Moondale

DESEANDO MENTIRAS

January Allard | Sala de Experimentacion | Subterraneo tres

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En cuanto había salido de aquella profunda inconsciencia, había notado que alguien me zarandeaba, pero abrir los ojos había sido un esfuerzo mayúsculo. Los sentía tan pesados como el resto del cuerpo: puro plomo. Ahora escudriñaba en la oscuridad, asustada y sorprendida. Parpadeé un par de veces, antes de reunir el la fuerza para incorporarme en la camilla. Rápidamente me llevé las manos a la cara, en parte esperando encontrarla cubierta de pelos. No, era yo. Era January, de nuevo. Suspiré aliviada y me giré, buscando a Sarah con la mirada entre la oscuridad que sólo unas poco efectivas luces rompían.

Al echar una mirada alrededor, me fijé: las celdas estaban abiertas. Alrededor todo era caótico y la oscuridad me inquietaba. Los investigadores estaban allí, con nosotros, y eso me hizo tomar más conciencia de la situación que todo lo demás: habíamos salido los que estábamos injustamente encerrados allí, pero ¿por qué no iba a haber gente que [i]debía[/i] estar allí? Me estremecí al tiempo que Sarah se separaba de Daniel y se giraba a tiempo para verme.

-[b][i]¡Por fin! [/b][/i]-exclamó, aliviada tal vez, y se acercó a mí-.[b][i] ¿Cómo estás? [/b][/i]

Boqueé un par de veces antes de contestar: -[b]Me duele todo. Pero ya no soy un enorme felpudo con patas. Supongo que es buena cosa[/b] -sonreí, tratando de quitarle hierro al asunto. Luego recordé que ella también había estado no mucho antes en una de aquellas camillas-.[b] ¿Tú cómo estás? ¿Te han hecho algo?[/b]

-[b][i]Me han convertido en Piper Halliwell -[/b][/i]suspiró-. [b][i]Lo mío a tu lado no es nada, espero que no te hayan hecho mucho daño…[/b][/i]
-[b][i]Creo que la transformación no tuvo nada que ver con ellos[/b][/i] –intervino Daniel, tan suave como pudo. Me mordí el labio, mirando alrededor. Mientras Sarah hablaba, me fije en que había otro chico allí con nosotros, al margen y en silencio.
-[b][i]Sé que no han sido ellos, pero me sigue pareciendo una crueldad… [/b][/i]-se mordisqueó el labio inferior, algo preocupada.
-[b][i]Lo es [/b][/i]–Daniel habló con seriedad, echando primero una mirada a los investigadores y luego de nuevo a mí-. [b][i]¿Era la primera vez?[/b][/i]

Tragué saliva. Supuse que aquella pregunta tenía que llegar. Debían de haber dudado. ¿Cómo podía no haber sabido nada de todo aquello hasta hace poco y que ahora me encontraran allí? Yo también hubiera asumido rápidamente una mentira como la copa de un pino. Sólo que no lo era y pensar en ello hizo que se me humedecieran los ojos.

-[b]Sí[/b] -respondí simplemente, intentando poner mi mejor cara de póker-. [b]Ni siquiera lo sabía hasta que Alexander… Algo me atacó hace unas noches mientras volvía a la residencia, pero hasta que vi a Alexander [/b]-señalé la camilla para que entendieran-. [b]Ni me lo planteé.[/b]

Incluso yo noté la amargura de mi voz y no dudaba que ellos también. Me hubiera dado un buen bofetón: aquel no era el más grande de mis problemas. No entonces, al menos. Cabeceé, apartando la idea de mi cabeza mientras me acordaba de Alexander y miraba alrededor, buscándole.

-[b][i]Es normal que estés algo desorientada, pero no te preocupes, todo irá bien, puede controlarse [/b][/i]-dijo Daniel en tono tranquilizador.

-[b]Eso espero[/b] -se lo agradecí con una sonrisa, asintiendo. Bajé de la camilla lentamente. Sentí que me temblaban las piernas, pero les miré con toda la poca decisión que me quedaba en el cuerpo e hice un gesto señalando alrededor-. [b]¿No deberíamos… intentar salir de aquí vivos o algo?[/b]

-[b][i]Sí, pero no sé por dónde empezar… [/b][/i]-hizo una pausa. La vi nerviosa, incluso más que antes, y quise hacer algo para tranquilizarla; deseché rápidamente la idea: yo no estaba nerviosa, estaba histérica-.[b][i] No sabemos lo que habrá en otras celdas…[/b][/i]

-[b][i]Pero hay alguien que sí sabe lo que hay [/i][/b]-Daniel miró hacia la doctora de la cicatriz, sola en una de las esquinas de la sala.

La observé unos segundos y tragué saliva. Una parte de mí deseaba que las correas se hubieran roto cuando yo aún era un enorme lobo que podía hacerle todo el daño que no podía hacerle ahora. La otra parte de mí no se hubiera opuesto a tal barbaridad, y eso me asustó.

[spoiler]Daniel y Sarah movidos por Dracon y Stefy, of course, y que Cecil permanezca al margen es cosa de Eitan también :][/spoiler]

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