[font=Bookman Old Style] [SIZE=3]3 Julio de 2010[/SIZE][/font] [/align]
[align=center][b][SIZE=3][color=black] Christopher McLeod. Casa de las Echolls.[/SIZE][/color][/b]
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Habían pasado ya varios meses desde aquella noche en la que vimos lo que podía suceder, todo lo que podríamos perder, si no luchábamos contra Mason y ganábamos.
Gracias a la advertencia de Sarah nos habíamos puesto manos a la obra, pero teniendo siempre presente que el tiempo era oro y debíamos vencer a Mason antes de conseguir el poder, fuese cuando fuese el momento.
Así que la misma noche que hablamos con Sarah decidimos plantear una estrategia para entrenarnos y hacernos más fuertes. Desde ese día el entrenamiento de Sarah se expandió a los demás, con algunos añadidos, como luchar juntos y coordinados para atacar y resistir como una sola fuerza. Por desgracia en este punto siempre fallaba alguien que no conseguía encajar bien en la dinámica del grupo. Mientras los demás se coordinaban perfectamente y conseguían sus objetivos, Cecil planeaba sus propias estrategias y se desvinculaba del plan del líder estratégico del grupo, además de crear tensiones con el resto por su relación con Dominic. Sabía que tenía que abordar el tema, pero no estaba seguro de cómo hacerlo sin herir sus sentimientos, la socialización desde luego no era un camino de rosas, si fuese para algo menos importante le dejaría a su aire, pero aquí nos jugábamos nuestras vidas y las de todo el mundo, no podía haber fisuras. Pese a todo, el entrenamiento daba frutos en el grupo en general, actuaban unidos, estaban en forma, sabían cómo atacar y defenderse y habían avanzado aún más con la magia.