Moondale

EXPUESTO

 Duke Rivera | La Nave, Moondale

MEDIODIA

DUKERIVERA

 

El sol se filtraba a través de un minúsculo hueco entre las nubes, proyectándose hacia los ventanales del estudio y bañándolo de su clara luz pero sin ningún ápice de la radiación ultravioleta. No dejaba de ser curiosa esa elección de ventanas, esa inversión de dinero  en que todas y cada una de ellas, excepto la recepción, fuese necrotemplada. 

Lo normal era pensar que alguno de ellos tenía una enfermedad de la piel extremadamente grave que impedía que le tocase el más mínimo rayo de sol, pero también surgían preguntas sobre sus contactos, sus fondos, porque ahora no parecía sobrarles el dinero y sin embargo esas ventanas…ni siquiera sabía que existían hasta que las vi.

Estiré los dedos de los pies, enfundados en chanclas y doloridos de la caminata. Había sido una mañana especialmente fría, y la gente se quedaba mirándome cuando pasaba, pero sencillamente, no tenía frío, o al menos no tanto frío.

Fue entonces cuando escuché un grito y me alarmé. Parecía de un hombre, de uno al que le hubiese hecho mucho daño algo, aunque no sabía qué, quizá a un obrero se le había caído una caja encima, pero tenía una corazonada. Fuera como fuese, bajé corriendo.

Pensando que quizá era un accidente de los obreros, en lugar de dirigirme al pasillo de la segunda planta que comunicaba con la sala de espera de los clientes, para bajar por esa escalera hasta la recepción, decidí bajar por la escalera de caracol interna hacia la enorme sala común con sofás, una gran mesa, sillas y una televisión que Cara Elle me había dicho que era para los ‘Moondies‘, que entendí que debían ser los que habían montado todo eso, pero a los que no había visto nunca. Si eran tantos, no sabía a dónde habían ido todos.

Cuando llegué abajo, vi que los obreros no estaban y miré el reloj, la media hora del café de una hora y algo, lo habitual. En lugar de a ellos, vi a Cara de espaldas a mí en la puerta que conducía a la recepción y por un instante me alarmé pensando que alguien podría haber querido hacerle daño, el hombre del grito.

Caminé rápidamente hacia ella, que al escucharme, como si de un gato se tratase, se giró y entornó la puerta para que no viese lo que estaba pasando en la recepción. Alcancé a ver a un hombre de treinta y pocos, doblado sobre sí mismo y con el rostro perlado de sudor.

– [Cara]Duke no puede entrar, porque Christopher tiene gases[/Cara].- trató de explicar. Si eran gases, debían ser tantos como para hacer que esa Nave volase como la casa de ‘Up‘.

 – [Duke]¿Christopher? ¿Es él quien gritó?[/Duke] – le pregunté. Conocía a Cara Elle y a Dominic, pero hablando con ellos conocía los nombres de Christopher, de Diana, de Daakka, de Daniel, de Sarah, de la chica que tenía el piso en la planta baja, Mara, de Edward, de Elizabeth y del tal Fenris que era el dueño de la constructora, que al parecer lo hacía gratis, y ahí encajaba lo de las ventanas, pero no el hecho de que un playboy multimillonario se interesase por algo así.
– [Cara]No, he sido yo[/Cara].- dijo segundos antes de ponerse a gritar como una loca. Estuve a punto de reírme, porque ella producía ese efecto en mí con su forma de ser sin filtros, pero estaba demasiado preocupado…No, mentira, me reí, pero paré pronto, cuando escuché una voz provenir de dentro.
– [Dom]¡Contrólate![/Dom] – dijo la voz que reconocí como la de Dominic, el tipo que asustaba pero que era buena gente, un rompe-estereotipos vamos. – [Dom]Salid de aquí.[/Dom] – le escuché decir a continuación.
Entonces la puerta que Cara había entornado se abrió y por ella cruzaron cuatro personas, tres mujeres y un hombre. Una de ellas, pelirroja, muy guapa, estaba embarazada, debía ser Diana, la que Cara debía poco menos que idolatrar a juzgar por como hablaba, la pareja de Christopher. Me gustaba fijarme en los detalles cuando me contaban algo interesante, aunque cuando mi mente estaba pensando algo a veces me abstraía como si saliese de mi cuerpo.
– [Cara]Dominic no puede solo[/Cara].- les dijo Cara antes de entrar por la puerta por la que ellas acababan de salir. Me preocupé, si ese grandote de Dominic no podía con lo que fuese, ¿cómo podría ella?
– [Duke]¿Qué está pasando?[/Duke] – les pregunté a los demás, pese a que no me conocían. El miedo y la preocupación sueltan la lengua.
– [Diana]Duke, soy Diana y te doy el día libre[/Diana].- dijo acercándose a mí y colocando una mano sobre mi hombro, que le quedaba prácticamente a la altura de la cabeza. Ése gesto me hizo ver en ella un aire maternal que dejaba claro que su niña podría estar orgullosa de tener alguien así como madre. Me gustaba Diana, no románticamente quiero decir, tenía pareja y eso es una norma universal.
– [Duke]Lo siento pero…tengo que ayudar.[/Duke] – dije mirándola a los ojos intentando que me comprendiese. Se veía que era una persona tremendamente empática, así que sabía que conseguiría llegar a ella.
Ella intentó decirme algo, pero pareció no encontrar las palabras. En su lugar, otra tomo el lugar de impedírmelo.
– [Rebecca]Dom, sube con Christopher arriba. Ya me encargo de hablar con Duke[/Rebecca].- dijo entreabriendo un instante la puerta, que aproveché para ver a Christopher de espaldas, en una posición que parecía agresiva hacia Dom y Cara.
– [Dom]¿Estás segura?[/Dom]- preguntó la voz de Dom al otro lado. Le miró y asintió.
– [Duke]Dominic parece que necesita ayuda. Confiad en mí.[/Duke] – dije mirándola fijamente a unos penetrantes ojos de color azul. Era un poco mandona, pero buena chica y lo hacía por proteger a los demás de un desconocido. El problema era que tenía que ayudar.
– [Rebecca]Lo siento, pero tienes que irte[/Rebecca].- ordenó educadamente plantándose con los brazos cruzados en frente a la puerta.
Se hizo el silencio, que aproveché para escuchar unos pasos apurados y un murmullo que ascendían hasta desaparecer, estaban subiendo al segundo piso. Entonces se volvió a escuchar algo, un gruñido que parecía más animal que humano.
– [Duke]Tengo que insistir.[/Duke] – dije intentando abrirme paso. No quería apartarla, porque temía hacerle daño, pero no sabía si terminaría atendiendo a razones.
– [Rebecca]Y yo también tengo que insistir[/Rebecca].- respondió con el semblante serio, inescrutable. Se quitó los guantes y me observó, parecía que no se fiaba de mí y por alguna razón pensé que tenía algo que ver con esos guantes que acababa de quitarse y la expresión que había puesto al hacerlo.
– [Duke]No voy a hacerte daño.[/Duke] – le prometí intentando pensar cómo avanzar. Si volvía a subir por la otra escalera, la interna de esa sala común, quizá los demás tratasen de impedírmelo también, pero podría hacer un intento, echar a correr.
– [Rebecca]¿Quién eres? O mejor dicho, ¿para quién trabajas?[/Rebecca]- preguntó como si cada pregunta fuese una bofetada. Entendía que Dom estuviese con esa chica, además de por su obvia belleza física.
– [Duke]Para nadie. Soy un amigo. Puedo ayudar.[/Duke] – le insistí. Es difícil conseguir que una persona confíe en ti diciéndole que confíe en ti, eso solo te hace más sospechoso, pero confiaba en que viese la desesperación en mis ojos, debida a estar preocupado por lo que podía pasar.
– [Rebecca]Ya[/Rebecca].- dijo mientras alargaba una de sus manos hacia mí. – [Rebecca]Pues dulces sueños, amigo[/Rebecca].- antes de que pudiese darme cuenta de lo que acababa de pasar, sufrí un latigazo de dolor que recorrió todo mi cuerpo, como si clavasen agujas en cada uno de mis poros. Apenas tuve tiempo a pensar de cómo era capaz una persona de algo así, porque lo que seguía era mi preocupación por lo que estaba pasando, después habría tiempo de preguntas, de muchas.
Caí de rodillas, tremendamente dolorido, si seguía así, me desmayaría y con lo que estaba pasando, tenía que hacer otra cosa, así que traté de no pensar en el dolor y la miré fijamente.
Los demás habían apartado la mirada, pero ella no, me miraba, observaba, hasta que algo cambió en sus ojos totalmente, vio algo en mí que le hizo cambiar de opinión.
– [Rebecca]Lo siento, no tenía que haber sido tan dura[/Rebecca].- replicó con un cambio notable en su voz, donde antes había enfado, ahora había tristeza. Me dio pena la pobre muchacha, pero más tarde me aseguraría de que no se culpase en exceso.
– [Duke]No te preocupes. Lo entiendo.[/Duke] – dije poniéndome en pie con dificultad porque tenía el cuerpo dolorido aún. – [Duke]Voy con ellos. Esos gruñidos no me gustan nada.[/Duke] – dije poniendo una mano en su hombro antes de pasar. Ella se quedó parada, quizá no se esperaba que no hubiese tenido tiempo a preguntarle por lo que acababa de pasar, o quizá que me atreviese a tocarla después.
Atravesé la recepción corriendo y subí por la escalera detrás de ellos. No les encontré nada más llegar arriba, pero caminé a través de la sala de espera de clientes hasta las puertas que daban al pasillo interno y entonces miré a la derecha y les vi, a la altura del recodo que llevaba a mi estudio. Dominic y Cara Elle estaban intentando sujetar a ese hombre, Christopher, que tenía la misma postura agresiva. Me acerqué rápidamente y él me escuchó y se giró hacia mí. Entonces vi un rostro deformado y ensangrentado en la boca, donde unos enormes y blanquecinos colmillos asomaban amenazadoramente. Tenía más pelo de lo habitual y parecía que cada vez le salía más. Me fijé en sus manos, donde las uñas habían dado paso a garras. Un hombre lobo.
– [Cara]¿Qué hace Duke aquí?[/Cara]- preguntó Cara mirándome, en parte sorprendida y en parte, definitivamente asustada.
– [Duke]Yo…[/Duke] – intenté pensar qué hacía allí, qué podía hacer, y entonces me di cuenta de que llevaba camisa de manga corta, pantalones finos y chanclas, y delante de mí tenía a un hombre lobo que según las historias te convertía si te mordía. No sabía lo que podría pasarme si me mordía a mí, o me arañaba. Pero ellos tenían que temer también y ahí estaban.  – [Duke]Escuché gritos. Puedo ayudaros.[/Duke] – les expliqué. No sabía cómo, pero algo haría.
 – [Dom]No creo que sea buena idea[/Dom].- replicó Dominic, preocupado, sin quitar la vista del hombre lobo Christopher. Se me ocurrieron un par de ideas para gráficos, pero eso más tarde, si no acababa muerto.
– [Duke]No me apetece que me dé un mordisco con esa boca, pero creo que a vosotros tampoco. Cuantos más…[/Duke] – dije intentando acercarme, con cuidado. Entonces le vi haciendo un movimiento rápido y me alerté, pensando que iba a atacar, pero en lugar de eso se llevó las manos a la cabeza, parecía estar pasando un tremendo dolor.- [MacLeod]Encerradme, ¡rápido![/MacLeod] – dijo con dificultad con una voz gutural que dudaba que fuese la suya, porque parecía la que usaba ‘Green Arrow‘ con su modulador de voz, aunque todavía más grave.
Ella y Dominic se acercaron a Christopher y lo cogieron cada uno por un brazo, pero Cara se giró para mirarme a los ojos. – [Cara]¿Vas a contarlo?[/Cara]- dijo haciendo que mirase fijamente a Christopher y su rostro deformado, contraído por el dolor, mientras empezaban a caminar.
– [Duke]No, lo prometo.[/Duke] – dije mirándola a esos preciosos ojos. No puedes Duke, hay otra persona.
Ella asintió. – [Cara]Confío en ti[/Cara].- fue lo último que dijo antes de que apurasen el paso intentando llevarle.
Me quedé un instante parado, pensando en todo eso, y fui hasta ellos, acercándome con cautela a Christopher. – [Duke]Tranquilo, no voy a hacer nada, solo quiero ayudarte.[/Duke] – dije antes de intentar cogerle para ayudar a los demás.
Algo cambió en su rostro de un instante a otro. – [MacLeod]¿Ayudarme a estar cautivo en esa celda? ¿A no sentir la brisa en el pelaje antes de que llegue el fin?[/MacLeod] – dijo mirándome con unos desorbitados ojos de un azul intenso, sobrenatural. – [MacLeod]Conoces el dolor que siento, déjame ir.[/MacLeod] – me pidió con su voz gutural, casi en un ruego. Me hizo dudar por un instante, pero sería mejor para él estar donde no hiciese daño a nadie.
– [Duke]Lo siento, lo agradecerás.[/Duke] – dije antes de ayudar a coger y cruzar los últimos metros del pasillo hasta la puerta en la que me había fijado el primer día, la de la cerradura con un lobo. La abrieron y vi una sala en la que destacaba una amplia jaula de gruesos barrotes, y cerca de ella, un sofá, una tele y un armario. – [Duke]Así que esto es lo que escondía la puerta con el lobo en la cerradura.[/Duke] – una habitación para encerrarle las noches en las que se convirtiese en hombre lobo.
Le metimos en la jaula, aprovechando que parecía seguir en una pelea consigo mismo, y cerraron. Después salimos y cerraron también esa puerta con llave. Imaginé que el sofá y la televisión serían para que alguien se quedase con él.
– [Cara]Era fácil[/Cara].- comentó Cara despreocupadamente encogiéndose de hombros.
– [Duke]Creo que no dejarás de sorprenderme.[/Duke] – admití sonriendo aliviado ahora que todo estaba bajo control. El tema eran todas las preguntas que seguían en el aire.
– [Dom]Eres fuerte para ser…bueno, un humano.[/Dom] – me miró con perspicacia. Me llamó la atención el hecho de que no se metía a sí mismo en el saco de humano, curioso.
 – [Duke]Las apariencias engañan.[/Duke] – contesté con una sonrisa, y caminé junto a ellos de vuelta con el resto. Quizá había llegado el momento de dar algunas explicaciones, quizá no. Esas cosas nunca se sabían hasta que te resultaban evidentes.
El caso es que para Duke Rivera, aficionado a la fantasía y la ciencia ficción, se le había abierto un amplio mundo que descubrir.

Comentarios

4 respuestas a «EXPUESTO»

  1. Avatar de Stefy

    ¡Duke! <3 A ver qué te cuentas, porque no es el mejor momento y ese título…

    – Deja de sospechar, maldita sea, que pareces el perro de Los Simpson. Sí, todas las ventanas son «necrotempladas» porque son ricos y les gustan las excentricidades. Tampoco es tan raro, ¿verdad? ¿VERDAD? (God, soy Cecil).
    – Lo que Duke no ha pensado es que, a lo mejor, cuando tienes una enfermedad grave el Ayto. de Moondale te subvenciona las ventanas raras. Es que lo suyo es sospechar por sospechar.
    – Los pies no le duelen por caminar, le duelen porque en el mes de octubre/noviembre y con un clima que debe ser medio asturiano…ya me dirás tú. Si luego te cortan los dedos, a ver qué va a ser de ti.
    – Me gusta ese instinto que le pide ayudar en cuanto oye el grito, aunque ese grito seguramente sea de MacLeod y este hombre se nos va a enterar de todo.
    – Duele ver cómo Duke se pregunta dónde están esos Moondies que deben ser tantos. Jo, mi preciosos niños y niñas, lo que les estamos haciendo 🙁
    – Sufro al imaginarme a MacLeod pasando por eso u_u A pesar de que todos los meses pase por lo mismo, yo viviría asustada por el dolor.
    – La excusa de Cara Elle no cuela. Este Duke es demasiado listo.
    – Sospecha incluso de Fenris, pues no sospeches de él que es un cacho de pan (con Nutella rrr).
    – A Duke le hace reír Cara <3
    – Dom rompe estereotipos y bragas/calzoncillos. Él es así de genial.
    – Oye Duke, no mires tanto a Diana que Alph se nos va a poner celoso xDD Diana atiende a razones y no sabe qué decirle, no es un buen momento para pensar.
    – Uy qué mal rollo que MacLeod se ponga en posición agresiva contra Dom y Cara.
    – Dom no quiere que Rebecca se quede sola, pero no le queda más remedio.
    – A Duke también le parece guapa Rebecca. Chico, contrólate que Alph te pega y ya en serio.
    – El duelo dialéctico entre Duke y Rebecca es genial (ignorando la parte que me toca), pero me siento mal por lo que hace Rebecca, que está tan obsesionada con lo que le hizo su padre, que se pasa… u_u
    – Sube a la sala y se encuentra con MacPerro u_u Tensión.
    – No me extraña que tanto Cara como Dom no quieran que esté allí. No es el mejor momento.
    – A Duke le gusta ‘Arrow’ xDD
    – Pobre Christopher. Esto es horrible T___T
    – Mal rollo ese momento de «¿Vas a contarlo» «No, lo prometo» y «Confío en ti». Esas cosas SIEMPRE salen mal.
    – MacLeod prácticamente convertido en el lican, hablando de jaulas y de su pelaje :((((
    – Gracias a Duke consiguen que entre en la jaula. Mi Christopher T___T
    – La sala con la imagen del lobo escondía, como bien dice Cara, algo fácil.
    – Dom sospecha de Duke. Si Dom dice que no es de fiar, yo tampoco me fío.
    – Para Duke se ha abierto un nuevo camino, pero a ver los Moondies cómo lo llevan.

    Un POSTAZO FANTÁSTICO. Duke es genial, aunque debería dejar de sospechar de todo.

  2. Avatar de Alph Lopez
    Alph Lopez

    Bueno, vamos con Duke, ahora que he parado un poco del vicio que llevo en el Arkham Origins xD
    – A Duke le llama la antención las ventanas, sabe que son caras y no es que los Moondies esten sobrados de dinero ahora mismo, eso fue, un regalo xD Piensa que alguno tiene alguna enfermedad de la piel, no hombre, es solo que no nos gusta quemarnos al sol xD Por cierto, esto ahora es un arma de doble filo, que al principio estaban para Mara, pero ahora cualquier vampi puede entrar a…. charlar xD
    – Normal que le duelan los dedos de los pies, y eso no es de la caminata. Veras cuando le corten los dedos y no pueda volver a ponerse chanclas. DRAMA xD
    – Va a ver de quién es el grito y si puede ayudar, se piensa que es un obrero que se le ha caido algo encima. Lo de la sala de la televisión y esa referencia a que si los Moondies eran tanto, donde se habian metido, ha dolido.
    – Se piensa que algien ha intentando atracar a Cara… y que era el hombre el que grito. Cara Elle, partiendo cara a delicuentes. xD Por favor, as escusas de Cara son ORO, Mac tiene gases, no puedes entrar. xDDDDDD
    – El grito de Cara, asi sonara para que se parezca a el de un tío xD Ya conoce a Cara y Dom, pero se sabe el nombre de todos, y ahora, los va a concer a todos…. los que quedan.
    – A Duke le parece guapa Diana, por favor, por supuesto que lo es, pero aparta tus ojos de ella, que es mia, mia y de Mac… xDDDD
    – Duke, hazle caso a Diana, que a pesar de tener ese aire maternal es la jefa y si te da el día libre te lo tomas xD
    – Duke solo quiere ayudar y las chicas van a darle la patada para que no entre, ahora le toca a Rebecca xD
    – Rebecca la puertas, que por aquí no pasas, no sigas xD Duke, apreciando la belleza de las chicas. Tú sigue intentandolo con Cara si no quieres buscarte problemas con el genero masculino de los Moondies xD Rebecca preguantandole que para quién trabaja, no se fian ni de su sombra, puede ser de Z, o Preston.
    – Recibe una descarga de Rebecca y aun asi sigue siendo majo. TU ERES MALO xDDDD Y algo más que humano para aguantar semejante descarga.
    – Aquí llega Duke a la ayudar, con su camisa de mangas cortas y sus pantalones cortos, a enfrentarse a un licantropo, la mejor vestimenta para enfrentarse a uno de ellos. xD
    – Referencias a Arrow, Mac y sus voces guturales, deberia de formar una banda de heavy, los licantropos o algo asi xD
    – What the frak acaba de pasar?, lo del lican hablando me ha gustado mucho, pero eso que le dice a Duke, que él también conoce el dolor que siente, que eres Duke. Un lican que se ha hecho con el control del cuerpo humano? xD
    – El sofa y la tele son para Mac, y para el lican, imaginaos que le ponen un salvapantalllas de un pardo, lo mismo se calma. xD
    – Dom lo ha visto demasiado fuerte para ser humano, y Duke se ha fijado en que él no se mete dentro del saco de humano, si aqui todos son una panda de bichos raros con poderes.
    – Si, explicate, nada de ocultar nada. REUNION, REUNION.
    Postazo, y que gran persona parece ser Duke.

  3. Avatar de Stefy

    Muchísimas gracias a los dos *__*

    Como recompensa, voy a decir que en realidad Duke es ****** ….. es ****** …..vaya, la productora de Moondale me ha censurado, parece que no puedo deciros lo que es en realidad.

    1. Avatar de dracon
      dracon

      Bueno, que conste que lo anterior lo puse yo pero alguien se había dejado la cuenta abierta xD

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