Moondale

Autor: Destino

  • LA ULTIMA BIENVENIDA

    [b][ Ben McBeth | Su buhardilla [color=green]{ Con Alice }[/color] ][/b][/align]

    benjaminmcbeth

    Diez de diciembre de dos mil nueve. Un día extraño como pocos en el que un demonio con un pasado lleno de sangre es abordado por Aesires y brujas para unirse a una causa que ni le va ni le viene. Él, en lugar de subirse a su Harley y huir, compra dos batidos, mantiene una desconcertante conversación con una cazavampiros recién salida de una serie de animación para niñas y acaba alquilando una pequeña buhardilla en el centro de Moondale. Aquel había sido mi día, ni más ni menos, y ahora que la noche ya había caído y las calles de Moondale empezaban a ser silenciosas, yo me dejaba caer en uno de los sillones del pequeño salón, con la vista puesta en la ventana y una cerveza en la mano. Era agradable, después de estar todo el día de aquí para allá, descansar sin pensar en nada.

    El lugar era pequeño. Una buhardilla, ni más ni menos, en la que el salón constaba de sofá de dos plazas, tele pequeña y una enorme mesa, casi fuera de lugar, con una solitaria silla en uno de sus extremos. La cocina estaba separada sólo por una barra y la cortina marrón del fondo esconcía al otro lado una cama de matrimonio, una cómoda y una puerta que daba a un pequeño baño. Era suficiente para mí y podía decir que la había adquirido legalmente; había un par de fajos de billetes menos en mi mochila.

    (más…)

  • NUEVA COSTUMBRE

    [b][ January Allard | Residencia Universitaria Hexe | Dormitorio ][/b][/align]

    januaryallard

    La [URL=http://www.goear.com/listen/8c7a166/surfing-usa-beach-boys]sintonía del móvil[/URL] me despertó de una siesta que no había planeado. Por que sí, mis planes estaban, de hecho, cuidadosamente calculados en mi agenda; era mi nueva costumbre, recién adquirida la noche anterior al volver de ayudar a Sarah con su cita. Si lo planeaba todo de modo que estuviera ocupada de la mañana a la noche, tal vez no tendría tiempo para pensar en nada, como no lo había tenido esa tarde entre vestidos, cotilleos y risas estúpidas con sabor a osito de gominola. Así que lo primero que había hecho esa mañana había sido comprar una agenda, ir a tomar un café y planear mi día minuto a minuto. Podía avanzar temario de examen, lo cual me vendría bien; no sabría cómo afectaría el período sin clases a mis futuros exámenes y no pensaba meter la pata el último año. También podía ir de compras, dar una vuelta, comenzar con esa idea mía de estudiar español o simplemente dedicarme a ordenar el desastre que tenía por habitación

    En su lugar, mi primera parada habían sido las lindes del bosque de Moondale. Había tomado el coche, dispuesta a ir a una papelería que adoraba y atiborrarme a lápices de colores y cuadernos en los que escribir canciones tontas acompañadas por dibujos aún más tontas, pero antes de darme cuenta estaba tomando el camino contrario y aparcando justo frente a los árboles. Me había costado tres minutos ser consciente de dónde estaba: exactamente en el lugar por el que había salido el día después de mi asuntillo peludo. Reprimiendo un escalofrío, había decidido que era suficiente y, en lugar de arrancar y marcharme, me había echado mi cazadora sobre los hombros y me había adentrado levemente entre los árboles.

    (más…)

  • UNA CARTA INESPERADA

    [align=center][SIZE=7][b]Diarios de Destino[/b][/SIZE][/align]

    cecilanwalt

    Sarah Echolls aún estaba tumbada sobre su cama, disfrutando de la felicidad que le proporcionaba organizar el cumpleaños sorpresa de tres de las personas más importantes de su vida, cuando alguien tocó a la puerta de su habitación. Casi ni pudo responder cuando su madre, Elizabeth Echolls entró con un sobre en las manos.

    – [b][i]Sarah cariño, en el buzón había una carta para ti[/b][/i].- Dijo dándosela a su hija con una enorme sonrisa.

    – [b]¿De quién es?[/b] – Preguntó la Cazadora cogiendo el sobre con el ceño ligeramente fruncido. En la era de Internet nadie mandaba cartas.

    La chica le dio la vuelta y vio en el remitente el nombre de Cecil Anwalt provocando que una sonrisa se dibujase en su rostro.

    (más…)

  • CAMPANILLA

    [align=center][b]Suzanne Sommerville | Residencia Hexe [/b]

    annsommerville

    [QUOTE]- [i][b]Vale, nos vemos, guapa. Un besote.[/b][/i]- y colgué.[/QUOTE]

    Acababa de despertarme con [URL=http://open.spotify.com/track/0uGps3BPhLvK3eUsShjHRz]Next Go Round[/URL] al lado de mi oreja. Y si mientras estuve hablando con [b]Sarah[/b] había estado lo suficientemente adormilada como para no darme cuenta, ahora mismo mi cerebro parece estar golpeando las paredes de mi cráneo para salir a dar un paseo. [i]Nunca más, tequila, nunca más[/i]. Cierro los ojos con fuerza, girándome sobre la cama como una croqueta para quedarme bocabajo. En mala hora se me ha olvidado cerrar las persianas. La claridad me horada los ojos. Hundo el rostro en la almohada y respiro el olor. Es como el de mi champú, que de tanto irme a dormir con el pelo húmedo debe habérsele quedado.

    Son demasiadas cosas para asimilarlas todas en tan poco tiempo. Parece que ha pasado un mes desde que [b]Ed[/b] me ha dicho que soy una chica-lobo, pero solo han pasado quince horas, veinte, como mucho. Y la verdad, aún no tengo especialmente claro qué pensar al respecto. Asumido ya lo tengo, no sé, no ha sido tan terrorífico como si me hubiesen dicho que estoy en la fase terminal de alguna enfermedad. No tengo miedo, al menos, no por mí. Lo único que quiero es no hacer daño a nadie. Y para eso debo empezar por leerme el libro que [b]McLeod[/b] me dio.

    (más…)

  • LOCA

    [b] [align=center]~ Dylan Marc James | Piso compartido | Con Alice & Maximilien ~[/b]

    dylan

    [spoiler] No contiene sexo explícito, pero si palabras hardcore, y en la escena se huele mucho ust. Solo lo aviso.[/spoiler]

    Yo seguía jugando con aquella pelota de tenis, lanzándola hacia la pared y recibiéndola. Llevaba así un largo tiempo, y me estaba dando cuenta de que cada vez hacía más ruido, de que la lanzaba con mucha más fuerza que al principio. No me hubiese sorprendido si hubiese hecho un agujero. Y es que no podia aguantar aquel olor, aquella sensación de hambre, aquellas ganas inmensas de morder. Me sentía como un vagabundo que pasa frente al [i]McDonald’s[/i] y ve las hamburguesas de tres pisos llamándole. Como un niño pequeño que para en la tienda de golosinas y su madre se niega a comprarle la piruleta de colorines. O como una obesa en operación bikini, muriéndose de ganas de comerse una pizza cuatro estaciones. Igual, exactamente igual, pero modificando un detalle: la sangre.

    Tener a una humana en la misma habitación que Dylan M. James solo puede significar que la pobre víctima no vería la luz del dia siguiente, pero lo tenia prohibido, al menos con aquella humana. Aquella situación era peor que un mal polvo.

    Vi a Alice moviéndose por la habitación, como buscando algo. Iba radiante como siempre, sea de dia, sea de noche, esté lloviendo o soleado, Alice nunca repetía conjunto. Y eso me gustaba en ella, por lo demás, nuestra relación se basaba en un odio-amor insoportable. Pero preferia aquello a no tener nada, dato que la susodicha no conocería jamás.

    (más…)

  • PASEO Y DISFRUTE

    [b][Maximilien|| Su casa][/b][/align]

    callemoondale113

    El vaso de cristal estaba literalmente vacío, y mis dedos parecían aburrirse, dado que no lo soltaban en absoluto. Con la mano libre, me apreté los ojos, intentando liberar una frustración que venía carcomiéndome desde horas atrás. Maldita Alice, si no hubiese aparecido anoche, no estaría con una calentura continua esta mañana. Me levanté del sofá hacia la barra, agarré la botella de cristal y rellené mi vaso con escocés puro de anda a saber de que año. Observé mi inexistente rostro en el líquido ámbar, agradeciendo no poder verme; no estaba de humor para saber si me veía fatal. Que de seguro estaba viéndome fatal. Me bebí el escocés de un solo trago, disfrutando ese ardor bajar por mi garganta.

    Seguía teniendo sed, pero no de bebidas añejas del Reino Unido. Era esa sed que llamaba al cazador que vivía debajo de mi piel cada día desde hace doscientos años. Y mi comida me esperaba en una habitación, bastante cuidada. Dejé el vaso en la barra, crují los huesos de mi espalda y cuello, preparándome para un desayuno de unos veinte años, rubia y ojos verdes. Delicioso.

    La chica en cuestión estaba acurrucada y temblando en la esquina de la habitación, sollozando compulsivamente y abrazando sus piernas. Se acurrucó más al percibir mi entrada en el lugar. Me sonreí, acercándome hacia ella, a una distancia no mayor de cincuenta centímetros, lo suficiente para no atacarla así como así (que tengo modales a la hora de comer) y para intimidarla un poco más. Me acuclillé, sin dejar de mirarla; piel pálida, cubierta de pecas, cabellos rubios, una mezcla entre platino y dorado y ojos enrojecidos que resaltaban más ese verde aguamarina. Seguramente tenía ascendencia sueca u holandesa o alemana, ¿quien sabe?.

    (más…)

  • ACERCAMIENTO CON CAFES

    [b][ Ben McBeth | Calles de Moondale | [color=green]{ con Sarah Echolls }[/color] ][/b][/align]

    benjaminmcbeth

    La gente normal llega a una ciudad nueva, amuebla su casa comprando en Ikea y sale, cámara en mano, a conocer la ciudad para poder enviar a sus familiares la imagen de su nuevo y feliz hogar. La gente como yo llega a una ciudad, se topa con una bruja preciosa, toma un escocés en un bar de demonios con un vampiro con ínfulas de William el Sanguinario y es abordada el mismo día por un Aesir y una bruja pelirroja con un objetivo común: convertirme en el aliado de una causa absurda y muy fuera de sus posibilidades. Otra cosa tal vez no, pero podía asegurar que mi llegada a Moondale había resultado de lo más interesante.

    El caso es que… no estaba acostumbrado. No estaba acostumbado a que me pidieran ayuda, a no ser que se tratase de algún asunto turbio y hubiera una cierta cantidad de dinero de por medio. Y tampoco a que tratasen de darme lecciones morales sobre cómo no estamos solos en el mundo. Puestos a enumerar cosas a las que no estaba acostumbrado, ni siquiera lo estaba a que desconocidos me hicieran ofertas mientras caminaba por la calle o me tomaba un café (muy oscuro, nada de azúcar; horrible para las venas pero perfecto para mi cerebro). Quizás de ahí viniera la curiosidad.

    (más…)

  • RESACA

    [b][Jamie Smith || Residencia Hexe || {Con Dominic Williams}][/b][/align]

    jamiesmith

    El sonido estridente ocupaba toda la habitación, causando que frunciera el ceño en mi somnolencia. En mi cabeza parecía tener una competencia de bandas: la banda marcial y una banda de punk- rock heavy. Agarré la almohada y me tapé la cabeza, dispuesta a ignorar ese sonido y el dolor de cabeza; más esa sensación de pesadez en todo el cuerpo. La resaca parecía estar divirtiéndose a costa mía, honestamente a mí no me parecía divertido en absoluto. El estómago dio un vuelco, haciendo que me incorporase bruscamente, corriendo hacia el baño. No sé ni que devolví contra en el retrete, tampoco quería pensarlo mucho. Así que éstas son las épicas borracheras con resaca incluida que sufrían mis ex compañeros de secundario.

    Me dirigí hacia el lavabo y remojé mi cara, cuello y cabello. Apoyé la frente contra el grifo de agua, con ambas manos intentando ser una fuente de agua, mientras ésta se escurría entre mis dedos. Metí mi rostro, dejando que el agua helada me despabilara la resaca. El sonido estridente no paraba de sonar, poniéndome de ligero mal humor. Cuando me sentí lo suficientemente recuperada, cerré el grifo y me devolví hacia mi cama, mirando mi móvil moverse sobre la mesita de noche. La pantalla decía ‘Nana’ y cerré los ojos, de frustración; debería haber roto el móvil en vez del teléfono de la habitación. Me recogí el cabello húmedo, recogí mis piernas estilo Buda y atendí a mi abuela, con cierta resignación.

    (más…)

  • RECOGIENDO LA COSECHA

    [align=center][SIZE=4][font=Bookman Old Style]Diarios de Destino | Exterior de Silver
    [/SIZE]
    callemoondale113[/align]

    Un paso, dos, tres…la pálida imitación de ser humano caminaba lentamente, sintiendo como cada segundo su último cuerpo se quedaba seco, sin vida, pronto tendría que tomar posesión de otro, ese era su eterno destino, vivir siempre en un cuerpo que no sería el suyo, y morir una y otra vez, era una simple marioneta de la muerte, sin más sentimientos que la acera por la que caminaba.

    Las puertas del Silver se abrieron de par en par, dejando paso a un par de muchachos bastante borrachos que se tambaleaban buscando un lugar donde despejarse.

    – [b]Dios tío, creo que me he enamorado, ¿has visto a la pelirroja? [/b] – preguntó el más alto, de pelo castaño a su amigo de pelo rubio mientras se apoyaban en la pared de fuera. – [b]Es una…una…dios tío. [/b]

    – [b]Ya te digo… [/b] – confirmó el rubio. Después de unos segundos de silencio añadió. – [b]Como soy buen amigo… te dejo a la pelirroja. [/b] – se colocó frente a su amigo y le puso una mano en el hombro. – [b] Peeeeero…yo me quedo con la rubia y con la morena. [/b] – añadió con una sonrisa de oreja a oreja y los ojos medio entrecerrados. Después el moreno le rodeó torpemente con los brazos, y se quedaron así, tambaleándose, durante varios minutos, como si solo hubiesen pasado segundos.

    (más…)