Moondale

SU TIEMPO SE ESTÁ AGOTANDO

[align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=4]Campeón en las Sombras| Templo de los Guardianes, ‘Axis Mundi’| Prueba de la Creación

[color=#000000]Noche[/SIZE][/color][/b][/font]

giza-2

[SIZE=3]
El Campeón en las Sombras sintió un cierto alivio cuando se vio alejado de las llamas y continuó su camino creyendo que no tendría que resultar un estorbo para nadie más. Continuó andando por los angostos pasillos hasta que desembocó en una zona rocosa, similar a la que había llegado después de que la corriente le arrastrase. Allí estuvo esperando y, cuando vio el cuerpo de Edward Maclay llegar hasta la orilla, completamente inconsciente, le arrastró para llevarlo a un lugar seguro o eso creía, porque el Gigante Encadenado no tardó en aparecer, después de que introdujera ambos colgantes y las puertas se abriesen.

Ante él había una imponente puerta de madera ornamentada con lo que parecían jeroglíficos, quizás era una pista de lo que iba a encontrarse dentro, pero el Campeón en las Sombras no era un experto en Historia Antigua, lo suyo era más práctico a sus ojos que la vida de un montón de gente muerta. Se detuvo a observarla y pasó los dedos por la madera, que parecía recién barnizada. Cuando vio la ranura para su colgante lo introdujo y esperó a que las pesadas puertas se abrieran, pero no pasó nada.

Bufó con fastidio y se dejó caer hasta el suelo para sentarse a esperar a quién fuera a ser su compañero o compañera de penurias. Odiaba con todas fuerzas la sobreprotección a la que le estaban sometiendo, como si no fuera capaz de valerse por sí mismo. En eso estaba pensando cuando un tipo de rasgos orientales, que se parecía un poco a Dominic Williams, se acercó a paso ligero.- [b][i][color=#DF7401] El Campeon en las Sombras supongo[/SIZE] [/i][/b] – El tipo asintió y el Campeón se puso en pie.- [b][i][color=#DF7401] Hiroshi Sato[/color][/i][/b].- Se presentó el asiático.

– [b][i][color=#3B170B]Pensaba que no iba a venir nadie, pero mejor que estés aquí[/color][/i][/b].- Le explicó la Sombra.

– [b][i][color=#DF7401] Si no hubiese venido yo, habría venido otro. Parece que estas pruebas hay que pasarlas de dos en dos[/color][/i][/b].- Quitándole importancia, introdujo su colgante en la ranura y esperó a que se abrieran las puertas ahora que ya estaban las dos piedras – [b][i][color=#DF7401] Veamos que encontramos ahora[/color][/i][/b].

Las pesadas puertas, efectivamente, se abrieron y la Sombra se adelantó, dejando que su compañero de fatigas viese un destello del color de su pelo, que era claro, por alguna extraña razón confiaba en aquel tipo. Una vez tuvo un pie dentro de aquella sala imposible, un vacío extenso cuyo camino de baldosas doradas se iba formando a medida que ponías el pie encima de la anterior, se quedó parado.- [b][i][color=#DF7401] ¿Estás bien?[/color][/i][/b]- La Sombra le miró, extrañado de que le preguntase si estaba bien cuando no podía verle la cara, cuando simplemente se había quedado parado a las puertas de aquella sala imposible cuyo suelo era un cielo repleto de nubes de tormenta y truenos, al igual que el propio techo.

– [b][i][color=#3B170B]Sí, ¿lo dices por algo?[/color][/i][/b]- La mancha oscura que ocultaba a uno de los Campeones puso otro pie en la baldosa y el camino se siguió formando. A su lado, el tipo asiático le observaba. – [b][i][color=#DF7401] No puedo verte, pero parecías dubitativo antes de entrar[/color][/i][/b].

– [b][i][color=#3B170B]No me gusta mucho todo esto[/color][/i][/b].– Le confesó sin apartar los ojos del vacío al que podían caer si aquello dejaba de funcionar en algún momento.

– [b][i][color=#DF7401] Supongo que no querías verte involucrado en nada de estos y esos Grandes Poderes te metieron sin dejarte opinar[/color][/i][/b].- El Campeón miró al tipo asiático que parecía verle detrás de toda esa parafernalia que le habían puesto para protegerle y no entendía por qué. Era como si le comprendiera incluso cuando él mismo no se comprendía, como si fuera capaz de desenmarañar la madeja que era su personalidad.

– [b][i][color=#3B170B]Tenía que hacerlo…[/color][/i][/b] – Se explicó como pudo. Podía haberse negado, pero en el fondo sabía que no, por mucho que existiera el libre albedrío.

El camino de baldosas desembocaba en la Guardiana de esa prueba. Cuando llegaron a su altura, la observaron. Su cuerpo era un imponente ente de materia de color dorado, que parecía componerse y descomponerse siguiendo unas reglas que solo ella entendía. Cubriéndole los genitales y el pecho, había materia oscura de aspecto gaseoso, que se contraía y expandía. Más arriba, había una cara blanca que representaba a una bellísima mujer de mediana edad, de grandes ojos sabios, pómulos marcados y labios rojos carnosos, cuya cabeza estaba coronada por unos cuernos formados por materia oscura.- [b][i][color=#886A08]Bienvenidos al Axis Mundi, donde todo es, y no es. Por ello, podría decir que mi nombre es Giza, pero quizás no lo sea[/color][/i][/b].- Se presentó de forma enigmática con una voz que reverberó en el vacío.

– [b][i][color=#3B170B]¿Qué quieres de mí?[/color][/i][/b]- Preguntó la Sombra sin andarse por rodeos. Tras decirlo, se dio cuenta de que el tipo asiático también estaba allí.- [b][i][color=#3B170B]De nosotros[/color][/i][/b].- Rectificó.
– [b][i][color=#886A08]¿Puedo querer algo de ti cuando eres tú el que ha entrado en mi centro dentro del propio centro?[/color][/i][/b]- Le devolvió la pregunta con desdén y el suelo de baldosas, inestable de por sí, tembló.

– [b][i][color=#3B170B]Que haga algo o…¿que no lo haga?[/color][/i][/b]- Miró a Hiroshi Sato, que parecía tan contrariado como él.

– [b][i][color=#886A08]Hacer no es más que no dejar de hacer y dejar de hacer no es si no dejar de no hacer[/color][/i][/b].- La respuesta, que parecía más enrevesada de lo que en realidad era, taladró los oídos del Campeón, demasiado acostumbrado a analizar las situaciones con frialdad.

– [b][i][color=#DF7401] Entonces… ¿podemos proseguir nuestro camino?[/color][/i][/b]- La Sombra dejó escapar una carcajada. Definitivamente, le caía bien.

– [b][i][color=#886A08]No[/color][/i][/b].- La Guardiana hizo que el camino de baldosas por el que habían venido comenzara a desaparecer.

– [b][i][color=#3B170B]Si empezamos a caminar en alguna dirección: ¿Se creará un sendero?[/color][/i][/b]- Se dirigió a Hiroshi, que se encogió de hombros.

– [b][i][color=#886A08]El camino a veces solo se muestra cuando ya estás en su senda.[/color][/i][/b] – Aseguró la Guardiana con el desprecio propio de un ser milenario acostumbrado a ser más que nadie. – [b][i][color=#886A08]Pero el pasado también puede guiarnos[/color][/i][/b].- El Campeón negó con la cabeza. No era el momento de pensar en su pasado.

– [b][i][color=#3B170B]¿Volvemos hacia atrás?[/color][/i][/b]- El Campeón estaba perdiendo la paciencia. No entendía por qué le habían planteado semejante prueba cuando no estaba preparado para ello.- [b][i][color=#DF7401] O podemos avanzar[/color][/i][/b].- Le propuso el chico rascándose la parte de atrás de la cabeza.

– [b][i][color=#886A08]Espacio, tiempo, todo son caminos[/color][/i][/b].- Les interrumpió la majestuosa Guardiana, que jugueteaba aburrida con la materia que hacía las veces de vestimenta.

– [b][i][color=#3B170B]A lo mejor da lo mismo, a lo mejor da todo al mismo sitio[/color][/i][/b].- Meditó la Sombra, estaba poco acostumbrado a juegos mentales de ese tipo.

– [b][i][color=#DF7401] Tal vez la única salida es pasar a través de ella[/color][/i][/b].- Comentó el chico intentando ayudar al Campeón.

La Guardiana dejó escapar una carcajada despectiva.- [b][i][color=#886A08]Depende del lugar al que pretendáis ir[/color][/i][/b] – Su voz sonó amenazante y se acercó un poco a ellos, como instándoles a que lo hicieran…si tenían valor.

El Campeón no pudo evitar ponerse nervioso. Estaba en mitad de una sala que se construía y se destruía según lo que quisiera un ente milenario que iba de listo, acompañado por un chico que no conocía. Nada tenía sentido.- [b][i][color=#3B170B]Esto no se me da bien, no soy ningún Campeón[/color][/i][/b].- Se lamentó.

– [b][i][color=#886A08]Y sin embargo lo eres. Este es el lugar dónde todo es y no es. ¿Y yo, qué soy o no soy?[/color][/i][/b]- La Guardiana parecía disfrutar de su juego en el que ella era la más lista del universo.

La Sombra se quedó pensativa.- [b][i][color=#3B170B]No eres nada[/color][/i][/b].- Hizo una pausa, intentando descifrar el enigma.- [b][i][color=#3B170B]Aparta[/color][/i][/b].- Gritó con desesperación.

El camino de baldosas que había tras ellos, ya de por sí bastante escaso, se agrietó, señal inequívoca de que Giza estaba perdiendo la paciencia. – [b][i][color=#886A08]Los errores cuestan caros en todas partes.[/color][/i][/b] – Bramó con majestuosidad. – [b][i][color=#886A08]¿Qué soy?[/color][/i][/b]- Le preguntó con los cuernos de su cabeza formando ahora una astas similares a las de un ser demoníaco.

El Campeón se quedó pensativo, si se llamaba Giza, había una posibilidad de que todo fuera más sencillo de lo que parecía, pero el vacío no era un buen sitio para pensar.- [b][i][color=#3B170B]Una esfinge, una pirámide, una Guardiana: ¡No lo sé![/color][/i][/b]- Finalizó con frustración.

– [b][i][color=#886A08]Guardiana es mi ser ahora, Esfinge nací. Y mi cometido sigo cumpliendo, a la vera de una pirámide.[/color][/i][/b] – Explicó complacida.

– [b][i][color=#3B170B]¿Y ese es el acertijo?[/color][/i][/b]- La pregunta iba cargada de veneno. La paciecia no era el punto fuerte de esta Sombra.

– [b][i][color=#886A08]Solo uno de ellos[/color][/i][/b]- La esfinge obvió el desdén de lo que había dicho el Campeón. – [b][i][color=#886A08]¿Es el camino pasar a través de mí a la fuerza?[/color][/i][/b] – Nuevamente, la Sombra se lamentó de no saber más de Historia, porque conocía a las esfinges de lo que había estudiado en el instituto, que era más bien poco. Sabía que no eran muy simpáticas, así que simplemente optó por lo más práctico.-[b][i][color=#3B170B]No[/color][/i][/b].

– [b][i][color=#886A08]Sabia decisión, aunque mi estómago lo lamenta, tu compañero parecía sabroso[/color][/i][/b].- Mostró sus dientes, blanquísimos y perfectos. – [b][i][color=#886A08]¿Qué es la vida?[/color][/i][/b]- Volvió a la carga.

– [b][i][color=#3B170B]Creación o evolución, depende de a quién le preguntes[/color][/i][/b].- Respondió con voz monótona, sin pensarlo mucho.

– [b][i][color=#886A08]Te lo pregunto a ti[/color][/i][/b].- Bufó y de sus fosas nasales salió una humareda de materia. – [b][i][color=#886A08]Vida y creación, ¿qué son?[/color][/i][/b]

El Campeón no sabía hacia dónde iba esto.- [b][i][color=#3B170B]Lo contrario a muerte y destrucción[/color][/i][/b].

El suelo que había bajo Hiroshi se resquebrajó y éste tuvo que saltar a la baldosa sobre la que estaba el Campeón. Sus hombros se rozaban, pero era lo suficientemente grande como para aguantar un poco más. – [b][i][color=#886A08]¿Son contrarios? ¿Es la muerte una enemiga acérrima de la vida? ¿La destrucción siempre se opone a la creación?[/color][/i][/b]- El chico miró al Campeón, que si fallaba, les llevaría a los dos a ese cielo nuboso que era el suelo.

– [b][i][color=#3B170B]No, la muerte es parte la vida. Si no muriéramos, nunca habríamos estado vivos realmente[/color][/i][/b].- Le costó decirlo, porque a nadie le gustaba la muerte, por mucho que dijesen que era esencial para la vida.

– [b][i][color=#886A08]Todo es un ciclo, vida y muerte, creación y destrucción. [/color][/i][/b] – Matizó la Guardiana- [b][i][color=#886A08]No podemos crear eternamente, porque al final no habría nada que crear, ni destruir eternamente, porque no habría nada que destruir[/color][/i][/b].-Hizo una pausa ceremonial – [b][i][color=#886A08]Ésa es tu respuesta.[/color][/i][/b]

– [b][i][color=#3B170B]Pues…gracias[/color][/i][/b].- El Campeón se encogió de hombros y rozó a Hiroshi que se apartó un poco, ligeramente incómodo.

– [b][i][color=#886A08]Vida y muerte, creación y destrucción, son ambas parte del camino. A veces la decisión que parece opuesta es la correcta[/color][/i][/b].- La Sombra miró al vacío del que solo les resguardaba aquella maldita baldosa dorada y, si no se equivocaba, la Guardiana le estaba diciendo que para salvarse tenía que tirarse: ¿Pero cómo fiarse de una esfinge milenaria con ínfulas de sabelotodo?

– [b][i][color=#3B170B]¿Puedes decírmelo de una forma que lo comprenda?[/color][/i][/b]- Se hizo el tonto, porque a veces era lo más inteligente. Si quería que se tirara, debería pedírselo. Necesitaba garantías.

– [b][i][color=#886A08]Eres TÚ el que tiene un camino que recorrer[/color][/i][/b].- Había mucha razón en sus palabras. No sabía cuánta, pero no iba a dársela.

El Campeón miró a Hiroshi.- [b][i][color=#3B170B]Sé que no me conoces, pero creo que la única forma de salir de aquí es lanzándonos al vacío[/color][/i][/b].- La materia empezó a arremolinarse alrededor de ellos, formando unas fuertes corrientes que hacían que sus vidas peligrasen todavía más.

– [b][i][color=#886A08]Fuera del camino hay muerte y destrucción[/color][/i][/b].– Les explicó la esfinge, disfrutando del espectáculo.
– [b][i][color=#DF7401] Como en todas partes[/color][/i][/b].- Espetó el chico y se giró para mirar a la sombra.-[b][i][color=#DF7401]Si estás seguro, adelante. Te estoy confiando mi vida[/color][/i][/b].- Matizó con seguridad. Nunca nadie había confiado en el Campeón, que puso los pies al borde de la baldosa..- [b][i][color=#3B170B]No deberías confiarme tu vida, no soy digno de confianza[/color][/i][/b].- Fue lo que dijo antes de saltar.

Al principio, la Sombra pensó que iba sola cuando comenzó a atravesar la negrura nubosa plagada de rayos que amenazaban con chocar contra su cuerpo, pero al poco, vio a Hiroshi, que también caía, con mucho menos miedo que el que mostraba el Campeón. Continuaron cayendo a toda velocidad, hasta que sus pies tocaron el suelo de roca con gracia como si fuesen expertos en caídas desde baldosa. A su alrededor, la sala imposible ya no era tal cosa, sino una cueva similar a la que había antes de que abrieran la puerta.- [b][i][color=#DF7401] Parece que al final has dado con la respuesta correcta[/color][/i][/b].- El chico esbozó una sonrisa que hizo que sus ojos se convirtieran en dos líneas horizontales.

– [b][i][color=#3B170B]Era eso o que acabáramos muertos[/color][/i][/b].- El Campeón le restó importancia, al tipo que notó cómo su brillante colgaba, sintiendo cómo la creación se abría paso en su pecho. La Sombra miró al techo y vio que sobre ellos solo había roca.- [b][i][color=#886A08]Recuerda el enigma que tú has resuelto, por si la vida vuelve a planteártelo[/color][/i][/b].- La Guardiana no estaba frente a ellos, pero su voz se escuchaba perfectamente. Ahora parecía más calmada y llena de verdadera sabiduría, no de desdén.

Frente a ellos, la materia dorada formó una puerta que parecía a punto de desaparecer, por lo que apuraron el paso y la atravesaron, dando a otra galería subterránea.- [b][i][color=#DF7401] Buena suerte en las próximas. Lamento no haber sido de mucha ayuda aquí[/color][/i][/b].- Se excusó el chico.

– [b][i][color=#3B170B]Lo mismo digo y sí me has ayudado, te recuerdo que te has lanzado al vacío sin conocerme[/color][/i][/b].- Le había ayudado más de lo que se imaginaba.

– [b][i][color=#DF7401] Bueno, soy budista, si hubiese muerto probablemente me habría reencarnado en una hormiga[/color][/i][/b].- Bromeó el asiático y el Campeón se rió. Sus caminos se separarían más tarde, pero mientras tanto, estuvieron unos minutos hablando.

Ojalá hubiera podido decirle lo bien que le caía, pero su tiempo se estaba agotando.[/color]

[spoiler]Hiroshi/Campeón OTP. Espero que os guste el post.[/spoiler]

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