[align=center][b][SIZE=3] Logan Villiers[/SIZE][/b]
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Los nubarrones negros comenzaron a despejarse, dejando ver tras ellos un sol al que ya no estaba acostumbrado y me cegaba, pero a la vez me sentía revigorizado, más fuerte. Esperé unos cuantos minutos bajo el sol para recargarme las pilas y después busqué un sitio donde estar cómodo.
A mi izquierda reconocí un centro comercial que conocía del tiempo que pasé en esta ciudad, cuando todavía había algo vivo en ella y me dirigí hacia él. Reventé los cristales de la entrada y luego pasé con la moto. No pensaba dejarla fuera con lo escasos que eran ahora los medios de transporte.
Mientras dejaba la moto me puse a pensar en ella, en cualquier momento podía haberla sorprendido una salida del sol y si era así ya no tenía nada que hacer en este pueblo, ni mucho que salvar en el mundo.