[align=center][b][font=Bookman Old Style][SIZE=3]Daniel Arkkan | Biblioteca, Universidad de Moondale

[color=black]Noche[/SIZE][/color][/font][/b]

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Hacia ya un rato que Lilith se había ido, y desde entonces sólo había reinado el silencio. Llevaba un buen rato tratando de concentrarme para cerrarle la herida, pero por mucho que sanase, no podía solucionar el problema de la falta de sangre.

Desde que me había ido de casa de los McLeod y hasta que conocí a Sarah, el balance de mi poder había sido hacia el lado dañino, salvo algunas veces que lo necesitaba para mí mismo, pero desde entonces las cosas habían cambiado, lo utilizaba

para cazar pero en cuanto alguien caía herido dejaba el ataque de lado para curarlo, y era desde entonces cuando me había dado cuenta de que necesitaba saber más de medicina, estaba desaprovechando mi poder y no quería que eso le costase la vida a alguien, si supiese más de eso o de la parte sanadora de mi propio poder habría arreglado las cosas mucho antes, Ed ya estaría mejor aunque no estuviese curado del todo, Diana y Rebecca no estarían por ahí solas y yo estaría junto a Sarah y Dominic deteniendo a McLeod.

Suspiré y observé a Ed, durante el rato que llevábamos en silencio se le había quedado la cara blanca, el esfuerzo de moverse cuando llegó Lilith y la conjuración de aquellos «wisps» le estaba pasando factura.

Tenía que haber seguido conteniendo a Lilith, pero me asusté al sentir otra vez esa oscuridad creciendo, esa ira que parecía decidir por mí. Si no me hubiese controlado podía haber matado a Illya, y eso no me lo habría perdonado nunca. Era extraño sentir esa sensación de nuevo, pensé que el pasado había quedado atrás, que lo que hiciese de ahora en adelante expiaría esa vieja…oscuridad, pero si seguía ahí dentro, esperando…no sabía que pensar.

– [b] [i] [color=#4F5360] Ed…¡Ed![/SIZE] [/i] [/b] – llamé para que siguiese consciente. No sabía cuanto tiempo más podían tardar Diana y Rebecca, así que tenía que apañarme con lo que tenía a mano para mantenerle despierto. Apliqué mis poderes para curar la herida hasta que dejase de sangrar y me levanté rápidamente dirigiéndome hacia la zona en la que había estado McLeod antes de transformarse. Busqué detrás de la mesa en la que tenía aún la taza de café y encontré el termo que había estado utilizando, lo cogí, junto a la taza, y fui donde estaba Ed.

Destapé el termo y lo olí, matalobos, me prometí tener una conversación con Christopher sobre eso, pero en ese momento tenía que actuar, en otras circunstancias no se lo habría dado, pero no quedaba otro remedio, además, a nadie podía hacerle más daño que al propio McLeod. Por suerte para nosotros, pero no para él, McLeod debía haber necesitado un extra para relajarse, y por eso había diluido matalobos en una infusión y no un café. Olí de nuevo para asegurarme y ahí estaba, manzana, después del accidente Christopher tuvo que tomar algunas infusiones, y me había contdo que se dio cuenta de que mezclándolas con un parte de zumo de manzana podía tomárselas mejor. La manzana le vendría muy bien a Ed para los síntomas de la hemorragia mientras que el café podía haber resultado demasiado fuerte…yo mismo lo sabía.

Vertí un poco de contenido en la taza y vi como el café tenía tenues brillos morados. Le acerqué la taza a Ed y le hice beber poco a poco hasta que se terminó el contenido.

– [b] [i] [color=#4F5360] Ed, ¿estás bien?[/color] [/i] [/b] – pregunté esperando que al menos consiguiese reponerse un poco.

– [b] [i] [color=#266EAC] Si…-[/color] [/i] [/b] dijo con dificultad y un tono de voz mucho más grave de lo habitual.

– [b] [i] [color=#4F5360] No me extraña que te despertases, tiene que tener un sabor horrible.[/color] [/i] [/b] – bromeé tratando de desviar la atención, tanto del dolor como del gesto de alivio que debía tener en la cara al verlo despertar, mi mente ya había visto un par de veces el escenario en el que no se despertaba, y no me gustaba en absoluto.

– [b] [i] [color=#266EAC] Pobre… Chris…-[/color] [/i] [/b] contestó él. La verdad es que encima que a Mc no le gustaban nada las infusiones, algo que comprendía profundamente, esta tenía un sabor aún peor. Debía estar teniendo dificultades para controlar el lobo incluso con la licantropía, de lo contrario lo habría disuelto en café.

– [b] [i] [color=#4F5360] ¿Era igual…antes?[/color] [/i] [/b] – pregunté sin saber muy bien como referirme al otro Mc, que en realidad era éste mismo, o una parte de él al menos. Si volvíamos a ver a los Oráculos teníamos que pedirles unos gráficos.

Ed asintió sin mover demasiado la cabeza.

– [b] [i] [color=#4F5360] Espero que todo se arregle.[/color] [/i] [/b] – dije quedándome pensativo. Estaba preocupado por como estarían los demás. No llevaba demasiado bien no acompañar a Sarah en esto, aunque sabía que era más fuerte que nosotros, y que todavía era mayor la brecha de rapidez, velocidad y resistencia, pero aún así tenía miedo de que le ocurriese algo. También me preocupaban mucho Diana y McLeod, ella se había enterado de la peor forma posible y él iba a pasarlo muy mal cuando volviese en sí. Además también le preocupaban Lilith e Illya, una por el peligro que implicaba para los demás y la otra porque podían perderla definitivamente. La situación se había complicado mucho, y en la visión global era más preocupante por la facilidad con la que había provocado todo el Doctor. – [b] [i] [color=#4F5360] A ver si te traen algo para quitar el mal sabor de boca.[/color] [/i] [/b] – el no le haria ascos a una coca cola light xD

-[b] [i] [color=#266EAC]Por que no traería… café…-[/color] [/i] [/b] bromeó Ed. Por suerte había traído infusión si no, el café le habría ayudado con la bajada de tensión pero no con otros síntomas de la hemorragia. Al menos la herida estaba cerrada, aunque quedaría marca, los colmillos de un vampiro no dejaban al tejido regenerarse correctamente, si en algún momento teníamos tiempo, tenía que investigar por qué, quizá Illya pudiese ser de gran ayuda, si seguía viva o si se atrevía a estar con nosotros en la misma sala de nuevo.

En ese momento se abrieron las puertas de la biblioteca y me giré alerta hacia ellas. Fue un gran alivio comprobar que Diana y Rebecca estaban sanas y salvas, aunque la cara de Rebecca parecía decir que no todo había ido bien.

– [b] [i] [color=#843181] El retorno de las enfermeras buenorras. Buen título para una película porno[/color] [/i] [/b].- dijo Diana a modo de saludo. Dijo señalando la bolsa en la que llevaba lo que debían ser bebidas.A modo de saludo. No sabía muy bien como lidiar con Diana estando así, si era mejor que hablase de lo que le preocupaba o si era mejor que siguiese así. Diana devoraba los problemas haciendo ver que no tenían importancia, pero si la conocías desde el tiempo suficiente, empezabas a ver cosas que no encajaban, sus ojos, la forma de sonreír…la delataban.

– [b] [i] [color=#266EAC]¿Todo bien?…-[/color] [/i] [/b] preguntó Ed, que también la conocía hace mucho tiempo, mucho más que yo de hecho, y que debía saber que las cosas no iban bien.

– [b] [i] [color=#843181] Illya casi se come a Rebecca, pero sí. ¿Qué tal vosotros? Especialmente tú.[/color] [/i] [/b]- respondió mientras dejaba las bolsas encima de una mesa. Rebecca mientras tanto permanecía más atrás, pero miraba a Diana de una forma extraña.

-[b] [i] [color=#266EAC] Mejor…-[/color] [/i] [/b] respondió moviendo la Coca-Cola a modo de saludo. -[b] [i] [color=#266EAC] Gracias.[/color] [/i] [/b] – añadió dando un trago. Viendo como a ese trago le siguieron dos más rápidos se notaba que su cuerpo necesitaba esa dosis de azúcar.

Volví la vista hacia Diana y vi que estaba mirando fijamente la taza de Christopher, pero cuando me vio apartó la vista y forzó una sonrisa.

– [b] [i] [color=#4F5360] Le di un poco mientras veníais. Lleva manzana.[/color] [/i] [/b] – dije intentando acercarme a sus pensamientos, pero sabiendo que me toparía con un escudo.

– [b] [i] [color=#843181] ¿Manzana?[/color] [/i] [/b] – preguntó extrañada.

– [b] [i] [color=#4F5360] Sí, hoy no estaba tomando café, era una infusión con…bueno, con algunas cosas y manzana para poder tomársela.[/color] [/i] [/b] – expliqué sin saber muy bien qué decir de lo que sabía, más por descubrimientos recientes que por otra cosa, de la «maldición» de McLeod.

Diana cambió de conversación rápidamente.- [b] [i] [color=#843181] Está buena la Coca Cola ¿eh? Lo bueno si hurtado, dos veces bueno.[/color] [/i] [/b] – bromeó con Ed. Sentí una punzada de culpabilidad por no haberle contado lo que sabía, que en realidad no era tanto. Viví de cerca cuando le hirieron y heredó la maldición, y el tiempo que tardó en recuperarse, después cuando empezó a recuperarse empecé a alejarme de nuevo de la familia para volver a mi venganza personal y las llamadas empezaron a distanciarse. Después de unos cuantos meses fue él quien me llamó para hablarme de la Elegida, de Sarah, guiándome a mi destino sin saberlo. Esa vez le noté, mejor, más tranquilo, más como era antes de estar herido, me iamginé que habría resuelto su problema, era Chris, si alguien podía saber como librarse, era él. No fue hasta unos meses antes de enfrentarnos a Mason cuando tuvo un descuido y vi un tono morado en su café, entonces empecé a imaginarme que era lo que ocurría. Un poco más tarde McLeod se lo confirmó a Sarah no sin antes hacerle prometer que le dejase a él contárselo a Diana. A partir de ahí las semanas empezaron a volar entre unas cosas y otras, hasta hace poco. Sarah y yo hablamos bastante tiempo sobre qué hacer.

– [b] [i] [color=#266EAC] Es Pepsi…-[/color] [/i] [/b] bromeó Ed.

– [b] [i] [color=#843181] Y gratis, así que a tomártela o le digo a Kaylee que te muerda en el otro lado.[/color] [/i] [/b] – volvió a bromear Diana. En ese momento me quedó claro que Ed estaba empezando a recuperarse de la hemorragia porque se puso colorado.- [b] [i] [color=#843181] Luego se lo digo.[/color] [/i] [/b] – añadió viendo que había conseguido ponerle rojo.

-[b] [i] [color=#266EAC] Ahora parezco mas duro.-[/color] [/i] [/b] dijo Ed refiriéndose a la cicatriz.

– [b] [i] [color=#4F5360] Seguro que te llaman para la siguiente de ‘Los Mercenarios'[/color] [/i] [/b] – bromeé.

– [b] [i] [color=#266EAC] No tengo 60 años…-[/color] [/i] [/b] respondió Ed.

– [b] [i] [color=#843181] A las tías les ponen las cicatrices…o eso me han dicho[/color] [/i] [/b].- añadió haciendo una mueca. Hubo unos minutos de silencio que rompí tratando de averiguar algo más de lo que podía haber pasado.

– [b] [i] [color=#4F5360] Hablando de todo, nosotros también nos topamos con Lilith. No sé dónde estará ahora[/color] [/i] [/b].- dije tratando de sonsacar algo de información.

– [b] [i] [color=#843181] Muerta, seguramente[/color] [/i] [/b].- dijo Diana sin darle importancia. Tardé unos segundos en asimilar lo que había dicho y el resto parecieron quedarse alucinados también. Eso no era propio de Diana, le tenía aprecio a Illya. Si esto era culpa de lo que había pasado con Christopher tenía que hablar con ella, no podía culpar a Illya por eso, ni por lo que el Doctor le hubiese hecho hacer.

-[b] [i] [color=#266EAC] ¿Llego a la cafeteria?-[/color] [/i] [/b] preguntó Ed con gesto extrañado, él tampoco debía haberse esperado escuchar a Diana hablar así.

– [b] [color=#CC858A] Sí[/color] [/b].- respondió Rebecca justo antes de dirigir una mirada vigilante a Diana. Algo había pasado y ahora las cosas empezaban a encajar.

-[b] [i] [color=#266EAC] Diana… no es culpa suya…-[/color] [/i] [/b] intervino Ed intentando hacerla entrar en razón.

– [b] [i] [color=#843181] Entonces si a mí un día se me va la olla y os frío a todos, sé que me perdonaréis[/color] [/i] [/b].- respondió más seria. No fue solo lo que dijo, nada propio de ella ni en esta realidad ni en ninguna otra, si no lo que vi en sus ojos, lo que me convenció de lo que estaba pasando. Yo mismo lo había notado antes, en Chris e Illya se había manifestado al momento pero a nosotros también nos estaba afectando lo que había hecho el Doctor.

No sabía muy bien qué hacer, pero tenía claro que debíamos detener esto cuanto antes, porque si no dejasemos llevar solo por la oscuridad de nuestros corazones, las cosas podrían acabar muy. Tenía que empezar por hablar con Diana, solo que no sabía cómo. Ojalá Sarah estuviese allí, ojalá llegase pronto.

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En la siguiente media hora permanecimos prácticamente en silencio, viendo como Ed se recuperaba poco a poco y pensando en todo lo que estaba pasando. La oscuridad de nuestro interior que había liberado el Doctor se nos podía ir de las manos con facilidad y terminar, como mínimo, cada uno por su lado. Parecía que el Doctor era un maestro del caos, pero lo que había hecho tenía un claro propósito, separarnos. Ya había conseguido que la situación entre McLeod y Diana se pusiese difícil, y quizá de Diana con los demás por no contárselo antes, también había conseguido abrir una fisura que dejaba a Illya al otro lado, porque cuando volviese a la normalidad, que todavía no sabía cómo, costaría que volviese a acercarse a nosotros.

Detestaba profundamente que todo esto se me pudiese ir de las manos, tenía que manejar muchas variables a la vez para mantener al grupo unido, con Sarah aquí habría sido más fácil porque parecía hacerlo de forma innata, dotes de Elegida quizá, pero ahora mismo estaban ocurriendo demasiadas cosas a la vez.

Mientras estaba apoyado en una mesa, pensando, vi cómo Ed y Diana hablaban de algo, sin saber muy bien de qué porque estaba concentrado en mis pensamientos. Esperé a que terminasen de hablar y decidí empezar a hacer algo para prevenir el desastre, me acerqué a Diana le hablé en voz baja.

– [b] [i] [color=#4F5360]¿Podemos hablar un momento?[/SIZE] [/i] [/b] – pregunté. No quería preocupar a los demás si las respuestas de Diana estaban influidas por su parte oscura, yo no se lo tendría en cuenta cuando se recuperase, pero no quería arriesgarme a que alguien sí, aunque sabía que Ed no lo haría, pero Rebecca la conocía menos.

– [b] [i] [color=#843181]Claro, de momento no muerdo[/color] [/i] [/b].- me respondió con una sonrisa. Me fui hacia dónde estaba la mesa de recepción y ella me siguió.

Tardé un poco en pensar como decirle lo que me preocupaba respecto a ella, hasta que al final decidí empezar poco a poco. – [b] [i] [color=#4F5360]¿Estás bien?[/color] [/i] [/b]

Asintió automaticamente.- [b] [i] [color=#843181]¿Tú qué tal?[/color] [/i] [/b] – preguntó esquivando mi pregunta. Sarah hacia lo mismo a veces sin darse cuenta, pero normalmente se lo hacía notar cuando era algo importante y se reía, pero Diana lo hacía para mantener sus defensas, no sabía como atravesarlas sin acabar ensartado en un foso.

– [b] [i] [color=#4F5360]Ahora bien, pero antes con Lilith he notado algo extraño, creo que lo que hizo el Doctor nos ha afectado a todos aunque no nos hayamos dado cuenta.[/color] [/i] [/b] – dije intentando sonsacarle algo mientras le miraba de soslayo a los ojos para ver si podía notar algo extraño.

– [b] [i] [color=#843181]¿Es que has notado algo raro?[/color] [/i] [/b]- preguntó sin darse por aludida. Cada vez me resultaba más difícil dar con las palabras adecuadas, pero tenía que conseguirlo, me preocupaba por Diana, primero porque Sarah la quería muchísimo y no podría pasar sin ella, y segundo porque yo también le tenía mucho aprecio, era como una hermana para mí desde hace mucho.

– [b] [i] [color=#4F5360]Sí. ¿Tú no has sentido nada…raro? Una especie de ira cegadora…[/color] [/i] [/b] – pregunté de nuevo sin quitarle ojo. Al menos no veía venas negras recorriendo su rostro y sus ojos no se habían vuelto negros completamente, como habían descrito los demás lo que ocurrió cuando el Demonio del Miedo nos atrapó en nuestras peores pesadillas.

– [b] [i] [color=#843181]Mis niveles de mala leche están más o menos como siempre…si es que eso es algo bueno[/color] [/i] [/b].- soltó con una carcajada. Seguí sin conseguirlo, así que me tocaba el acercamiento directo.

– [b] [i] [color=#4F5360]Diana…lo de antes con el tema de Illya no es normal en ti.[/color] [/i] [/b] – le dije con sinceridad. – [b] [i] [color=#4F5360]Es difícil darse cuenta de que hay algo dentro de ti que tome el control, pero se puede suprimir. Yo lo hice.[/color] [/i] [/b] – añadí después para suavizar lo anterior. Me resultaba fácil empatizar con lo que sentía, yo mismo me dejé llevar mucho tiempo.

– [b] [i] [color=#843181]No estoy segura, pero creo que en un día como hoy, se me permite desvariar[/color] [/i] [/b].- puntializó con seriedad. Al menos intentaba controlarse y no se había enfadado, eso significaba que aún tenía el control, al menos de momento.

– [b] [i] [color=#4F5360]Ya lo sé, pero intenta no dejar de ser tú.[/color] [/i] [/b] – repetí mirándola con preocupación. – [b] [i] [color=#4F5360]Con lo que ha liberado no se sabe lo que puede pasar, y te arrepentirías, créeme.[/color] [/i] [/b] – le aseguré.

Ella me respondió con un golpecito en el brazo a modo de agradecimiento, que cuando Sarah lo hacía a veces terminaba en moratón.- [b] [i] [color=#843181]Con lo guapa que estaría con un mono naranja paseando por la milla verde…¡Aguafiestas![/color] [/i] [/b]- respondió sonriendo.

– [b] [i] [color=#4F5360]Sabes que Sarah no lo superaría si se quedase sin ti otra vez.[/color] [/i] [/b] – añadí para darle algo a lo que agarrarse si volvían los pensamientos oscuros. Los primeros tiempos en los que conocí a Sarah no tenía buena consideración hacia su hermana, incluso yo mismo me encontré alguna vez a esa Diana, aunque ahora ya su presencia había casi desaparecido con el arreglo que habían hecho los Poderes, al fin y al cabo era una especie de autómata, no era Diana en absoluto. Por eso cuando Diana apareció y más tarde Sarah se dio cuenta de que todo lo que decía era verdad y que así era en realidad, la resignación que había acumulado respecto a su hermana se vino abajo y empezó a disfrutar el tiempo que pasaba con ella. Poco después se llevaban ya de maravilla, eran prácticamente inseparables, pero ya desde hace unos meses, cuando Sarah pudo recordar su infancia juntas, y también con Ed, su relación se afianzó más todavía, si la perdiese ahora, sería el golpe más duro que le podrían dar, y yo no lo permitiría por nada del mundo.

Diana me dio un abrazo como agradecimiento sin decir nada. Al principio no supe qué hacer, pero luego me di cuenta de lo mal que lo estaba pasando, vi un pequeño hueco a través de la muralla y noté que había mucho dolor, así que le devolví el abrazo.

– [b] [i] [color=#4F5360]Siento no haber podido hablarte de lo de Christopher…no quiero que suene como una excusa porque no la tiene, pero no lo sabíamos hasta hace poco, y estos meses…ha sido una cosa tras otra.[/color] [/i] [/b] – dije arrepentido, tuvimos tantas cosas de las que ocuparnos que descuidamos lo más importante. – [b] [i] [color=#4F5360]Siempre que necesites algo, sabes que estaremos ahí.[/color] [/i] [/b] – le aseguré, tanto en mi nombre, como en el de Sarah, como en el de todo el grupo. Por mucho que noss hicieran confiaba en todos ellos, en que podrían perdonar y ser perdonados, para eso éramos familia.

– [b] [i] [color=#843181]Prefiero no hablar de él…[/color] [/i] [/b]- dijo casi en un murmullo.- [b] [i] [color=#843181]Cuando esté preparada para hacerlo, haré chistes y lo sabréis[/color] [/i] [/b].- aclaró sonriendo con amargura.

– [b] [i] [color=#4F5360]Si vuelves a sentir esa…oscuridad, avísame. Tengo algo de experiencia para poder aconsejarte.[/color] [/i] [/b] – le ofrecí no sin cierta amargura sobre mi pasado. Había hecho las paces con lo que había pasado con mis padres gracias a Sarah, aunque ahora el pasado parecía estar volviendo con la revelación de mi hermana, y mi época más oscura se terminó la primera vez que la vi, pero aún necesitaba tiempo para hacer las paces con esa época. – [b] [i] [color=#4F5360]Recuerda que es Lilith, no Illya.[/color] [/i] [/b] – eso era lo que yo hacía, porque en realidad eso era lo que pasaba, Illya era una persona completamente distinta de Lilith, lo único que compartían es el cuerpo.

– [b] [i] [color=#843181]Sí, mamá…[/color] [/i] [/b]- respondió sonriendo. Sabía que aún no estaba del todo bien por todo lo que había pasado, y era normal, pero también sabía que podía confiar en ella para controlar su lado oscuro, Diana había vuelto. Ahora tocaba devolver a Chris e Illya a la normalidad.

– [b] [i] [color=#4F5360]Y ya volviendo al tema, no sé como vamos a devolver a Illya a la normalidad.[/color] [/i] [/b] – pensé en voz alta. – [b] [i] [color=#4F5360]Lo de Mc supongo que se agotará como hace el efecto de la Luna, pero lo otro…[/color] [/i] [/b] – teoricé. Confiaba en que el efecto en McLeod fuese pasajero, porque de no ser así no sabía qué hacer.

– [b] [i] [color=#843181]Es posible que haya algún hechizo para devolverle el alma a alguien que la ha perdido, me suena de haberlo visto en algún libro de McLeod, pero se necesitan conocimientos avanzados de magia y algún que otro objeto raro[/color] [/i] [/b].- respondió mordisqueándose el labio. En ese momento me pareció ver a Sarah frente a mí, porque ella también solía hacerlo. Cada vez que lo pensaba me daba cuenta de que, viendo a Sarah y la falsa Diana, debía notarse que algo no encajaba, pero al verlas ahora, eran como dos engranajes de un reloj suizo.

– [b] [i] [color=#4F5360]El tema es que Illya era un caso raro, se controlaba pero no tenía alma en el sentido estricto, al menos que sepamos.[/color] [/i] [/b] – se me hacía raro hablar de ese tema en voz alta, excepto con Sarah, porque era una especie de tema tabú, porque podría hacer a Illya sentirse mal, pero la verdad es que debería estar orgullosa, no es algo muy común el poder controlar tu condición. – [b] [i] [color=#4F5360]Pero devolviéndosela podríamos ayudarla más…podría controlarse con más facilidad todavía…las Echolls sois unas genios.[/color] [/i] [/b] – reflexioné. Devolverle el alma a Illya podía ser la solución definitiva para nuestro problema.

– [b] [i] [color=#843181]Y además estamos buenísimas, que no se te olvide. La más fea, si acaso es Kaylee, por aquello de que no existe y tal…[/color] [/i] [/b].- se rió y después hizo una pausa. Recordé lo mal que se llevaba con Kaylee al principio, pero después de un tiempo de esa «enemistad» ya solo quedaban las bromas, Diana había hecho las paces con ella, y ahora que el pasado en común de los cuatro (Sarah, Diana, Kaylee y Ed) se había instaurado en sus memorias todo iba de maravilla entre ellos. – [b] [i] [color=#843181]¿Estaríamos infringiendo alguna «ley»?[/color] [/i] [/b] – preguntó. Durante un momento le di vueltas porque no estaba seguro de a qué se refería, pero luego lo comprendí.

– [b] [i] [color=#4F5360]No creo, tenemos un buen fin y no podría ir a peor. Pero seguimos necesitando a McLeod para buscar el conjuro…y retener a Ills.[/color] [/i] [/b] – le aseguré.

– [b] [i] [color=#843181]Cuando pase todo esto, buscaremos la forma[/color] [/i] [/b].- dijo sin mucha convicción. La parte negativa, que no es lo mismo que la oscura, de Diana se había manifestado, no parecía estar segura de que pudiésemos recuperarlos. Yo también tenía dudas, pero sobretodo porque el miedo a perderlos hacía que fallar nos preocupase más que nunca.

– [b] [i] [color=#4F5360]Deberías decirle a Rebecca que no se te va a ir la pinza, ni a ninguno si podemos evitarlo.[/color] [/i] [/b] – dije cambiando de tema, al fin y al cabo no podíamos hacer nada más hasta que Sarah y Dom volviesen, aunque si tardaban mucho saldría en su busca.

– [b] [i] [color=#843181]Ahora se lo digo, pero voy a dejar pasar unos minutos. Eso de que te miren con miedo es divertido[/color] [/i] [/b].- respondió riendo, no pude evitarlo y yo también me reí.

Ed y Rebecca nos miraron algo extrañados, pero al ver que seguíamos sonriendo se dieron cuenta de que las cosas iban ligeramente a mejor.

[i]¿Cómo estarían Sarah y Dom?[/i]