[align=center][SIZE=3][color=black][b]Liad | Moondale.[/b][/SIZE][/color]
[SIZE=2]Me sentía como si estuviera en una de esas películas de terror que solía ponerme a altas horas de la madrugada. En cada esquina pensaba que veía algo, en cada sombra, cada movimiento ocasionado por el aire, sentía como si alguien no muy lejos de mí estuviera persiguiéndome, observándome. Continuaba oculto, encogido, agarrando las armas por si llegaba a ser necesario utilizarlas. Levanté el cuello de la cazadora en un vano intento de que el frío y el malestar que parecía volver con fuerza a mi cuerpo desapareciese.
Golpeaba el suelo con el pie, impaciente, necesitando alguna manera de expresar la ansiedad que llevaba dentro. Estaba esperando a algo, aunque no sabía exactamente el qué podía ser. Una señal, un fogonazo, un mono haciendo malabares en una enorme pelota de circo… No sé, ALGO. Quizás un sentimiento que naciese en mi interior, algo que dijese que tenía que moverme, avanzar en el momento más adecuado. Pero no era así. El frío que antes fue neutralizado con el valor, la esperanza o los recuerdos que había recuperado, estaba regresando con fuerza, con saña. Esta sensación parecía que no iba a abandonarme nunca, que siempre estaría junto a mí, neutralizándome como si fuera una amenaza. Pero no. Había llegado lejos, había pasado por demasiado. No podía rendirme, nunca más.