Moondale

Categoría: Diario de Kaylee Echolls

  • OJALA ESTUVIESE EN MOONDALE

    [align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=3]Kaylee Echolls | Louna

    [color=#FE642E]Mediodia[/SIZE][/color][/font][/b]

    kaylee13

    [SIZE=2]
    Era casi la hora de comer y aunque todavía me quedaban cosas por hacer, informes que redactar y llamadas que atender, descolgué el teléfono, cogí el bolso y eché a andar en dirección al parque más cercano para sentarme a comer tranquila. Cuando estaban cerrándose las puertas del ascensor, escuché a alguna de mis compañeras decirme que por qué no iba a la cafetería, como hacían todas, por lo que me inventé una excusa y fui hasta el parque lo más rápido posible. No quería parecer antipática, porque eran una corte de arpías y necesitaba el dinero, pero también necesitaba mi espacio y sobre todo, necesitaba a alguien.

    (más…)

  • DISFRUTANDO AL MAXIMO

    [align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=3]Kaylee Echolls | Casa de los McLeod, Nochebuena| Parte III

    [color=black]Noche[/SIZE][/color][/font][/b]

    kaylee13

    [SIZE=2]

    Las bromas sobre nuestro pasado me hicieron relajarme. – [b] [color=#F56828]No es verdad, siempre fue más de rubias[/SIZE] [/b]. – Me defendí.

    – [b] [i] [color=#BB609C] Pues ahora es de rubios[/color] [/i] [/b].- Comentó Sarah sin poder aguantarse la risa. Matt había salido del armario hacía un par de años y ahora, subía fotos a Facebook en la que le enseñaba al mundo lo feliz que era.

    – [b] [i] [color=#266EAC] Que sepáis que aquello me dolió, teniéndome a mí y os fuisteis a por otro.[/color] [/i] [/b] – Ed se llevó una mano al corazón sin poder evitar que se le escapase la risa. Esa risa que pocas veces mostraba, pero que era contagiosa y adorable.

    (más…)

  • UN VIAJE POCO COMUN

    [align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=3]Kaylee Echolls | Coche de Zack McLeod

    [color=#E16C13]Primeras horas de la tarde[/SIZE][/color][/font][/b]

    kaylee13
    [/align]

    [SIZE=2]
    Hacía tanto frío, que incluso dentro del coche, con la calefacción encendida, se podía ver cómo salía vaho de nuestras bocas cada vez que hablábamos, aunque a esas horas estábamos en silencio, escuchando sólo el murmullo de las respiraciones de las dos perras que iban con nosotros, las interferencias del móvil en manos libres y de fondo, ‘Bohemian Rhapsody’ de Queen.

    Todavía era media tarde y en aquella carretera de montaña de doble sentido, no se veía más allá de lo que iluminaban los faros del todoterreno de Zack McLeod, pero nos manteníamos despiertos por el bien de Ed y de Sarah, que debían llevarnos de una pieza hasta Escocia.

    (más…)

  • UN INSTINTO NATURAL

    [align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=3]Kaylee Echolls | Caernaforn, Gales

    [color=black]Noche[/SIZE][/color][/font][/b]

    kaylee13

    [SIZE=2]

    Me di cuenta de que nos habíamos quedado sin escudo protector cuando volvimos a tenerlo. Entre lo de McLeod y que no podía dejar de mirarme la mano izquierda, estaba como ida. La notaba extraña, como si todavía quedasen restos del hormigueo que había sentido antes de conjurar la bola de fuego.

    – [b] [color=#F56828]¿Has…has sido tú?[/SIZE] [/b]- Le pregunté a Ed, que iba cogido de mi otra mano, como si tuviéramos miedo de separarnos, pese a que ir de esa forma ralentizaba nuestro paso que ya de por sí no era especialmente rápido.

    – [b] [i] [color=#266EAC] En cierta forma sí. Parte de mi magia pasó a ti, pero el conjuro lo hiciste tú[/color] [/i] [/b].- Me explicó .- [b] [i] [color=#266EAC]Lo siento, sé que no te gustan este tipo de cosas.-[/color] [/i] [/b] Se disculpó bajando la vista.

    (más…)

  • VOLVER A ACOSTUMBRARME

    [align=center][SIZE=5][b]Kaylee Echolls | Multicines de Moondale [/b]

    [color=#81BEF7][b]Noche[/SIZE][/color][/b]

    kaylee13

    [SIZE=2]

    La búsqueda de trabajo había resultado infructuosa. Al parecer, con la excusa de la crisis mundial que estábamos viviendo, un máster en relaciones internacionales era poco más que un papel con el que las empresas podían limpiarse después de comer, por lo que tuve que agachar las orejas y volver a casa de mi madre. Pero para alguien que había pasado tantos años viviendo sola, en la otra punta del mundo, era un paso difícil. Mi habitación, que durante meses había sido ocupada por aquel adolescente repelente que se hacía llamar a sí mismo “Echolls”, volvía a ser mía, pero no la sentía como tal. Echaba de menos Barcelona, esa ciudad tan cosmopolita, repleta de elementos de la arquitectura del genio de Gaudí, en la que fueras de donde fueras, te sentías como en casa. Necesitaba asomarme a la ventana un día entre semana a las doce de la noche y escuchar a la gente, que todavía no se había ido a dormir, porque en España, lo normal, era acostarse a la una de la mañana, como muy pronto. Echaba de menos el idioma, al que casi me había habituado, el mar, el sol, la comida, la siesta y la fiesta, aunque yo no tenía tiempo para ninguna de las dos últimas cosas. Y aunque Moondale era mi hogar, tenía que volver a acostumbrarme a sus rutinas.

    (más…)

  • UNA ECHOLLS SIEMPRE CUMPLE SUS PROMESAS.

    [SIZE=2][align=center][b]Kaylee Echolls | Escocia[/b]

    kaylee13

    Kaylee Echolls se despertó más temprano de lo habitual y después de vestirse, se asomó a la ventana de la habitación de Rebecca para que el viento frío le diese en la cara. Era el último día de su visita, en pocas horas tendría que coger el avión que la llevase de vuelta al aeropuerto de El Prat, en Barcelona, en el que María y Jordi, compañeros de la FNAC, la estarían esperando para llevarla a casa.

    Una parte de ella, probablemente la que más pesaba en ese momento, quería quedarse allí, disfrutar de aquel ambiente familiar y dejar de lado el sueño de convertirse en una pieza más del engranaje de la ONU. Quizás cambiar el mundo era un sueño demasiado grande para una chica del condado de Ripper, en Estados Unidos. ¿El condado de quéeee? Le preguntaban cuando intentaba explicar en su mejor español la ubicación de su pueblo, Moondale. Por suerte, omitía el hecho de que era una bruja, igual que su madre, su hermana mayor, su abuela y así hasta la primera Echolls que debía ser Elphaba Thropp, como mínimo. Una bruja que además, tenía una hermana Cazadora, un cuñado Aesir y otro Vigilante. Una bruja que permanecía ajena al mundo sobrenatural y que jamás había pronunciado un hechizo, pero que en ese preciso instante deseaba quedarse allí.

    (más…)