OWEN WILLIAMS
NOCHE – DYAVOL
No sé porque pensaba que esto iba a ser una misión fácil, entrar, dar con el Daë, salir y volver a casa, pero esta claro que no hay nada sencillo en la vida. Me habían puesto de líder de grupo porque entendía de el tema en el que este mundo se había quedado estancado en el tiempo, pero para empezar no se veía ninguna bandera negra con una calavera ondear en el barco.
Seguido por la inclusión de mujeres dentro de la tripulación del capitán, eh, me parece genial, igualdad. Pero una mujer estaba considerada como augurio de mala suerte entre los piratas. Lo que me lleva a mi siguiente cuestión, esta gente no tiene pinta de piratas, podía ver el miedo en sus ojos, estaban más asustados ellos de nosotros que nosotros de ellos. Los sables temblaban en sus manos a excepción de la pistola del capitán, su mirada era diferente de la del resto, eran los ojos de un hombre con determinación.
– [Xander]Hemos acabado aquí, pero no lo pretendíamos.-[/Xander] Xander alzo las manos para no alterarlos más, hice lo mismo y el resto siguió con el ejemplo. Pude ver como mi hermana se contenía las ganas de decir algo. Al menos en este mundo parece que las mujeres estaban mejor vistas y no tenía que organizar una nueva revolución. Jane gobernando un buque de guerra solo de mujeres.
– [Francis]¿Entonces que es lo que pretendíais muchacho?.-[/Francis] Francis tiro del percutor de su arma hacia atrás y en un gesto tremendamente estúpido o sorprendentemente valiente, según lo queráis ver, di un paso hacia delante para que me apuntara a mí.
– [Ruby]Pretendíamos llegar a tierra firme.-[/Ruby] Las palabras de Ruby parecieron alterar a algunos de los tripulantes de James, los susurros se amontonaban a su espalda, pero con un gesto de su mano hizo cesar el murmullo de todos. Eso si era un líder y no yo.
– [Cole]No queremos causar problemas.-[/Cole] Intervino Cole. Era un tío silente y tranquilo, lo mismo conseguía apaciguar las dudas de James.
– [James]¿Cuáles son vuestras intenciones cuando lleguemos a Avalon?.-[/James] Reconocí ese nombre, Avalon era una isla mágica de la mitología del Rey Arturo. Se decía que el tiempo en ella transcurría más despacio y que estaba gobernada por hadas. A mi hermano le encantaba la mitología y a mí escucharle hablar de ella.
– [Xander]Como os han dicho, no queremos problemas. Venimos a ayudar.-[/Xander] Era verdad, nuestra idea era ayudar, pero no sé porque a veces tenía la sensación de que hacíamos más mal que bien y dejábamos algunos de esos mundos patas arriba.
– [Jane]No quiero que piense que le estoy faltando al respeto… ¿capitan?. Pero como usted verá, no tenemos pinta de… ¿corsarios?.-[/Jane] Muy bien explicado hermana y no lo digo de forma irónica, ha acertado dos de dos, es capitán y no tenemos pintas de corsarios, de hecho nuestras ropas eran bastantes normalitas, como las de ellos, eso si las suyas estaban más raídas.
– [Francis]Perdonad mi brusquedad.-[/Francis] Francis volvió a colocar el percutor de su pistola y la enfundo en su cintura. El resto de su tripulación hizo lo mismo y enfundaron sus sables. -[Francis]Toda precaución es poca, llevo un barco cargado de refugiados.-[/Francis] Eso explica el miedo de su tripulación, no están transportando cofres llenos de oro y objetos preciosos, están cargando consigo con algo mucho más importante, vidas humanas.
– [Xander]¿Estáis en guerra?.-[/Xander] Y en que mundo no Xander, Francis le miro extrañado, creo que habíamos omitido decir que no éramos de este mundo.
– [Francis]La oscuridad se cierne sobre tierra firme y el único vestigio de esperanza es Avalon.-[/Francis] Quizás tenían uno más cerca del que pensaba. Desde que llegamos no pude evitar percatarme de que estábamos en un objeto en movimiento. Algo de este navío estaba vinculado al totem de la luna de Viltis, si lo encontraba, todas estas personas podrían vivir a salvo allí.
– [Owen]No solo en este mundo se avecina esa oscuridad. Estamos aquí porque alguien de este mundo puede salvar vuestro mundo y los otros.-[/Owen] Aunque quizás de este ya quedaba poco que salvar. Francis no pareció inmutarse ante la idea de que existieran varios mundos. Xander sonrío aprobando mi respuesta, no era nada que no hubiéramos ensayado antes. Era merito suyo, él debía ser el líder del escuadrón.
– [Ruby]Por eso necesitamos viajar en tu barco.-[/Ruby] Apunto Ruby. Me pregunto si existían más barcos como este o si Francis era él único al que no le importaba anclar en una tierra desolada en busca de supervivientes.
-[Xander]No levantaremos un arma más que para protegeros en el camino.-[/Xander] Que labia tenía el cabrón y que bien explicado el porque portaba un arma a su espalda.
– [Francis]¿Y esa persona a la que buscáis tiene nombre?.-[/Francis] Viendo como estaban las cosas aquí lo mismo esa persona estaba en el barco.
– [Cole]Su nombre es William Daye. Un…-[/Cole] Cole se vio interrumpido por una fuerte corriente de aire frio. Entre el viento me pareció escuchar los lamentos de alguien. Francis estaba paralizado, quizás también había escuchado esos lamentos, o había reconocido el nombre que le dio Cole. Los ojos podían decir mucho de una persona, no había miedo en ellos, no eran los lamentos lo que le paralizaba, era el nombre de William, Francis conocía al Däe que estábamos buscando.
– [Jane]¿Alguien más se esta mareando?.-[/Jane] Jane estaba pálida y se apoyo contra el mástil del barco. Me iba a acercar hasta ella, pero los miembros de la tripulación de Francis comenzaron a correr de un lado a otro.
– [Francis]Apagad las luces, ocultaros con los demás y protegedlos. Vosotros, conmigo.-[/Francis] Las velas del navío se fueron apagando y en una noche despejada rodeados de una ligera bruma lo único que nos iluminaba era una impresionante luna llena que me dejo pasmado por unos segundos.
– [Ruby]Seguid al capitán.-[/Ruby] Nadie me seguía a mí así que debía de tratarse de Francis.
– [Jane]No me encuentro bien…-[/Jane] Jane se oculto tras el mastil y la escuche vomitar, dudo que a Francis le importara que mi hermana le potara en su navío. Por otro lado hizo bien, si hubiese asomado la cabeza por la borda para hacerlo lo mismo se habría caído al mar por el mareo.
– [Xander]¿Es lo que parece?.-[/Xander] Susurro Xander al ver emerger de entre la bruma un barco, pero en unas condiciones horribles. Tenía las velas destrozadas y balas de cañón por el casco del barco, pero aun así seguía navegando como por arte de magia.
– [Owen]¿Serán calamares o esqueletos?.- [/Owen]Los que nos quedamos en la cubierta del barco nos agachamos un poco para que no nos vieran. Xander, imitando a Francis desenvaino ligeramente su espada en caso de que se vieran obligados a utilizarlas. Ruby saco dos dagas de sus botas y Cole hizo lo mismo. Aquí el único sin armas, un servidor.
– [Sophie]Puedo intentar ir al agua y transformarme en sirena a ver si soy más útil que aquí.-[/Sophie] Propuso Sophie. Los lamentos del barco sonaban cada vez más cerca.
– [Francis]Los humanos no somos los únicos que hemos huido de tierra. El mar esta infectado de criaturas, yo en tú lugar no lo haría.-[/Francis] Asome la cabeza por la borda, en el agua varias sombras se movían rodeando el barco de Francis. Me vinieron los flasbacks del mundo vikingo con esas criaturas marinas.
– [Cole]Están muy cerca. Quizás pasen de largo.-[/Cole] El barco de los lamentos, llamémoslo así, se puso a la par nuestras. Estaban tan cerca que podía escucharse el crujir de la madera.
– [Ruby]Francis, es tu barco y somos parte de tu tripulación: dinos cómo podemos ayudar.-[/Ruby] Dos ganchos se clavaron contra el estribor del barco, las cuerdas se tensaron y los barcos se acercaban entre si cada vez más y más.
– [Francis]Atacad.-[/Francis] Criaturas de todo tipo se abalanzaron sobre nuestro barco. Francis y Xander asestaban mandobles a unas criaturas que ya eran más hueso que otra cosa.
Agarre una de las espadas que habían caído al suelo, no sabía usarla, lo más seguro es que acabara cortándome a mi mismo de forma estúpida, así que me dedique a blandir la espada dando cortes en el aire repeliendo las criaturas que se me acercaban mientras el resto acababa con ellos. Una pantera se abalanzó sobre unos cuantos envistiéndolo todo a su paso y un pájaro enorme agarro por sus patas a otro tarándolos por la borda. Mi hermana por su parte cogió un remo del bote salvavidas y se dedico a asestar golpes a todo el que se le acercaba.
Un sollozo me sobresalto, no parecía que ninguna de esas criaturas fuera a llorar. Cerca de las escaleras que daban al interior del barco un niño lloraba al verse rodeado por esos seres. Sin pensarlo, propio en mí, me avalance sobre ellos gritando y aseste mandobles a todo lo que se acercaba.
– [Owen]¿Estas bien?.-[/Owen] Me había salido el instinto fraternal. Ver a aquel niño indefenso me recordó a Elliot, así que me lance contra esas criaturas que le estaban acosando. Una sonbra se reflejo tras el niño, así que rápidamente lo encerré en el camarote de Francis y me gire solo para darme de bruces contra un licántropo. De un manotazo me lanzo por los aires e impacte con la madera del suelo, la madera crujía a mi alrededor, no solo de mi impacto, también del licántropo que se abalanzaba sobre mi. Sus garras se clavaron en mi costado y agarre su brazo peludo intentado frenar que fuera más allá.
Note su aliento contra mi rostro, la boca me sabía a hierro por la sangre, empezaba a notar el costado entumecido y no pude evitar sonreír ante la ironía de todo esto. Empecé a notar como la sangre me hervía y mi cuerpo se calentaba en lugar de enfriarse. Aferre mi mano con más fuerza contra su brazo y de mi mano surgió una llama. El licántropo aulló de dolor intentando zafarse y comenzó a oler a pelo quemado.
Tras soltarle retrocedió un par de pasos, me reincorpore a duras penas y clave mis ojos en él, tras esto salió corriendo huyendo, no sé lo que vio en mí, tal vez los ojos de un hombre sin miedo. Lo último que alcance a ver antes de desmayarme de dolor fue a Francis y Xander cortas las cuerdas que conectaban a ambos barcos.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.