[align=center][b][SIZE=3]Daniel Arkkan. Centro de Moondale.[/SIZE][/b]
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Resultaba extraño volver a salir por la ciudad, ver las ruinas y reconocer en ellas los sitios por los que había caminado con Sarah, en los que habíamos compartidos recuerdos todos juntos. Ahora eran ruinas, igual que ahora nosotros estábamos desperdigados, los que aún seguíamos con vida.
Después de perder a Sarah perdí el mundo, solo conseguí sobrevivir hasta ahora para cuidar de Arya. Pero eso no es lo que ella hubiese querido, debí haber mantenido al grupo unido, conservar la esperanza, seguir luchando… Ya era tarde para arrepentirme y cambiar el pasado, pero no para cambiar las cosas, para devolver la esperanza, y eso lo haría SARAH. Significaría para el mundo una pequeña parte de lo que había significado para mí. Me había salvado de mí mismo, se había convertido en mi mejor amiga y me había hecho conseguir amigos de verdad, me había permitido rebelarme contra los sentimientos de mi pasado y contra el futuro que se nos parecía negar, me había dado más amor del que merecía e incluso ahora seguía dándomelo día a día, cuando la recordaba en cada momento o cuando miraba a nuestra hija, y me había devuelto el honor, había vuelto a vivir sintiéndome orgulloso de mí mismo. Eso y mucho más era Sarah, tanto una como la otra.
