Moondale

LAS MANOS VAN AL PAN

Chloe – Kardas

Mañana

La ropa de esta época, que tanto se parecía a la Edad Media, picaba. Supongo que el hecho de que estuviera hecha de lana influía. El vestido, de tonos rojizos y amarillos, era de manga larga e iba acompañado de una toca que me cubría el pelo. Había tenido suerte y mi compañero de mundo era Dante, pero qué asco de sitio. La higiene brillaba por su ausencia y tuve que dejar atrás la extravagancia de lavar mis atuendos (¡DOS!) a diario, porque la gente comentaba que era una cosa muy rara.

Vivíamos en una pequeña aldea en la orilla del río que dependía del noble de turno. Un tiparraco orondo y más feo que una nevera por detrás que se llevaba el diezmo de todo. Así pues, cuando vimos de qué iba la cosa y que Dante, con sus habilidades de mecánica no iba a llegar muy lejos, se acercó a casa del antiguo herrero y aprendió el oficio. Yo, por mi parte, lo único que podía hacer era mantener la casa limpia y cocinar. Si volvía a escuchar una vez más que por qué no teníamos hijes, me tiraba por un tajo.

La casa era una única estancia en la que estaban la herrería, el camastro y el fuego donde cocinábamos. No era un sitio muy agradable, porque la mayor parte del tiempo hacía un calor infernal. Además, estaba convencida de que construían con mierda de vaca, porque siempre olía así. Ah, y si os estáis preguntando que dónde íbamos al baño, mejor os dejo con la duda.

— Vete, chaval, aquí no quedan héroes. — escuché cómo Dante hablaba con un niño sin dejar de golpear la espada en la que estaba trabajando.

El crío echó a correr cerrando la puerta tras de sí y yo, que venía del río de coger un poco de agua, posé el cántaro antes de hablar puesto que pesaba como un muerto.- [Chloe]Cada vez que digas eso: chupito[/Chloe].

– [Dante]No voy a mentir al renacuajo[/Dante]. – se excusó y metió la espalda en el balde para enfriarla.- [Dante]Estamos retirados, nuestra gran recompensa ha sido acabar aquí[/Dante].

– [Chloe]Sure. La Edad Media es maravillosa. Sobre todo cuando la peña deje de tirar la mierda por la ventana[/Chloe].-  puse los ojos en blanco y me abaniqué con la mano. En vez de herrero podía haber sido zapatero.

– [Dante]Era ironía Chloe, aquí lo más motorizado es un caballo hinchado de alubias[/Dante].- se secó el sudor con el dorso de la mano y se acercó a mí. Lo que más me gustaba de su trabajo es que el delantal que usaba era sin mangas y se le veían los brazos musculados.

– [Chloe]No estarás esperando a que me ría, ¿verdad?[/Chloe]-  parpadeé un par de veces y me fijé en que el pan que había dejado levando, se había convertido en el Jabba de Hutt de los panes.

– [Dante]Tengo pocas aficiones hoy por hoy[/Dante]. – admitió y buscó un vaso para echarse agua. – [Dante]No hay coches, ni tele, esta todo plagado de enfermedades venéreas…[/Dante]

– [Chloe]Deberías mirar mejor con quién intercambias fluidos[/Chloe].-  sonreí de medio lado y destapé el pan. Después, empecé a darle forma a las barras.

– [Dante]Ahora mismo tengo en mente sólo una candidata[/Dante].- me susurró en el oído. Noté un calor de sobra conocido ahí mismo .

– [Chloe]¿Has pensado en que quizás no estés muerto en mi tiempo, sino que nunca llegaste a salir de aquí?[/Chloe]- comenté girándome.

– [Dante]¿Eso significa que tú tampoco?[/Dante]- preguntó enarcando una ceja.

– [Chloe]Yo a mí misma no me he visto nunca, bro[/Chloe].- me reí.

-[Dante]Me quedo con esta teoría en lugar de morirme, pero tampoco habría estado mal ese en el que eran los 60[/Dante].

– [Chloe]Por los coches, ¿no?[/Chloe]- puse los brazos en jarras.

– [Dante]La higiene, la ropa…[/Dante]- contó con los dedos.- [Dante]Tampoco me quejaría por verte en toga, o con un par de pieles[/Dante].

– [Chloe]En tus sueños[/Chloe].

– [Dante]Habitualmente, a veces tienes un par de clones[/Dante].- soltó una carcajada socarrona y yo le enseñé el dedo corazón de la mano derecha.

– [Chloe]Ya tengo listo el trabajo de hoy y de mañana[/Chloe].- señaló con la cabeza en dirección a la espada.

– [Chloe]Al menos tú puedes hacer algo[/Chloe].- suspiré.- [Chloe]Las mujeres en esta época no pintamos nada[/Chloe].

– [Dante]No nos queda otra que adaptarnos[/Dante].- sacó la esfera del bolsillo de su delantal y, de nuevo, parecía poco más que un pisapapeles.

– [Chloe]Espero que alguien nos saque de aquí, porque si depende de nosotres…[/Chloe]- terminé de darle forma a las barras y las coloqué en el horno de piedra. Vi, asimismo, que la sopa que había dejado puesta parecía comestible.

– [Dante]Lo dices como si no lo hubiéramos intentado[/Dante]. – se quejó.- [Dante]Los portales no son más que monumentos ya. Nadie contesta[/Dante].

Probé la sopa. No era horrible. De pronto, alguien nos habló.- [Laura]¿Hola?[/Laura]

La imagen de Laura la tránsfuga se materializó frente a nosotres. Si las esferas no funcionaban, no entendía de qué iba esta vaina, pero para adelante.- [Dante]¿Qué coño?[/Dante]- replicó Dante, que tenía el carácter de una almorrana.

– [Laura]Dante, Chloe. ¿En qué mundo estáis?[/Laura]- me envaré. Esa tía me sacaba de mis casillas con las cejas perfectamente delineadas, no como las mías que empezaban a parecer una sola. Griciis, ginítiqui di lis Miclii.

– [Dante]El de la Edad Media, Kartas o algo así[/Dante].- puse los ojos en blanco. No sabía si era por culpa de la tía esta que estaba tocándose el pussy en su casa, porque-se-veía-detrás-de-ella.

– [Chloe]KARDAS[/Chloe]- le corregí.

– [Laura]¿Estáis bien?[/Laura]- nos preguntó. Estábamos bien porque no estábamos muertes, pero vamos…

– [Chloe]De maravilla, ¿ no se nota? Mira, si hasta hago pan y todo como una influencer cualquiera[/Chloe]- espeté y al ver que Dante me miraba pidiéndome que bajara las revoluciones, tomé aire y cambié la dirección de la conversación.- [Chloe]Dime que tienes a les Moondies ahí para hacernos de guía y saltarnos esta fase del juego[/Choe].

Me pareció ver que asentía. Malditas cejas. ¿Con qué se las depilaba, con un tiralíneas?- [Laura]Estoy intentando hacer las cosas bien. No sé cómo saldrá. Volveré a contactar con vosotros más adelante[/Laura].

– [Dante]Si nos sacas de aquí, para mí serás una santa[/Dante].- quise darle un puntapié.

– [Laura]Yo solo soy el Enlace. Nos vemos. Tened cuidado[/Laura].- le restó importancia y se esfumó. Santa Laura, no te jode.

– [Dante]Pues nada, ¿te apetece hacer algo por si nos vamos?[/Dante]- esbozó una sonrisa socarrona y fue a pellizcarme el culo.

– [Chloe]Eh, eh. Stay away, que las manos van al pan[/Chloe].- bromeé entre risas.

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