – a veces era cierto que las palabras pueden doler más que una puñalada, especialmente unas palabras bien elegidas, bien dirigidas, en el instante apropiado y con parte de razón.

Logan no pudo evitar quedarse en silencio. El maldito tipejo que tenía frente a él había conseguido hacerle pensar en Illya y querer demostrarle que no era quien ella pensaba, que podía ser un héroe, especialmente por ella. – [b][i][color=#232627]Si quisiera, podría ser más héroe que cualquiera de ellos.[/color][/i][/b]- dijo casi más para sí mismo, como si quisiera convencerse. Lo cierto era que hacer las cosas bien es mucho más difícil, y a veces, parecía incluso mucho menos satisfactorio.

– [b][color=#643E28]Pues ahí tienes la llave.[/color][/b] – dijo señalando el colgante que él mismo había sacado del cajón unos minutos antes. – [b][color=#643E28]Recuerda que en el Hospital de Moondale hay un ex-playboy millonario llamado Alexander Fenris que está en coma por salvar el mundo. ¿Tienes más que perder que él?[/color][/b] – añadió colocándose la chaqueta y acercándose a la puerta para irse.

– [b][i][color=#232627]Aún no has respondido, ¿quién eres?[/color][/i][/b] – preguntó el aesir pensativo. No quería darle la razón a alguien del que ni siquiera sabía el nombre.

– [b][color=#643E28]John Doe.[/color][/b] – dijo antes de cerrar la puerta tras él.

Aunque no pensaba darle la razón de palabra…quizá…solo quizá, hiciese lo que le había dicho, pero para demostrarles que podía hacer cualquier cosa, ser un salvador y después, volvería a hacer lo que le diese la gana.