Sarah | La Iniciativa
NOCHE
Cuando recuperé la consciencia y el pleno control de mis actos, me vi maniatada a la silla de las improntas de la ‘Dollhouse’ de la Iniciativa. Beatrix todavía seguía conmigo, pero estaba tan asustada como yo y había decidido que si alguien tenía que sufrir, que fuera yo. No esperaba menos de alguien que decidía compartir su vida con alguien como Z.
Frente a mí, había un laboratorio no muy grande, con las paredes recubiertas de paneles de madera oscura y maquinaria grande y pesada, que no paraba de hacer ruidos a la par que emitía datos que desconocía en modo de papeles. El general Preston, el padre de Rebecca, estaba de espaldas, pero en cuanto oyó que me movía, se giró para mirarme. Vestía ropa militar, incluidas unas enormes botas con la puntera manchada de sangre reseca.
– [Sarah]Preston…[/Sarah]- farfullé todavía atontada por la cantidad de fármacos que debían haberme administrado por la vía que había en mi mano derecha, a la altura de la muñeca y que conectaba con un gotero cuyo «líquido» ya estaba en mi interior. Además, estaba atada de pies y manos con unas bridas, que me cortaban la circulación y me impedían moverme.
– [Preston]Sarah Echolls. Al final has terminado en el mismo sitio que ibas a estar.[/Preston] – se jactó caminando alrededor de la silla, con las manos a la espalda mientras me observaba como si fuera un animal enjaulado. Las luces de emergencia estaban encendidas y se escuchaban sirenas. Mis amigos estaban allí para ayudarme y se arriesgaban a acabar como yo.
– [Sarah]¿Qué…me has…hecho?[/Sarah]- pregunté con dificultad. Tenía la cabeza embotada y me dolía todo el cuerpo, especialmente el labio, que parecía estar hinchado y la ceja, que me palpitaba con violencia. No se había conformado con experimentar conmigo, sino que también me habían dado una paliza.
– [Preston]Estás sedada para evitar situaciones desafortunadas.[/Preston] – aseguró cambiando la bolsa de líquido para sustituirla por otra. Supuse que se debía a que era la única forma de mantener mis poderes como Cazadora a raya. – [Preston]Y hay reservada otra sorpresa.[/Preston] – esbozó una sonrisa sádica y acercó su cara a la mía.
– [Sarah]¿Dónde están…mis amigos?[/Sarah]- bramé echándome hacia atrás. Preston era repulsivo.
– [Preston]Esas alarmas son por ellos. No tengas miedo, pronto se encontrarán con mis Adams Zero y no tendrán que seguir viviendo como monstruos.[/Preston] – explicó revisando que la vía siguiese funcionando con normalidad.
Me fijé en que me habían cambiado de ropa. Ahora iba vestida como una doll más, con unos pantalones holgados de yoga y una camiseta de tirantes, que dejaba ver en mis brazos marcas de agujas. Un escalofrío recorrió mi cuerpo: ¿Quién me había cambiado de ropa? Y lo que era más importante: ¿Con qué propósito?- [Sarah]No…tienes ni idea…si supieras…cómo vas a acabar…[/Sarah]- solté una carcajada seca imaginando que era derrotado por los monstruos que él mismo había creado.
– [Preston]No tengo miedo a las amenazas de una chiquilla.[/Preston] – pasó su mano por el brazo en el que tenía la vía y apretó. Las lágrimas se agolparon en mis ojos, pero decidí que no iba a gritar. – [Preston]En el fondo deberías estar agradecida, traerás paz, serás el monstruo que acabe con todos los monstruos.[/Preston] – explicó poniéndose en cuclillas, como si fuera una niña pequeña.- [Sarah]Estás…muy equivocado[/Sarah].- le dije con dificultad y la puerta se abrió despacio. Mi corazón empezó a latir a toda velocidad, por una parte tenía la esperanza de que fuera alguno de mis amigos, pero por otra, temía que fuera algo peor.
Lo que no esperaba ver era un destello rojizo, que hizo que el mundo, mi mundo, se detuviese.
– [Preston]No estoy tan seguro de eso. La gente os teme y se inquieta, el Gobierno no quiere que nadie se inquiete así que me da poder para encargarme de la amenaza.[/Preston] – continuó hablando, sin moverse de esa posición tan ridícula que había adquirido. – [Preston]Esa pequeña utopía vuestra nunca verá la luz.[/Preston] – Preston hablaba, pero no le estaba escuchando, aunque me mantenía estática para que no sospechaba.
Entre el ruido de las máquinas y lo mucho que le gustaba su propia voz, era incapaz de percatarse de que había alguien más.
Vi a Daniel moverse con agilidad por aquella sala. Parecía estar recuperándose de unas heridas recientes y tenía el pelo más largo que la última vez que nos vimos, pero era él y había venido a ayudarme a escapar.
Desenvainó una espalda que no conocía y fue a atacar a Preston por la espalda, pero le detuve.- [Sarah]Daniel, no[/Sarah].- le pedí- [Sarah]No eres…un asesino[/Sarah].- le recordé.
Sus ojos azules se cruzaron con los míos y Preston se dio la vuelta. Lo demás, pasó a una velocidad más lenta de lo normal, porque el General sacó una pistola del cinturón y disparó a Daniel en el hombro sin que pudiéramos hacer nada.
Dejé escapar un grito de horror. Si a Daniel le pasaba algo por mi culpa, no podría perdonármelo jamás. La vida dejaría de tener sentido.- [Preston]Gracias, Señorita Echolls.[/Preston] – me dijo esbozando una sonrisa de sádico. Tras eso, guardó la pistola en el cinturón nuevamente. – [Preston]No es un tiro mortal para alguien con tu poder, ¿verdad? Deberías curarte.[/Preston] – se acercó a Daniel, que intentaba en vano emitir luz curativa con sus manos.
– [Daniel]¿Qué…has hecho?[/Daniel] – le miró con la frente perlada de sudor y la herida sangrando a borbotones, manchando aquella camiseta de cuadros escoceses que le hacía parecer un leñador.
– [Preston]Dale las gracias a tu enamorada.[/Preston] – Preston empezó a reírse de su propio chiste.
Me revolví intentando escaparme, pero estaba demasiado debilitada.- [Preston]Tu «poder oculto» nos vendrá muy bien cuando te convirtamos en un activo, dentro de unos segundos.[/Preston] – aseguró. – [Preston]Mientras tanto, puedes ver cómo se desangra.[/Preston] – se acercó a mí para conectar la silla. En la mano, llevaba una especie de mando, que debía servir para calibrarla.
– [Sarah]Tú…eres el verdadero monstruo[/Sarah].- escupí las palabras con ira.
– [Preston]No dirás lo mismo dentro de unos minutos. Quizá pida unos ajustes para que me tengas un poco más de…»devoción».[/Preston] – sus ojos recorrieron mi cuerpo y grité con fuerza sin dejar de moverme con violencia. Tenía que liberarme y hacerle sufrir.
Fue a colocar el mando en la silla, pero Daniel se puso en pie con rapidez y le cortó la mano, a lo que él respondió gritando con horror. Después, le asestó un golpe en la nuca con el mango de la katana y Preston cayó al suelo como un muñeco de trapo. – [Sarah]Gracias[/Sarah].- Daniel cortó las bridas con rapidez y se llevó la mano a la herida, que cada vez tenía peor pinta.
Me quité la vía mordiéndome el labio y me puse en pie despacio. Me notaba un poco mareada, pero decidí no hacerle caso a esa sensación. No teníamos mucho tiempo hasta que Preston recuperara la consciencia, aunque esa mano que acababa de perder, le mantendría fuera de juego durante un tiempo.- [Sarah]¿Estás…bien?[/Sarah]- pregunté pasándole una mano por la frente y observando su cara, cada vez más pálida.
(I never thought that you would be the one to hold my heart.
But you came around and you knocked me off the ground from the start)
– [Daniel]Mejor de lo que he estado…en mucho tiempo.[/Daniel] – respondió con dificultad, sin dejar de taponar la herida.
Aparté la mano con rapidez, al darme cuenta de que en ese preciso momento, no éramos más que dos conocidos.- [Sarah]Creo que es culpa mía. Xander, en el futuro, tenía algo parecido[/Sarah].- Al mencionar a nuestro hijo, un nudo se formó en mi pecho. Para no pensar en ello, busqué por la habitación algo que me sirviera para ayudarle a mantener la sangre a raya, pero no había nada.- [Sarah]Debería irme para que pudieras curarte[/Sarah].- tomé aire para decirlo. Hacía tanto que no le veía y lo único que me apetecía era besarle. Besarle y…bueno, otras cosas que no eran muy apropiadas para una misión de rescate en la Iniciativa.
( hope that you see right through my walls
I hope that you catch me ‘cause I’m already falling
I’ll never let our love get so close
You put your arms around me and I’m home…)
– [Daniel]No, es peligroso…estás drogada. Puedo aguantar…un poco más, contigo. Vienen de camino…[/Daniel] – me recordó mirando al techo, en el que seguían parpadeando las luces de emergencia.
No podía dejar de mirarle, porque le había echado tanto de menos que sentía que me había faltado una parte de mí misma durante todo ese tiempo.- [Sarah]Tienes el pelo más largo[/Sarah].- solté sin pensarlo mucho. Una sonrisa tontorrona apareció en mi cara cuando deberíamos estar huyendo.
– [Daniel]Y tú…estás preciosa.[/Daniel] – sus dedos rozaron mi mejilla y una corriente de electricidad surcó todo mi cuerpo. – [Daniel]Yo…lo siento.[/Daniel]- empezó diciendo con un gesto de dolor en su rostro.
(You put your arms around me and I’m home…)
– [Sarah]No es el momento[/Sarah].- le recordé dándole con el pie a Preston, que se desangraba inconsciente mientras nosotros pelábamos la pava.
Daniel me miró a los ojos. Cada vez estaba más pálido.- [Daniel]Se parecían a ti…Xander…y Ellie.[/Daniel] – me dijo con dificultad.- [Daniel]La tensión…[/Daniel]- farfulló y le ayudé a sentarse. Estaba perdiendo el conocimiento y yo cada vez estaba más nerviosa.
– [Sarah]Ed, ¿dónde coño estás?[/Sarah]- le grité a la nada.- [Sarah]Daos prisa…[/Sarah]- sin mis poderes de Cazadora no podía cargar con él.
– [Daniel]Ten…cuidado. Prométemelo.[/Daniel] – me pidió antes de en la inconsciencia.
Intenté que se despertara, pero no lo hizo, porque había perdido mucha sangre, así que le taponé la herida intentando controlar los nervios. Al poco, la puerta volvió a abrirse, pero esta vez era una comitiva encabezada por Ed.- [Ed]No hace falta que maldigas. Ya estamos aquí.[/Ed] – me tendió la mano para ayudarme a levantarme.
– [Sarah]Gracias[/Sarah].- le dije de corazón dándole un abrazo.- [Sarah]No tengo las habilidades de la Cazadora y…Preston ha hecho algo conmigo, mientras esté cerca de vosotros, no tendremos poderes hasta que aprenda a controlarlo[/Sarah].- me lamenté hablando a toda prisa.
Diana, que estaba levitando para no cansarse corriendo, bajó al suelo y, empujando a los demás, se hizo paso para darme un abrazo.- [Diana]No te preocupes, por fin Dom podrá cumplir su sueño de llevar en brazos a Daniel[/Diana].
– [Dom]Toda la vida esperando…[/Dom] – espetó en tono jocoso frotándose las manos y me puso una mano en el hombro.- [Dom]Dichosos los ojos[/Dom].- e intentó levantar a Daniel con la tekinesis, pero como no pudo, lo tomó en brazos.
– [Diana]And aii güill always lof…yuuu….[/Diana]- Diana empezó a tararear la canción de ‘El guardaespaldas’.
– [MacLeod]Luego tendremos tiempo a ponernos al día. Ahora mismo tenemos unos cuantos problemas más urgentes.[/MacLeod] – nos recordó Christopher y, al verle hablar, no tuve más remedio que acercarme a él y darle un abrazo, que él correspondió pasándome una mano por el pelo con cariño.
Antes de ponernos en camino, observé al grupo que había venido a rescatarme, que era tan amplio que a algunas personas no las conocía, pero aún así, quise darles las gracias, porque nunca se sabía lo que podía pasar.- [Sarah]Gracias…por haber venido a ayudarnos a salir de aquí[/Sarah].- al ver que Logan estaba entre la multitud, le guiñé un ojo, porque sabía que él no era muy amigo de los actos heroicos. También estaba Sasha y eso me sorprendió gratamente.
Una vez finalizaron los formalismos, empezamos la huida, gracias a Bill, que aunque no tenía su memoria sobrehumana activa, recordaba a la perfección el camino que habían hecho para llegar hasta mí.
No fue fácil, porque no teníamos nuestros poderes, pero aún así, conseguimos escapar por los pelos.
Ahora sólo quedaba volver a casa y curar las heridas físicas y emocionales.
Pero por fin estábamos juntos y así, todo era más fácil.
But if you close your eyes
Does it almost feel like nothing changed at all?
And if you close your eyes
Does it almost feel like you’ve been here before?
How am I going to be an optimist about this?
How am I going to be an optimist about this?
If you close your eyes
Does it almost feel like nothing changed at all?
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.